Creó Que Te Amo

Capitulo: 5 ¿Matrimonio? (parte 1)

Laxus y Makarov bebían con tranquilidad en la barra del gremio, disfrutan de aquel momento, aunque tenían horas sin hablar gran cosa, el silencio los relajaba.

—Eh estado pensando en algo. —Aquel rubio tomaba una aptitud más seria, su vista no se alejaba de su tarro.

—Sueltalo, ¿Que es? —Cuando su nieto tomaba aquel aspecto, sabia que algo serio se avecinaba.

—Le pediré matrimonio a Mirajane.

—¿Matrimonio?

—si... ¿algun problema?

—No, ninguno, es solo que debes estar muy seguro de ello, no es algo que se tome a la ligera, además hablamos de Mirajane.

—Viejo es obvio que estoy seguro, quiero pasar el resto de mi vida a su lado o el tiempo que ella me aguante...

—Bien, ¿Como piensas proponérselo?

—Aún debo pensar en ello y bueno, supe del anillo de bodas de mi madre, quiero que todo sea perfecto.

—¿El anillo de tu madre? No me digas que piensas...

—Pues si... es familia despues de todo.

—Lo se, bueno, haz lo que tengas que hacer, si necesitas mi ayuda, solo dilo, ¿de acuerdo?

—Gracias viejo.

—No tienes nada que agradecer.

—¿Sabes donde puedo encontrarla? no se en donde vive.

—Claro, no vive nada lejos. —Makarov le dio la direccion y se quedaron hablar un poco más.

El maestro esta dispuesto a apoyarlos en lo que pueda, al fin de cuentas, es su nieto, pero antes, Laxus tenía que proponerselo, y la albina aceptar, aunque estaba seguro de que así sería. Al paso de unas horas decidió partes hacía la casa de aquella persona, al llegar no la encontro, decidió dar un pequeño paseo para matar el tiempo y volve más tarde. Una hora después, se lograba ver movimiento en el interior de aquella casa, el rubio estaba parado fuera de esta, como queriendo y no acercarse. Tenía que hacerlo, así que toco un par de veces, esperando a que abrieran la puerta, una persona se asomó, al ver de quien se trataba, esta se quedo plasmada, no esperaba verlo a fuera de su hogar.

—¿Que haces aquí? No es que me moleste, pero me sorprende que vengas a mi casa.

—Hola, lo sé, a pasado mucho desde la ultima vez que nos vimos.

—Si, mucho tiempo, pero pasa, estas en tu casa, ¿a que se debe tu visita? —Una ves que el rubio entro, esta le indicó a donde ir, precisamente a la sala de estar.

—Gracias, bueno, es una larga historia.

—Tengo tiempo, así que cuentame el motivo de tu visita. —Le sonrio.

—No me culpes si te aburres, Nozomi.

—No te preocupes por ello, tu habla.

—Bien, lo que sucede es lo siguiente. —Laxus le conto todo, dejando boquiabierta aquella joven.

—Claro que te ayudare, cuenta con ello. —Una amplia sonrisa estaba dibujada en su rostro.

—Muchas gracias... y al respecto al anillo de mi madre...

—Lo sé, lo sé, lo buscare, ven por el más tarde y mucha suerte. —Se levanto para darle un pequeño abrazo en señal de felicitación a lo que el rubio correspondió.

—Bueno, muchas gracias, cuento contigo. —Laxus salió de la casa de Nozomi y ahora se dedicaria a pensar en como se lo pediria, para el es algo dificil ya que no suele ser muy romantico y expresivo, pero tiene sus momentos, se le ocurren varias ideas de como podria pedirselo, así continuó el resto del camino de vuelta a Fairy Tail, perdido en sus pensamientos, cuando llego se encontro con los hermanos de la Strauss mayor.