No Te Metas Con Ruby

Four

Antes

- Adiós Lou, no vemos mañana.

Me despedí de mi compañera de clases de arte y camine hacía la parda del auto bus. La calle estaba repleta de alumnos, los días viernes salimos más temprano de lo habitual, de esa forma podemos terminar algunos de los trabajos que tenemos para la próxima semana.

Mañana, sábado iremos a cenar a la nueva casa de Clau, mi madre esta muy emocionada, pero mi padre no lo creé necesario. Yo solo voy por la comida, aunque Clau nunca fue buena en eso, es por eso que papá no quiere ir. Hago mi itinerario mental para programarme y le mando un mensaje a Jess, mi mejor amiga, para decirle que nos vemos esta noche.

Cuando llego a la parada del auto bus, me siento a esperar rodeada de gente. Solo espero que el auto bus no este repleto como una lata de sardinas, ayer caí de bruces al bajarme, un chico me empujó para tomar mi asiento.

Cuando ya pasaron algunos minutos de espera, me levanto y me hago espacio entre las personas para mirar sobre sus cabezas si es que el auto bus ya esta cerca.

-Hey, ten cuidado, tonta.

Una chica de cabello rubio me hizo a un lado con su hombro, haciendo que bajará de la acera a la calle. Su grupo de amigas me miraron como si la hubiera abofeteado, pero la verdad es que no le hice nada, ni siquiera la toqué. Estas chicas solo fastidian y yo que creía que en la universidad ya no habrían más plásticas. Me equivoqué.

El rugido de una motocicleta llamó la atención de todos en la parada y yo de un salto subí a la acera cuando estaciono bruscamente frente mío.

Un chico con una chaqueta de cuero estaba al volante y si antes estaba intimidada por las chicas, ahora lo estaba el triple por él chico que manejaba. Se quitó el casco y vi su perfecto rostro. Era él chico de las miradas.

Sentí como mi rostro se calentaba poco a poco por la verguenza de tenerlo frente a frente.

-Sube.

Su voz era tal cual la imagine para su apariencia.

Mire hacía las chicas de antes, para saber quien sería la afortunada que iría con él. Todas estaban con los ojos abiertos de la sorpresa y casi era una competencia de quien puede sacar mas pecho ahora.

-A ti te hablo.

Lo mire a los ojos. Mala idea, me sentía como el gato y el ratón.

-Qué?

-Estas sorda? te llevare a casa, vamos.-peino su cabello hacía atrás con su mano derecha.

Me quedé de pie tratando de analizar la escena, me estaba hablando a mí? si. Que está pasando con el mundo. su mirada fue de mi rostro a su reloj, creo que estaba perdiendo la paciencia, pero no podía llegar e irme con él, o si?, no claro que no.

Pero aún así lo hice, de un salto subí a su moto y tome el asiento con fuerza para no caer. Pero él no arrancaba. Si no me hablaba a mí y me hace bajar de su motocicleta, de verdad que me mudo a otro país, no quiero ser el hazme reír de unas chicas con malas intensiones y senos falsos.

-Eh, no,no...no quiero que a mi chica le pase nada malo, tus manos van aquí.

Tomó mis manos, me jaló un poco más adelante quedando completamente juntos y entrelazó mis dedos en su abdomen, y me entrego un casco.

Las chicas estaban con la boca abierta al igual que todos los demás, al igual que yo incluso, ¿me acaba de llamar, su chica?

Esto es una completa locura, quizás a donde me llevara, pero ya es muy tarde. La moto salió disparada.

después de unos minutos comienzo a reconocer el camino, y noto que estamos llegando a mi casa.

¿Cómo rayos sabe a donde vivo?

Aparca la motocicleta unos metros antes de llagar a mi casa y me bajo, le entrego el casco mientras el también baja.

Aprovecho para mirar su atuendo y esta tan mono, que parece salido de una revista de moda, en cambio yo me conformo con un jean y una camiseta. nada de accesorios ni tacones.

-Gracias, por traerme...

-Dex.

-Gracias Dex.

Hasta su nombre da miedo. Pero no puedo negar que le queda tan bien como lo hacen sus jeans.

-No me dirás tu nombre? o debo adivinarlo.

-Inténtalo.- Bromeé, por un momento me dio un poco de miedo desafiarlo.

Sonrió de una manera malévola e intimidante.

-Alice.

la pequeña sonrisa que dibujaban mis labios desapareció por completo.

Como rayos sabe todo eso.

-Cómo sabes mi nombre, y donde vivo?

Su sonrisa también desapareció y yo ya estaba lista para echarme a correr.

-Cuando me interesa alguien me preocupo.

Di un paso atrás cuando se acercó.

Mire a todos lados en la calle por si había alguien cerca, pero no había nadie. Justo en este momento no hay una sola alma, cuando siempre esta repleto de personas, que sucede? es como si todos le temieran a Dex.

¿Quizás lo hacen? no, claro que no.

Sus pies no se dejan de mover en mi dirección.

-¿Qué haces?

-Algo que he querido hacer desde hace días.

sus manos toman parte de mi rostro y cuello, levanta un poco mi cabeza haciendo que mis pies queden de punta, y choca sus labios con los míos en un beso lento.

Al comienzo no se que hacer, miro hacia los lados y trato de dar un paso atrás, pero luego mi mente queda en blanco y me dejo llevar por sus labios. subo mis manos a su cuello cuando él pone las suyas en mi cintura y me atrae más a él.

Retrocede unos pasos y apoya su cuerpo en la motocicleta manteniendo nuestros labios unidos, y sé que esto durara mucho.

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