Aveces siento que soy solo un cero a la izquierda,que nadie me toma en cuenta,que a nadie le importó. Eso es aun peor cuándo tu mejor amigo no viene a clases,me siento sola,sin mi mano derecha.
Puede estar enfermo o simplemente decidió no venir...pero cualquiera que sea la razón no la sabré hasta el lunes,solo porque mi teléfono se lo llevo el.
Aunque...podría ir a su casa y mataría dos pájaros de un tiro. Bingo! Eso es lo que haré.
Me dirijo hacia la salida y como siempre nadie me miraba,todos hacían su vida normal y caminaban empujandome como si nunca se hubiesen percatado de que yo estaba en su camino.
La casa de Kris quedaba a unos 40 minutos caminando y 20 en bus. Pero yo no tenia dinero así que decidí caminar hasta ella. Serviría de ejercicio y me ayudaría a despejar mi mente.
Estaba a mitad de camino cuando vi una una polera hermosa en el aparador. Rápidamente entre,seria un buen regalo para Kris por ser tan buen amigo.
-¿buscabas algo en especial? -pregunto una chica muy amablemente
-Me gustaría una polera como la negra del aparador.-respondí señalando hacia donde la había visto.
-Solo la tengo en talla Grande.-Respondió la chica después de llegar con ella en manos.
-Perfecto,me la llevaré.
-¡¿un regalo para tu novio?!
-No,no el es mi amigo. -Respondí a esa pregunta que causó un gran sonrrojo en mis mejillas.
-Vuelve pronto!-dijo la chica al entregarme la bolsa con el regalo de Kris
Mientras caminaba no podía evitar pensar en Kris como mi novio, siempre me trataba muy bien,era lindo,amable,comprensible,simplemente el chico perfecto.
Pero era algo que jamas pasaría,ya que siempre decía que jamas arruinaría nuestra amistad y esta mas que claro que yo no le gusto.
Me entristeció pensarme yo sola y quería regresar a casa,pero ya esta frente a la casa,no había vuelta atrás.
Toque a la puerta y para mi sorpresa su hermana Luz me abrió con una gran sonrisa en los labios,ella era del tipo de persona que te hacen sentir bien con solo verla.
-Que bueno que llegas,Kris y tu tienen que hablar.
-h~hablar de que? - comenzó a preocuparme que estuviera enfermo o se fueran a mudar. Mi corazón comenzó a latir rápidamente pero trate de relajarme. Cosa que no funciono muy bien.
Entre a la casa y subí las escaleras hasta su habitación,la puerta estaba tres abierta así que entre,pero el no estaba ahí. Decidí esperarlo sentada en la silla delante de su ordenador.
Mientras jugaba Halo 5 escuche que la puerta del baño se cerro. Kris había salido por fin. Después de pausar el juego gire la silla,pero lo encontré con una toalla en la cara. Parece que acabó de lavarse la cara. Pero sus ojos no tenían brillo y estaban rojos.
-Kris...
-¡¿A que hora llegaste!? No te había notado
-Como cualquiera...-mi voz se fue apagando al decir eso.
-No me refería a eso...yo,estoy algo ammm....nervioso
-¿por lo que me quieres decir?
-¡¿como lo sabes!? - tenia un tono de sorpresa en su voz,y a la vez se nota nervioso.
-Tu hermana...
-Me gustas.
¿Que?¿es una broma verdad? ¿yo...le gusto?
Admito que me sentí la persona mas feliz del mundo pero,no esperaba esto.