En Busca De Mi Misma

Ultima semana de libertad

Quedaba solo una semana de vacaciones, es decir, que en tan solo siete días estaría descubriendo la tan mencionada "Universidad".
Tenía nervios, pero eso no me impediría  pasar mi última semana de vacaciones al máximo . Además... Que tan mala podía ser.
Lunes, 09:00 am
Decidí levantarme, darme una ducha y hacerme un desayuno.
Mi mamá y Henry dormían, en cuanto a Dominic, jugaba videojuegos en la sala.
Llegué a la cocina y abrí el refrigerador, lo primero que atrajo mi atención fue un gran trozo de pastel, puse una cara de felicidad extrema y lo saque del refri y puse el plato en la mesa de la cocina, mire a Dominic pensando si ser buena persona y ofrecerle o si ser mala y comérmelo sola...
No pude contra la bondad de mi corazón...
- Dom... - dije suspirando.
- Dime... - dijo sin despegar la mirada del televisor.
- Hay pastel, ¿quieres un poco?.
- ¿Pastel? - giró su cabeza hacia mi como un búho.
- Sip - puse cara confundida y solté una risa.
- Si! Dame dame! - dijo estirando sus brazos hacia mi y abriendo y cerrando sus manos una y otra vez.
- De acuerdo! - reí - ¿lo quieres con un vaso de chocolatada? - dije mientras cortaba en pastel por la mitad.
- Me conoces... - puso una cara entre feliz y una que pondría un pervertido.
Hice dos vasos de chocolatada, tome los dos platos de pastel y puse todo en una bandeja, fui a la sala y me sente dejando las cosas en la mesita de café.
- Te juego una partida - dije tomando el otro mando.
- Segúro! Pero cuídate princesita... He estado practicando.
- A quién le dices "Princesita", Gallina! - le dije enfrentandome a el.
- Pues si eres tan valiente juegemos!
Empezamos a jugar y justo cuando estaba por ganarle, mi celular sonó. Puse pausa al juego y tome mi teléfono.
Llamada entrante de Chloe
- Buenos días!! - dije feliz
- Buen día! ¿Oye estas en casa?
- Si, ¿vas a venir?
- Estoy por salir de mi casa, ¿estas sola?
Le dije a Dominic que fuera a ver si mamá y Henry estaban en su habitación.
- Aguarda... - dije mirando al pasillo esperando a Dom.
El volvió y negó con la cabeza, no podía hablar por que tenia la boca llena de pastel.
- Solo esta Dom, Henry y mi mama salieron.
- De acuerdo - se escucharon unos murmuros.
- ¿Por qué? - pregunté curiosa.
- Es que compraré unas donas y quería saber cuantas llevar.
- Eres la mejor, ¿lo sabías? - dije.
- Lo sé - dijo con voz orgullosa.
- ¿De dónde son?
- De Dunkin Donuts. - me dijo sabiendo que me pondría feliz.
- Yeeei! - mire a Dominic - Dom! Chloe nos traerá donas Dunkin!!
- Gdaziaz Kloi!!! - gritó con pastel en la boca.
- Jajajajaja! - rió a través del teléfono.
- ¿En cuánto llegas? - pregunté.
- En 5 minutos, ya estoy cerca.
- De acuerdo! Te espero.
Fin de la llamada.
Me quedé pensando y mire a Dom.
- Oye ¿a qué hora se fueron Henry y mamá?
- Dejaron una nota que decía que se fueron temprano a hacer unas cosas.
- Ahh... Pensé que dormían.
- También yo.
Terminé mi desayuno y lleve todo a la cocina.
- Oye Jun... - dijo Dom - ¿te molesta si hoy lavas tu los platos? Pensaba darme una ducha.
- Claro, no hay problema!
- Gracias! Eres la mejor! - agarró mi cabeza fuerte y me hundió un beso en la mejilla deformando mi cara.
- Cuanto amor! - dije riendo.
- Oh! Sobre eso... - dijo.
- ¿Sobre el amor?
- Si...
- ¿Qué pasa? - Pregunté con curiosidad.
- Cuando llegue Chloe...