Me levante de la cama para cambiarme.
Me puse un pantalón de mezclilla deslavado, unos zapatos abiertos de color violeta y una camiseta blanca que decía I'm a dreamer. Amarre mi corto cabello en una cola alta un poco despeinada y tome mi mochila, la cual también era de color violeta y me apresure para bajar a desayunar.
Esta vez me había levantado veinte minutos antes para no salir corriendo a alcanzar el autobús. Así que desayuné con calma, lave mis dientes y me despedí de mi mama.
Camine un poco para después tomar el autobús. Y esta vez si vi en donde me sentaría.
Y ahí me encontraba, sentada alado de Edward Pitchmen, un chico agradable, divertido y guapo también.
-Hola, Colaline ¿cierto?. Me pregunto el con una sonrisa en sus labios.
-Así es, y tu eres Edward, ¿verdad?. - Oh vamos a quien quería engañar por supuesto que sabia quien era, el me gusto durante tres años, como no conocerlo.
-El mismo. Me contesto y al mismo tiempo estiraba su mano para estrecharla con la mía.
No quería quedar como una tonta frente a el, así que rápidamente estreche su mano.
Al hacer contacto su mano con la mía sentí un ligero cosquilleo recorrer todo mi cuerpo, creo que el también lo sintió porque rápidamente soltó mi mano.
Por dios que cliché se sintió eso.
Durante todo el camino nos la pasamos conversando, este chico realmente me agradaba.
Minutos después me percate que habíamos llegado a las escuela.
-Fue un gusto conocerte Coraline, espero conversar con tigo en otra ocasión o mas bien espero que vuelvas a sentarte a mi lado para seguir conversando. Me dijo el con una sonrisa.
-A mi también me dio mucho gusto conocerte Edward. Nos vemos luego. Dije para después bajar del autobús con una enorme sonrisa en mi rostro, era una de esas sonrisas tan grandes que parecían iluminar a una ciudad entera.
Y como todos los días mi hermosa amiga me esperaba en la entrada de la escuela.
-¡Hola!. La salude emocionada.
-Hola Coramor. Me contestó. - Pero que sonrisa tan hermosa, me recuerdas al gato de Cheshire de Alicia en el país de las maravillas. Comenzó a reírse y yo me sume a su risa.
-Muy graciosa eh. Trate de decir seria pero no pude contener la risa.
-Bueno ya hablaremos de tu sonrisa resplandeciente después ahora hay que ir a clases. Me dijo mientras nos dirigíamos a la clase de español.
Y mi día perfecto se estaba convirtiendo a cada minuto que transcurría aun mejor. Varios maestros no asistieron a clases y el maestro de matemáticas estaba incluido entre esos maestros.
La señora Mc. Huff había sido reemplazada por una nueva cocinera.
Todo era perfecto hasta ahora.
HOLA
BUENO ESPERO QUE ESTE CAPITULO LES HAYA GUSTADO Y ENSERIO NO SABEN LA GANAS QUE TENIA DE ESCRIBIR DESPUÉS DE TANTO TIEMPO, PERO AVECES EL TIEMPO NO ESTA A TU FAVOR.
💛Edward en multimedia💛¡HASTA EL PRÓXIMO CAPITULO!
ESTÁS LEYENDO
Mi Mundo De Elefantes Rosas
Teen FictionCoraline, una adolescente a la cual le gusta mucho leer, tiene mucha imaginación y es muy creativa. A Coraline no le gustaba para nada la vida que tenía, y fue por esa razón que un día creo un pequeño mundo en su mente en donde todo era perfecto. U...