La historia de Dark Link

El pozo

Cuando los dos terminaron de bajar las escaleras del pozo, se adentraron en este y pasaron un agujero diminuto, en el que cabían perfectamente. Ambos chicos miraron alrededor, encontrándose con un sitio que parecía más un laberinto y en el cual había varias celdas y aparatos de tortura, ademas de suelos falsos que te llevaban mas hondo aun.
Avanzaron con precaución y lo primero que se encontraron fue un Redead. Link rápidamente sacó su ocarina y tocó una canción, paralizando al monstruo y consiguiendo así que los dos lo derrotasen fácilmente. Avanzaron y entraron en una de las cámaras con aparatos de tortura. Dark avanzó hacia uno situado en el centro que era una cruz y tenía cadenas oxidadas y al acercarse cayó al vacío, ya que pisó un suelo falso. El chico gritó de la sorpresa y Link fue tras él, ya que no les convenía separarse.
El moreno cayó de culo y el rubio de pie. Miraron alrededor mientras Dark se levantaba y se encontraban en una sala en la que había un foso venenoso, unos troncos con rupias plateadas y mas redead.
- Supongo que tendremos que coger esas rupias - dijo Link.
- Pues si - dijo Dark frotándose el trasero.
- Pero primero los redeads.
Link volvió a sacar su ocarina y tocó la misma canción de antes. Los redead se paralizaron y los chicos aprovecharon para derrotarles. Navi salió del gorro del rubio, ya que llevaba todo el rato escondida.
- ¿Ya desaparecieron esos monstruos? Me dan repelús - dijo.
- Si Navi, ya se fueron.
Los dos chicos estuvieron recogiendo las rupias y cuando terminaron apareció una escalera que les devolvía al piso superior del pozo, por lo que subieron y se encontraron en la misma sala de antes.
- Ten cuidado no vuelvas a caer - dijo Link.
- De acuerdo.
Los dos siguieron recorriendo el pozo hasta llegar a la sala del jefe, despues de completar muchos puzzles. (N.a: no me acuerdo como iba ni quiero acordarme, me da repelus)
Entraron y la puerta cayó con barrotes. Miraron al frente y había un montón de manos de color blanco que surgían del suelo.
- ¿Pero qué...? - preguntó Dark - ¿Qué demonios pintan aquí estas manos?
Dark se acercó a una y tuvo que apartarse rápidamente ya que esta intentó agarrarle.
- ¡Esa mano se mueve sola! - exclamó.
- Ya lo he visto - dijo el rubio.
Miraron alrededor pero solo vieron esas manos del suelo. Navi revoloteó entre los dos buscando información sobre su enemigo.
- Me parece - dijo el hada - que os tendréis que dejar agarrar por una de esas manos.