Conocer.
El teléfono suena en medio de la habitación vacía, se oyen pasos desde la cocina, que pasan por el pasillo apuradamente hasta detenerse frente al aparato que sigue repiqueteando. Unos cuantos segundos en que el tiempo se sostiene y es contestado, el silencio efímero vuelve a ser interrumpido.
-Do Kyungsoo, -habla con voz clara y un poco de nerviosismo muy típico de él al contestar llamados- ¿Sí?
-Ah, usted es el joven del anuncio, ¿no? -La voz amable de una mujer madura se escucha a través de la línea. -Un gusto, soy la Sra. Kim. ¿Se encuentra disponible? Me gustaría contratarlo por un plazo de un semestre.
-Un gusto igualmente. ¿Seis meses?, -pregunta dudoso, siendo la primera vez que alguien desde un principio decide contratarlo por tanto tiempo.
-Sí, un semestre. ¿Hay algún problema?
-No, ninguno. Primero necesito algunos datos sobre el paciente para estar preparado en el cuidado -dice Kyungsoo mientras busca su borrador y algún lápiz dentro de la alta repisa de su pieza.
-Por supuesto.
Al hallar lo que buscaba, acomoda el teléfono apoyándolo en el hombro contra su oreja y se sienta en la orilla de la cama, preparado para escribir. -¿Cuál es la relación que tiene con la persona? También necesito el nombre, por favor.
-Es mi hijo, su nombre es Kim Jongin. -El tono de la Sra. Kim de pronto se hace más dulce, con cariño palpable a pesar de los kilómetros de distancia entre un lugar y otro. -Es un niño realmente saludable y obediente, no creo que le presente mayores problemas.
-Muy bien, -murmulla distraído anotando la información. -¿Qué discapacidad tiene?
-Afasia -una pequeña pausa antes de que agregue apresurada-pero es Afasia motora, él entiende. Puede leer y escribir, es muy inteligente.
-¿Edad? -continúa con el cuestionario de siempre, más tranquilo al saber que alguien con afasia no es realmente difícil de tratar.
-Diecinueve.
-¿Medicamentos?
-Ninguno.
-¿ Alguna terapia que esté realizando o haya realizado con antelación?
-La dejó hace dos años. Era en un centro juvenil especial para chicos con problemas lingüísticos.
-¿Jongin tiene algunos otros problemas, Sra. Kim? Necesito saber. Aunque piense que sea algo menor. -Esta vez habla serio, recordando malas experiencias a causa de no haber sido bien avisado de esta información en ocasiones anteriores.
-¡Ah! Jongin suele tener problemas para dormir -comenta con sencillez. -A veces se despierta asustado en la noche, pero nunca lo he consultado con algún doctor ni nada.
-Muchas gracias. A eso me refería ¿Tiene algo que agregar de su hijo Sra. Kim? Lo que sea.
-No, eso es todo.
*
El primer día de Octubre es el mismo día en que Kyungsoo toca el timbre en la entrada de la propiedad Kim, rodeada de altas murallas y rejas oscuras que incapacitaban la vista hacia el interior. Hacía una semana desde que había recibido la llamada de la Sra. Kim, y después de haber hablado y aclarado todo sobre trabajo, de alguna forma, Kyungsoo se encontraba feliz de tener asegurados seis meses de repentina estabilidad. Normalmente eran semanas, días, horas específicas, y con suerte un par de meses cuando un cliente lo contrataba, en intervalos de tiempo en ocasiones, preocupantes, pero no se quejaba; le gustaba lo que hacía, disfrutaba el cuidar y tener responsabilidades, hacer bien las cosas, a pesar de que no era un profesional todavía.
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I. Repentant Aphasia; Kaisoo · Saga GC
FanfictionActo 1. ❝Hay tantas cosa que no sé cómo hacer. ¿Podrías darme consejos mañana? No sé cómo tomar tus manos sin que mi corazón salte rápido y más rápido. No sé cómo explicar que mi interior vibra cada vez que te veo, que te toco, o que te beso. No sé...