Capitulo XX

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Y veme. Estoy aquí, escuchando las declaraciones de cada persona que viene a visitarme. Todas esas personas que en algún momento, me dedicaron una sornisa. Y aunque no puedo ver sus rostros, sé exactamente quien se encuentra a escasos centimentros de mi.
¡Oh cariño! Sé que nunca salí de tu mente, lo sé E. Despúes de todo lo que pasó, solo me referia a ti por tu inicial; se me era más facil así.
Daniel, mi lindo tarado, no sabes la alegria que le causas a mi corazón al escuchar tu voz.
Ale, no puedo ver tu hermoso y encantador cabello, ya no más. Extraño ver tus lentes y las pulseras que nunca te quitas.
Madre, ¿qué seria de mi sin ti? Si no serias como eres, no seria yo como soy.
Ya no quiero estar aquí.
Ya no quiero estar acostada todo el dia y noche.
Necesito levantarme; necesito..., necesito... 》

Ella neblina. El obscuridad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora