La Caída Del Ángel

Ritual y verdad

En cuanto desperté vi a Gabbe a un lado de mi cama.

-Buenos días.

-¿Ya están preparadas las cosas para el ritual?

-Si, vamos- dijo tomando mi mano.

En la sala que estaba completamente vacía estaba dibujado un círculo, voltee para ver a Gabbe, y este me extendió el brazo para que tomara dos prendas de ropa.

Una playera que me quedaba bastante floja del busto y un pantalón que me quedaba suelto de las piernas. Lo mire arqueando las cejas.

-Esta ropa no me queda.

-Lo se, cuando ocurra el cambio te quedaran bien- me aseguro.

-Y forzosamente tiene que ser negra la ropa- dije entre dientes.

-Si- dijo con media sonrisa.

En cuanto llego Deisy a la habitación, me sentí mas relajada.

-Coloca te dentro del círculo- dijo Deisy.

Obedecí y me coloque dentro.

-Ahora vas a repetir todo lo que yo te diga- me pidió Gabbe.

-Esta bien- le conteste.

Entonces Gabbe comenzó, y yo repetí:

Por medio de este juramento, te pido padre que me otorgues el regreso al cielo, soy tu primera hija, y me arrepiento de haberte abandonado, juro regresar al puesto que se me fue encargado desde un inicio: La líder de los arcángeles y la esposa de Rafael, no volveré a pecar, pero si vuelvo a infligir las leyes, yo misma me mandaré al infierno.

De repente sentí que me convulsionaba, sentía que me estaba quemando...diez minutos de un sufrimiento infernal y Gabbe me arrastró hacia el y me abrazó.
No mintió la ropa que me había dado minutos después me quedaba perfectamente, pero no era momento de admirarme, ahora que recordaba mi pasado.

-Rafael- le suplique.

-Descuida, ya acabo.

De pronto varios recuerdos vinieron a mi memoria, recordé que yo había ido a buscar a Gabriel para que me arrancaran las alas. Y que Rafael tuvo la culpa.

-Tu, por tu culpa- dije señalándolo- POR TU CULPA CAÍ- grite.

-Perdón, perdón- dijo entre sollozos- prometiste escuchar mi versión de lo que paso, durante cien años, no me has dejado mostrar te la verdad -me decía.

-Por favor Giggliola deja que te muestre- me pidió Deisy.

-Esta bien- cedí

-Voy a regresar te en el tiempo, nadie te vera ni te escuchara, tu lo único que harás sera ver que paso, ok- dijo Rafael.

-Adelante- después sentí que algo me jalaba hacia atrás pero solo mentalmente.

Lo primero que vi fue una pequeña casa, así que me acerque, en cuanto entre vi a Rafael, estaba preparando ...la cena, como quería ver otras cosas fui directo al primer cuarto que encontré. Estaba decorado con velas y con pétalos de TULIPANES y un pequeño ramo de orquídeas negras... Precioso.

Tocaron la puerta y me asome, Rafael ya había abierto la puerta. Vi a una ángel tipo barbie, pero mal echa.

Alta, piel blanca, cabello castaño claro casi rubio,bastante delgada y lo único que resaltaba era su busto.

-Que quieres Ariela- dijo Rafael.

-A ti- dijo enlazando sus manos alrededor de su cuello.

-Yo no estoy en el menú-dijo y se apartó- ahora LARGA TE- le grito.

-Porque me cambiaste por ella, fue tentada por Lucifer y tu sigues con ella- lloriqueaba Ariela.

- Entera te LA AMO y además tenemos un hijo.

¿Un hijo?

-Eso es imposible.

-Claro que no lo es, Dios le otorgo esa bendición al ver su deseo de ser madre.

-Sabes, no me importa, TU SIEMPRE VAS A SER MÍO- grito echa una furia y se fue.

Rafael le cerro la puerta y siguió preparando la comida.

Veinte minutos después, alguien toco la puerta...era yo.

-Hola.

-Hola.- dijo con alegría Rafael.

Como no le conteste el siguió hablando.

-Tengo una sorpresa para ti- estaba muy emocionado.

Pero sin decir palabra, lo bese y me dirigí directo a la habitación mas cercana.

-Espera- dijo Rafael sumamente desconcertado por mi comportamiento.

Lo jale por el brazo juguetonamente y lo lleve a la habitación.

¿Que fue eso? Yo no soy así.

De pronto escuche una voz.

-Que rápido caíste Raff. Y esa ingenua creyó que yo le estaba ayudando cuando en realidad ambos sabemos que la vas a odiar por lo que esta a punto de suceder entre ambos y Giggliola no te perdonara por lo que vera- dijo burlándose aquella mujer- Si no eres mío, de nadie mas lo seras- cuando término la frase desapareció.

Su pelo era rojo y enredado, de mi estatura, y delgada.

Escuche pasos, voltee y me volví a ver otra vez.

¿Que demonios estaba sucediendo?

Estaba desconcertada, entonces me dirigí a la habitación; me seguí y lo que vi me partió el corazón en dos... Rafael besando apasionadamente a... Ariela.

- Eres un , eres un... - mi yo pasado no término la frase y se largo por donde vino, abrió la puerta, desplegó sus alas y se marcho.

-No no no, que he echo- decía Rafael.

Ariela se estaba riendo.

-Tu, ¿que me hiciste?- estaba iracundo.

-Un breve hechizo que me recomendó Lilith.

-Espero que te pudras en el infierno... LARGA TE- rugió Rafael.

Ariela tomo sus cosas y se marcho.

Había escuchado de los triángulos amorosos pero esto era una ridicules. Rafael y yo eramos pareja pero Ariela y Lilith lo quieren o lo desean no se y en mi caso es Lucifer.

En que jodido problema me fui a meter.

Cuando regrese. Lo primero que dije fue.

-¿Como hiciste eso?

-Si te refieres a regresar te al pasado es muy fácil, todos los arcángeles y ángeles tenemos un objeto que archiva todo lo que ha pasado a lo largo de nuestra vida... el tuyo es un anillo- me lo puso delicadamente- y este se te había olvidado en la casa, yo lo deje en la cocina hací que capto todo...

Después de un momento de silencio dijo.

-Entonces ¿me has perdonado?

-Si, tu no tuviste la culpa y yo debí de haberte escuchado- me lamente.

Me dio un beso en la mejilla y sonrió.

-Me alegro porque Deisy y yo vamos a ser tus entrenadores, así que vamos a hacer un leve calentamiento.

-El tiene razón Giggliola- dijo Deisy.

-¿Para que?

-Para la pelea- dijeron al mismo tiempo.