Capitulo 12: Confundido

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(Heechul)

Me habían llamado desde el Juzgado en plena madrugada y había venido a todo lo que daba, con un mal presentimiento en el pecho.

Siwon me había atajado en la entrada del mismo Juzgado con la cara desencajada, pero aún yo no tenía idea de lo que pasaba. A decir por su cara, algo realmente muy malo había acontecido, lo que hizo que el presentimiento se hiciera aún mas fuerte. Y cuando me dijo que un motín en el penal había dejado con la mitad del reclusorio hecho cenizas, con varios muertos y varios prófugos, tuve la certeza de que horrible era el adjetivo mas propicio para todo.

Habíamos llegado al penal en el auto de Ryeowook, junto con Siwon y Donghae. La escena era desastrosa.

Las columnas de humo podían divisarse desde hasta dos kilometros a la redonda y el calor cuando llegamos al lugar era realmente sofocante. Había escombros por toda la calle. Los autos que habían quedado estacionados en los alrededores habían sido reducidos a chatarra.
Los policias se encargaron de decirnos los pormenores de todo. A medida que avanzaban, la sangre se me congelaba en las venas. La saña y la magnitud del motín lo llevaba a convertirse en atentado, y aquello no me gustaba en lo absoluto. Y la sensación del pecho no se me iba.

Después habíamos vuelto al Centro Judicial más sombríos de lo que habíamos partido, y angustiados por la información. Ahora no sabíamos qué hacer ni por donde empezar.

-Esto no puede ser. Siento como si la pesadilla se volviera realidad. - dije en medio de un suspiro. Y si, era lo que nos faltaba.

-Debimos haberlo supuesto.. - intervino Siwon.

-¿Cómo ibamos a suponerlo? Esto fué algo inesperado hasta para los mismos reclusos, por lo que pude ver. - dijo Wook, pensativo. Pero algo a mi no me cerraba.

-Y uno de los profugos es Sungmin. Eso me preocupa más que el hecho mismo. - habló entonces Donghae, que había estado en silencio todo el tiempo.
Estabamos diezmil veces peor que mal. Con Sungmin prófugo y sin rastros de él, podíamos esperar cualquier cosa desde cualquier ángulo.

Estabamos igual que al principio, hace mas de dos años. O quizas peor.

-Creo que Sungmin tiene que ver con todo esto - dijo otra vez Hae. Palidecí ante sus palabras, al sentir que algo encajaba de pronto.

-Que demon...-intento articular Ryeowook, pero él mismo se interrumpió, intentando razonar.

-Digo que creo que Sungmin podría estar detras de este desastre.

-¿Porqué lo dices? - dijo Siwon, claramente intranquilo.

Hae lo observó, miró al resto y luego hacia el piso. Su expresión era fria, como siempre. Ya no quedaba rastro del Donghae que había llegado hacía dos años, transferido.

-La forma de proceder, de no levantar sospechas y de llevar a cabo. Todo. Es su estilo. - replicó Hae.

-¿Que ganaría? - dijo Wook.

-Libertad. - dije, sin pensarlo - Si es así como dice Donghae.

Entonces nos interrumpió el Juez de Instrucción, que necesitaba a Ryeowook urgente. El aludido se levantó y salió en compañia del Juez, mientras que Hae hacía tambien lo suyo. Siwon lo observó de forma atenta, pero discreta, cosa que él no notó pero yo si.

Donghae hizo una leve inclinación a modo de saludo y salió.

Esperé un momento, calculando cualquier eventualidad de que Hae volviera, y encaré a Siwon. Su comportamiento con respecto a él no me estaba gustando nada.

-¿Qué es lo que te pasa con Hae?

Mi voz resonó en la estancia como si de pronto no hubiera nadie.

-Eso, es algo que a tí no te importa. - me contestó con frialdad.

-En parte no. Pero quiero a Donghae y también a ti y lo que pasó el otro día en la azotea...

-Fué un jodido error. Sólo eso. - me cortó. Se levantó con garbo y salió de la oficina, evidentemente molesto.

