Tylor y yo llegamos sin más problemas a la escuela.
Al entrar al salón de clases Luke pasó su brazo por mis hombros.
-Dan- dijo con una sonrisa fingida- ¿podemos hablar un momento?
-Estoy ocupado-señalé a Tylor, quien aún sujetaba mi mano.
-Dios- soltó un suspiro y llevó dos dedos al tabique de su nariz-. Sólo es un momento.
Tylor nos miraba sin decir nada.
-Está bien, Tylor, ¿puedes esperarme un momento, por favor?
Tylor se sonrojó mientras asentía rápidamente con la cabeza. Soltó mi mano y fue a sentarse a un lugar junto a la venta.
Luke aún me sostenía los hombros, así que me jaló llevándome hacia afuera.
-Bien, ¿qué quieres, Luke?- le dije algo molesto.
-Dan, llevas días conociendo a ese niño y ya son novios- Luke parecía histérico mientras movía fuertemente sus manos señalando al salón.
-Pareces mi mamá. Aún no somos novios.
-No son novios, bien, pero salen tomados de la mano y de seguro ya lo besaste, ¿no?- Luke levantó una ceja.
Luke, me conocía muy bien, y eso llegaba a ser molesto en algunas ocasiones.
-¿A qué viene todo esto, Luke?
-Pasó lo mismo con Donnie y no quiero recordarte cómo es que terminó- Luke suspiró pesadamente.
-Tylor es diferente- traté de defenderme.
-Lo sé- Luke dio unas palmadas en mi hombro-. Dan, soy tu amigo, pero esto lo digo por Tylor. Se ve que es virgen- sonrió maliciosamente.
-Mierda, Luke, tú sólo quieres joderme la vida- solté un suspiro, me había creído su farsa.
-Sí, sabes que no puedes hablar en serio conmigo- golpeó los bolsillos de su suéter-. Quiero un cigarro, en fin, vamos a dentro.
-¿Seguro que Jordan no es la pasiva en su relación? Con ese carácter tú debes ser el que dé las nalgadas- me reí de él para liberar un poco la tensión que me había causado.
-La tiene más grande que tú- me tomó del hombro mientras caminábamos.
-Jajajaja, ya quisieras- una vez dentro del salón me senté junto a Tylor y Luke al lado de mí.
Tylor estaba escribiendo algo en su cuaderno, pero lo cerró rápidamente cuando me senté a su lado.
Sus mejillas volvían a estar rojas, pero esta vez me dirigió una sonrisa.
Suspiré y suavemente tomé su mano.
Definitivamente, no iba a echar a perder esto.