Siempre Tuya

Capítulo 36

- soy dueño de varias empresas, de petróleo, energía y tengo varios clubs en diferentes ciudades. - le digo con seguridad mientras ella presta atención esperando que de más detalles.

Ella sonríe, no me quita la mirada de encima.
Ay Emily!, lo que muero por hacerte mía.

Se empieza a morder el labio mientras le sigo hablando de mi. Ella me escucha con demasiada atención, la hago reir, y cada vez la miró más interesada en mi.

- cuando te pregunte por tus marcas me dijiste que tuviste una adolescencia dura... que paso? - me pregunta con mucha curiosidad.

La quedo viendo a los ojos, ella sigue poniéndome atención cuando yo debería de hacerle preguntas a ella, pero al parecer ella me quiere conocer.

- ehh... - agacho la cabeza y sonrio. No le quiero decir que cuando era un simple adolescente vendía droga y que un día me secuestraron los enemigos de mi patrón, y por no decir donde estaba me hicieron sufrir, me quemaron con sus cigarrillos, me pegaban con cables, dejándome varias cicatrices en la espalda, y una en mi cara, le era fiel a mi patrón, sin embargo él me salvo de esos hombres por lo tanto siempre estaré agradecido con él - mis padres me mandaron a un internado cuando era pequeño, y me escape... -ella de ríe, sabe que le miento.

- ya... si no me quieres decir, solo Dímelo, no me tienes que mentir - sonríe.

- esta bien... me secuestraron - le digo.
Ella suspira y se disculpa. - señorita Reynolds he hablado mucho de mi, ahora quiero oír de usted... - le digo.

- casi no recuerdo nada interesante de mi vida señor McColl, o simplemente nunca fui interesante... -agacha la cabeza.

Se muerde el labio. Y se acomoda de nuevo en la silla, siento como si quisiera hacer algo pero esta indecisa.

Nos miramos a los ojos, ella se acerca a la mesa, hago lo mismo, coloca sus brazos en la mesa noto cuando se empieza a sonrojar.

- me encanta cuando te sonroja... - ella sonríe - siento como si quisieras decir algo... o me equivoco?.

Muerde su labio con más fuerza - porque piensa eso? - siento como acerca su pierna hacia la mía debajo de la mesa.

- lo miro en la forma en que su cuerpo está tenso señorita...

- ah si - su respiración se vuelve inestable, y pasa su lengua por sus labios.

- si me permite, me encantaria, tocarla, besarla - le digo de manera de complacer esa atracción que siente hacia mi. Ella levanta la ceja.

- que más... - dice acariciando mi pierna con la suya.

- quiere que le sea sincero... - le digo. Ella asiente con la cabeza y se muerde el labio lentamente. - me encantaría... - le sonrió - hacerla mía, ahora, duró, en mi apartamento. -le digo lentamente.

Ella se sonroja. - suya? - se acerca a mi.

- es demasido hermosa señorita Reynolds - le digo.

- que mas harías conmigo?- quiere que siga.

- Muchas cosas que ni te imaginas - le digo de manera que la excite más. - señorita Reynolds le repito que no aguantaría una noche conmigo - la sedusco.

- me encantaría convencerme de eso señor McColl - se inclina un poco en la mesa de manera que me muestra sus pechos.

Me muerdo el labio al imaginarmela desnuda en mi auto, porque si llegara a suceder creo que no llegaríamos muy lejos.

Sigue moviendo su pierna en la mía, hace que me excite, pero debo de controlarme.

- que pasa Elliot? - sonríe, sabe lo que está provocando en mi.