Suspiré y cerré los ojos. No me gustaba pelearme con él, pero tampoco veía bien lo que estaba pasando.

El sonido de la llamada entrante en mi teléfono me sacó de mi repentina ensoñación. Miré la pantalla y atendí al instante.

-Amber..

-¡¡Hola Chul!! Oye, ¿quieres venir a comer en casa? Es que mi hermano tiene visitas y me pareció que quizas querrias venir...

La escuché en silencio y sonreí. Ella era tan mona conmigo desde ese momento en que me vió en la ruta con mi moto rota, que me era imposible decirle que no a algo. Accedí no sólo por eso, sino porque quizás asi mi cabeza se despejara un poco. Pero el hecho que nombrara a su hermano me dió el pequeño empujoncito que necesitaba para decidirme. Quizas ahora si, pudiera hablar con él.

-De acuerdo. Estaré alli en unos largos minutos.

-¡¡Genial!!

Colgué y tomé mis cosas, dispuesto a salir. Al llegar al estacionamiento, divisé cómo Hae subía al auto de Wookie y lentamente arrancaba, para desaparecer después. Era algo bueno que el enano esté predispuesto a ayudarlo. Si alguien la había pasado relamente mal era Donghae.

Me encaramé en mi moto y salí pitando de allí. Pronto, crucé los límites de la ciudad y me dirigí hacia la casa de Amber. La perspectiva de sacarme aquella duda me hacía ir mas rápido de lo normal y, cuando quise acordar, ya estaba ingresando a la ciudad en donde vivía ella con Lucky.

Recorrí las calles conocidas ya para mi hasta divisar la casa qie buscaba. Estacioné y toqué, un poco impaciente.

A los pocos segundos abrió y su bonito rostro apareció, pero había algo en él que no me gustó. No estaba fresca y sonriente, con el ímpetu que la caracterizaba. Y eso me preocupó al instante.

-Amber..

-Te estaba esperando Chul.. vamos, entra.

Se giró y empezó a encaminarse hacia adentro, con ademán de que yo la siguiera. Pero la detuve, tomándola de una de sus muñecas. Ella se volvió y me miró extrañada.

-¿Estas bien? - le pregunté sin rodeos. Ella me miró y luego sonrió, dejandome ver esa sonrisa a la que me tenía acostumbrado.

-¡Si! ¿Porqué?

-No se, te veo algo... apagada..

-... es que me duele un poco la cabeza.. debe ser por eso. - me dijo haciendo una mueca, pero sin dejar de sonreir.

Asentí, le devolví la sonrisa y la solté. Ella se giró de nuevo y entró a la sala de su casa, conmigo pisandole los talones.

Allí sólo había un joven de bellas facciones pero, a juzgar por su apariencia, era aún muy joven.

-Él es Kim Tae Jung. Es uno de los amigos de mi hermano. - dijo de pronto Amber.

Hice una pequeña reverencia al chico, el cual se había parado y me devolvió en saludo. Nos sentamos en los sillones y Amber se retiró hacia lo que parecía ser la cocina. Por algún motivo que no entendí, el chico Kim parecía algo nervioso.

Entonces su celular comenzó a sonar de forma apremiante. Él lo observó y atendió al instante, levantandose y saliendo de la sala.

Me quedé confundido, un poco fuera de lugar, y repentinamente solo. Apoyé mis codos en las rodillas y sepulté mi cabeza en mis manos, mientras suspiraba. Entonces escuché pasos en la sala. Alcé la cabeza, esperando ver al chico que se había ido. Pero en su lugar estaba Lucky, mirandome de manera extraña. Me paré como impulsado por un rayo, enfrentandome a él. Ahora tenía la oportunidad.

-Heechul..

Me envaré cuando escuché mi nombre en sus labios. Era una sensación extraña, fea, que me dejaba confundido, más de lo que ya estaba. Me plantee y tomé valor, inspirando. Lo miré y, dejando de lado ese extraño sentimiento, me propuse averigüar lo que tanto había anhelado.

-¿Quién eres tu?  - pregunté.

Y volví a sentirme confundido.

El Pacto II [2da Temporada] [EunHae] [+18] [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora