Marcel. (Harry Styles & tú)

Capitulo 19

Capitulo 19:

Estaba plantada frente al espejo. Ladeé mi cabeza al verme soltando un suspiro de resignación al ver mi pelo atado con una goma. Varios mechones salían de la pequeña goma haciendo que mis nervios aumentaran. Con la yema de mis dedos, comencé a ahuecar la coleta. 

-No tengo madera de peluquera. -Resoplé frustrada. 

Me resultaba hasta humillante tener amigas con el pelo rizado y enredado y que aún así tuvieran más facilidad que yo en hacerse un simple peinado. Sin darle más vueltas me volví en dirección a mi cama para recoger mi chaqueta.

Andaba con rapidez. Lo más seguro es que llegara tarde a la cita con la señora Piker, la directora de la academia de danza con más prestigio en el país. A penas había tenido tiempo para asimilar el hecho de que me encontraba a pocos metros de mi futuro, ni si quiera Harry, sabía con certeza de que se trataba esto pues, apenas yo lo sabía. 

Apreté el bolso contra mi costado derecho en el momento en el que entré al gran edificio de las pequeñas academias de danza. Tragué saliva en el momento en el que una mujer seria, recta y aparentemente inflexible, se acercaba con paso vacilante hacia mí. 

-¿_____? -Preguntó algo cortante. 

-Si... Yo... 

-Se por qué vienes. -Me examinó.- Por algo he sido yo la que te ha llamado. -Asentí en silencio. -Sigueme. 

Apretando la cuerda del bolso, la seguí. 

Llegamos a su despacho. Pequeño y limpio. Será la típica amargada solterona, pulcra con mal genio. 

Cogí asiento frente a ella. Su mirada volvió a examinarme de arriba a abajo y por su perfecto recogido de pelo, me dio la sensación de que mis pintas no eran las adecuadas. 

-Has tenido la suerte de... Haberme gustado. -Comenzó a decir ella. -El programa, consta de seis meses de ensayos, prácticas y exámenes. ¿Interesada? 

-Si, por supuesto. -Dije con rapidez. La mirada de esta mujer era intimidante. 

-Bien. -Dijo inclinándose. -Rellena esto. -Dijo dejando un bolígrafo sobre el formulario. -Empezarás la semana que viene y cursarás hasta a abril. Tan solo cuatro meses.

Asentí y comencé a rellenar el formulario sobre mí. 

Salí del despacho más relajada. Aquella mujer parecía tener un sarpullido en el culo constantemente. Su carácter era pésimo e intratable. Dejé salir todo el aire de golpe en cuanto salí a la calle. 

Paré en el cruce esperando a que el semáforo me cambiara de color para poder cruzar. Miré a mí alrededor, dandome cuenta de que me encontraba en el barrio de Harry. Miré al frente fijando mi mirada en el parque que tenía delante. Pude distinguir una cabellera rizada. Sonreí para mí misma antes de arrastrar mis pies hasta allí. Harry, llevaba las manos en los bolsillos de su abrigo, su cuerpo algo encorvado radiando aburrimiento y frente a él, estaba la pequeña Susan corriendo de un lado a otro gritando emocionada. 

-¡Vamos Haddy! -Gritó Susan acercándose a Harry y tirando de su manga. 

-¿Adonde quieres ir ahora? -Preguntó Harry aburrido y apartando la arena con sus zapatos. 

-Vamos al columpio. -Dijo sentándose en este. Se balanceó un poco sin resultado alguno por su pequeño cuerpo. Harry suspiró y se colocó detrás de su hermana.