Me di vuelta encontrándome con esos perfectos ojos, que ahora se encontraban levemente rojizos por el alcohol y las luces de la fiesta. El me miraba con una sonrisa arrogante en sus labios.
-Esfúmate… Harry – dije imitando el tono de antes, el rio y achino los ojos-
-que paso con la nerd que le gustaba leer sus novelitas romanticas en vez de venir a una fiesta – dijo bebiendo de su cerveza como un maldito modelo. Realmente me dolia verlo, y no lograba entender por que-
-deja de molestarme Styles – el revoleo los ojos-
-como extrañaba que me llamaras así.. – dijo cínico, este Harry era peor que el de antes. – cambiando de tema… ¿donde esta tu amiguito el grandulon? –dijo acercándose a mi con ese típico tono que el tenia de superestrella . Senti como mi estomago daba un vuelco al sentirlo cerca. El me miro de arriba abajo sin pudor – estas exquisita esta noche, caperucita. –dijo por el color de mi vestido- Yo que tu me cuidaría. Nunca se sabe cuantos lobos acechan por ahí. –me guiño un ojo y desapareció de la escena, caminando hacia una multitud de mujeres y hombres hablando. Con la gracia de un puma. ****a.
-¿y eso que fue? – dijo Santana cuando logro soltar los labios de su novio, mientras este se dirigía a hablar con un amigo de el.-
-una pelea de un inmaduro – dije desinteresada, volviendo a tomar un poco del nuevo vaso que habia agarrado de la mesa-
-yo escuche algo mas.. como lo que se llama ‘tención sexual’ –suspire fastidiada-
-Santana, ¿tensión sexual con ese inútil? – bufe como si fuera obvio – por favor.. claramente no! – Santana hizo una mueca de desagrado-
-como digas… vamos a bailar – dijo mientras ambas caminábamos a la pista y movíamos nuestras caderas al ritmo de la canción, nunca habia sido una gran bailarina, pero sabia defenderme. Tenia mis trucos. Aunque santana tenia muchísima mas gracia y agilidad para bailar. Habre estado horas bailando con Santana y algunos chicos que se acercaban. Movi mis caderas rozando el cuerpo de el chico de rubio. El chico tenia una sonrisa encantadora.
-Matt – dijo el chico en voz alta por la música-
-Elizabeth – dije sonriendo, el sonrió de lado-
-me gustaría ir a un lugar mas privado, pero tu novio me esta acuchillando con la mirada – dijo en mi oído riendo. Lo mire confundida-
- no tengo novio – me miro burlon-
-entonces Harry Styles. Al parecer te quiere para el solo. – mire para donde el estaba mirando, y estaba Harry sentado en el sillón junto algunos amigos, mirándome despectivamente. Tenia aires desinteresado y egocéntricos. Pero realmente para mi sorpresa me seguía atrayendo. Como si el fuera el chico malo que yo quería para mi mesita de luz. Suspire molesta. – no me quiero meter en su juego, tu sabes como es. Si te metes con una chica de Styles. No vives para contarlo – dijo levantando una ceja-
-dejame arreglarlo, es simplemente un mal entendido – dije mientras caminaba hacia donde se encontraba el hombre de rizos, el movio levemente su cabeza para el costado, haciendo una mueca en forma de burla- parate –dije segura cruzándome de brazos. Los 3 chicos que estaban sentados con el en el sillón silbaron y gritaron cosas incoherentes.
-¿haber nenita, vienes a esta fiesta para mas grandes y encima matoneas? –dijo levantando los ojos, mientras se llevaba lentamente el pico de la botella a los labios, sin dejar de mirarme-
-solo será en un segundo- el suspiro molesto y se levanto.
-esta bien pero yo pongo el lugar – dijo sonriendo con una pizca de perversión. Camino lentamente hasta llegar a una escalera poblada de parejas besándose o gente hablando – permiso! –dijo poderoso, los de la escalera lo miraron y rápidamente los dejaron pasar. Ambos subimos-
-no ire a una habitación contigo- dije rápidamente como veía que el entraba a un cuarto, pero luego al darme cuenta que era una terraza. Mis sentidos se calmaron, era hermosa. Tenia una gran vista, era espaciosa. Las luces de la cuidad alumbraban como estrellas. Era completamente perfecto. Habia apenas una brisa que movia mi pelo.
-Bien, que quieres. No tengo toda la noche – dijo mirando para otro lado mientras se recargaba en la baranda de la terraza, carraspe mi voz. Sintiendo nervios que esta no pueda sonar clara-
-quiero que me dejes de molestar. Si te piensas abrir de mi vida. Lo único que te pido. Es que me dejes estar con las personas que quieras – el me miro con una sonrisa divertida-
-¿de que hablas no he hecho nada? –dijo con tono inocente, lo señale con el dedo índice-
-si, ese tal matt estaba coqueteando conmigo y se intimido pensando que yo era una de tus chicas – dije de mala gana, el se movio lentamente-
-¿y no eres una de mis chicas? – dijo lentamente, como si fuese un león enjaulado a punto de salir por su presa-
-no, no lo soy- dije firme-
-¿estas segura? – dijo pasando una mano por mi cadera y pegándome a su cuerpo. Este no reaccionaba, quería despegarme, gritarle y salir corriendo. Pero eso no estaba en los planes de mi anatomía que ahora temblaba de los nervios. Se acerco a mi rostro pegando su mejilla con la mia, asentí lentamente con esperanza de tener la compostura de una mujer segura- no lo creo. Estas temblando como un cordero en invierno –dijo suave, y ahí me di cuenta. Estaba completamente Jodida-
