Waiting for you ❤️

Tercera Llamada

Mientras caminaba los pocos pasos que me separaban de la puerta de mi casa, no podía dejar de pensar en lo maravilloso que era estar junto a Alex, en ese momento deseé con toda mi alma que tal y como me lo había prometido, nuestro plan perfecto, nuestro amor,  durara por siempre...

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El resto de la semana pasó rápidamente  y de forma tranquila. Alex se había convertido oficialmente en mi fotógrafo de planta; su trabajo consistía en crear tomas para el álbum y publicidad, además de fotografiarme durante las presentaciones y ensayos; por lo que a mi mamá no le quedó más remedio que aceptar a regañadientes que pasáramos la mayor parte de los días juntos trabajando en diseñar nuevas ideas para el arte del disco. Eso sí, tenía un estricto horario para estar de regreso en casa antes de las 8:00, y cada vez que podía, ella se unía a nosotros. Alex no era muy feliz con la idea pero lo sobrellevaba.

El viernes, Alex fue a buscarme al salir del colegio para llevarme a comer, acto que se había convertido en una especie de rutina establecida a lo largo de la semana.

-¿Cómo estuvieron las clases?-Preguntó en cuanto entré al auto.

-Bien, supongo. Realmente no presté mucha atención, estoy muy nerviosa por la presentación de mañana.-Respondí mientras abrochaba el cinturón de seguridad.

-¿Cuántas veces necesitas que te diga que todo saldrá bien?, si quieres ser cantante profesional tendrás que aprender a lidiar con tu pánico escénico.-Comentó Alex mientras tomaba mi mano.

-Lo sé, es solo que no consigo sacarme estos nervios de encima. En cierta forma creo que el estar nerviosa antes de una presentación ayuda a que salga perfecta.

-Un poco de nervio no es malo, solo debes aprender a manejarlo para que no te estreses.-Dijo mientras rozaba su pulgar contra mis nudillos.

-Como siempre tienes razón Sturrock.-Dije antes de besarlo.

-Estamos para servirle señorita Adkins.-Respondió sonriendo.-Entonces, ¿En dónde se te antoja comer?

-Mmm, tengo antojo de hamburguesa, ¿Qué dices? ¿Hacemos un viaje al auto-service de McDonald's?-Pregunté haciendo ojitos de niña tierna.

-¿Acaso tenemos 5 años?, ¿Es enserio Adele?-Preguntó divertido.

-Hey, tu preguntaste...

Después de comer Alex me llevó a casa para ensayar una vez más con los chicos; quienes ya estaban esperando afuera.

-Hasta que llegan tortolitos.-Se quejó Miles en cuanto bajamos del auto.

-Lo siento chicos, había mucha gente en el lugar al que fuimos a comer.-Me disculpé mientras abría la puerta.

-Así es, eso suele pasar cuando vas a comer a un lugar para niños de preescolar.-Se burló una vez más Alex.

-¿Pues a donde fueron?-Preguntó Ben sacando la guitarra del estuche.

-No quieres saber.-Dije para cerrar la conversación y evitar que Alex siguiera burlándose de mi.-A ensayar se ha dicho.

-En ese caso me retiro, tengo papeleo que terminar.-Dijo Alex antes de depositar un beso en mis labios y despedirse de los chicos.

-Alex,  ¡espera!-Dije siguiéndolo hasta la puerta principal.-Mañana a las 8:00, no lo olvides.-Le recordé no sin antes acercarlo a mí y besarlo.

-No me lo perdería por nada en el mundo.-Dijo respondiendo a mis besos.-Si te pones nerviosa solo voltea a verme, a mí y solamente a mí. ¿Entendido?-Agregó tomando mi rostro entre sus manos.