Capítulo 11

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- porque haces esto? - le digo con lágrimas en los ojos después de que me marcará nuevamente. - Porque vienes a arruinar mi vida.

- eres mi mujer... tú me perteneces.. - dice abotonandose la camisa.

- si yo no soy feliz, tú tampoco lo serás - le digo llorando. Él solo me mira y se va azotando la puerta.

Elliot me ha lastimado nuevamente, son las 2 de la mañana y mi pasado empieza a inundar mi mente.
Ya no quiero esto.

- te juro que te arrepentirás Elliot McColl - digo limpiandome las lágrimas. Mi pasado no tiene lugar en el presente, y hará todo lo posible para arruinarle la vida a Elliot, se arrepentirá por volver,.

**
- Emily que tienes - dice mi abuela al verme que estoy pérdida viendo la ciudad desde los ventanales de mi oficina.

- nada abuela... estoy bien - giro y miró a mi abuela retocandose el maquillaje.

- adonde vas? - sonrió

- por ahí Emily Grace - sonríe. - Ahmed Wayne a estado por aquí buscándote - me guiña el ojo.

Sonrió y empiezo a trabajar. Mi abuela sigue ahí viéndome como si nunca me hubiera visto.

- que pasa abuela? - le pregunto sin quitar la vista de la computadora.

- que tienes Emily... tienes un moretón en el muslo, y tiene marcas en el brazo - dice preocupada.

- me caí en las escaleras abuela - lo digo sin pensar.

Ella se levanta se despide y sale de mi oficina.
Me quedo viendo la pantalla de la computadora, Elliot me volvió a desgraciar la vida, y tendrá que pagar por todo esto.

Que hace aquí, ahora que lo olvidé, jamás podré ser feliz? Que quiere de mi?

-señorita Reynolds. - entra mi secretaria - le mandan- entra con un gran ramo de rosas blancas. Y me la entrega, miro la nota que esta en medio de las rosas y son de Elliot.

- llevatelas... tiralas a la basura o quedatelas - le digo y vuelvo a mi trabajo.

**
Son las 10 de la noche, al fin estoy llegando a mi apartamento.
Estoy cansada, mi día fue muy pesado, he pasado en construcciones y en juntas.

Entró tranquilamente a mi apartamento, y al encender la luz, miro a Elliot sentado en mi sofá con un puro en la mano.

- en mi casa no se fuma - le digo, cierro la puerta y paso enfrente de él como si no estuviera ahí. Este hombre en algún momento deja de fumar, no me imagino el daño que tiene en sus pulmones.
Porque me preocupa esto?

- Emily.. - se levanta y se dirige hacia mi, deja la última carta que le escribí enfrente de mi. - nunca he querido borrar esos recuerdo... fuiste lo mejor que me pudo pasar en mi vida.

Intento alejarme pero es imposible .
- quien te dio esto? - le digo enojada.- después de lo anoche, jamás te perdonare.

Trata de acercarse a mi pero se detiene, al ver mis moretones de la lucha que hice para que no me marcará de nuevo.

- no sabes cuanto odio a ese imbécil - dice con cólera refiriéndose a Jacob.

Escucho mientras me dirijo al refrigerador por algo de beber.

Elliot se levanta y se dirige a mi.

Se sienta en la barra,viéndome fijamente.
Nos quedamos en un silencio demasiado incómodo, y me desespero en cuestión de segundos.

- no tenemos nada de que hablar, todo se acabo - le digo sacando más jugo.

- No, no se ha acabado.. porque lo que siento por ti es algo muy fuerte. - me dice tranquilo como si lo estuviera diciendo en serio.

- qué tan fuerte? - me acerco de manera seductora hacia él, me observa detenidamente.

Él me toma de brazo y me aprieta muy fuerte. - deja de jugar, deja esa fachada de mujer fría que conmigo no va a funcionar...

- ah no. - me muerdo el labio y voy bajando mi mano hacia el cierre de su pantalón.

Con una mano toma mi cara y me aprieta fuerte acercándose a mi. - aunque lo niegues, aún sientes algo por mi.

Me empiezo a reir mientras él me suelta un poco de su agarre - qué pensará tu esposa si se entera que estas aquí... - le digo. - no te recomiendo que lastimes a una mujer que no conoces...

- quien dice que no la conozco - me sonríe pensando que tiene ventaja.

- ella no tiene la marca - lo enfrentó. - Porque? Para que la mafia italiana no le haga nada.

Me toma sin pensar de mi brazo y lo lleva a la espalda y me pega a la pared.
- qué dices? - me dice furioso.

- para que me hiciste esas marcas? Para que me mataran más rápido... una vez más me pones en peligro, eso no es el amor Elliot- le digo.

Me suelta, volteó a verlo y lo miro recargandose en la pared, quedamos frente a frente.

- ellos no te pueden tocar si tienes esas marcas... te dije que siempre te protegeria - me dice.

- y de ti quien me protege?.

Suspira, acomoda sus manos en los bolsillos, agacha su cabeza y vuelve a mi.

- no fui detrás de ti porque, sí, porque no quería nada contigo, tenías muchas expectativas de mi, que no podía llenar... no estaba listo para sentar cabeza y tú eras una niña.

Mis lágrimas caen pero sigo sin bajar mi guardia, aunque sus palabras me han lastimado.

- qué quieres de mi? - le logró decir.

- regrese por ti, porque nunca es tarde, porque me Di cuenta que eres todo lo que quiero... nunca te deje sola, vigilaba hasta tu sueño pequeña...- se acerca a mi - vine a luchar por tu amor, para estar juntos y recuperar el tiempo que hemos perdidos...

Junta nuestra frentes, mi corazón late muy fuerte que siento que él escucha como esta de acelerado.

- mi querido Elliot - le digo dulcemente, voy levantando mi rostro para alcanzar sus labios, estando muy cerca de sus labios le logró decir. - ni muerta volvería contigo.

Finalmente me alejo de él mientras escucho que le pega a la pared.

- esta bien, Emily Reynolds, juguemos- dice detrás de mi.

Sigo caminando, siento como me toma de mi cabello y con otra mano va bajando por mi vientre. Hala mi cabello haciendo que haga mi cabeza hacia atrás, él se acerca a mi cuello.

- qué tanto amas a Jacob? - dice

Intentó soltarme pero baja más su mano hacia mi ser.
- contesta... - dice apretando dientes.

- mucho - logró decir.

Me suelta y se va alejando - si tanto lo amas, no te cases con él... - dice cerrando la puerta de mi apartamento.

Dejándome ahí, mis lágrimas saliendo sin control, sin saber que hacer para proteger a Jacob, daría la vida por él, no permitiré que Elliot le haga daño, aunque eso sea lo último que haga.

Siempre Tuya Donde viven las historias. Descúbrelo ahora