Capítulo seis : La rusia.

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El ascensor se detuvo en el piso 7, penúltimo piso según el tablero y Nicolás, despistado como todas las mañanas observaba con atención los distintos números y letras que se iluminados salían en el tablero, el último tenia una letra H.
Fue cuando las puertas se abrieron que el moreno prestó recién atención a ellas, subieron primero tres mujeres con un tono argentino y al final un tipo bastante viejo con una especie de túnica.

Ellas miraban al moreno mientras el mantenía su vista en la túnica color hueso que traía el hombre que le daba la espalda, con unos toques que parecían de oro se sujetaba en un cinturón de cuero.

- Disculpa Che - Una de las rubias llamó su atención provocando que nuestro chico diera un pequeño salto - Perdón - La mujer seguía riendo mientras sujetaba   un teléfono en la mano derecha - ¿Me podría sacar una foto contigo? - Sus dos amigas se largaron a reír de forma burlesca - Es que mis amigos no me creerán cuando les diga que subí a un ascensor en el hotel Navy con un menesteroso pibe, necesito una prueba.

Y sin dejarlo contestar la mujer le entregó el móvil a su amiga y sujeto a Nicolás, quien aún con la duda del significado de tal palabra frunció en ceño. La mujer lo abrazó para que sus amigas en un ataque de risa sacaran la mejor foto. Las puertas se abrieron en el primer piso y las tres mujeres bajaron con rapidez, él suspirando presionó nuevamente el botón de cerrado y llegó al piso -1, con su uniforme de trabajo tomó la caja que mantenía a su lado para bajar.

- Cuica culia - Susurró el moreno mientras caminaba a su área laboral - Menesteroso, ¿qué chucha es esa wea?.

Los pasillos detrás del casino lo llevaban a una de las áreas restringidas más desocupadas por la hora, la más oculta y calurosa. Su estómago ya le avisaba que era la hora de almuerzo y él tenía hambre.
Relajado caminó por el largo pasillo y volvió a fruncir el ceño cuando en su asiento, o por lo menos el que utilizaba todos los días había un tipo vestido de rapero.

- Ponte cómodo - Sonrió el tipo  cuando lo vio salir.

- Yo - El moreno resignado se acomodó en la banca - Me llamo Nicolás soltó sin ánimos de conversar.

- Oscar - El chico con un cigarrillo entre los labios abria una bolsa - ¿Te molesta que fume? - El moreno negó con la cabeza - Bakan, me tengo que vestir y no encontré ni un lado desocupado o por lo menos piola.

- Hay baños en el casino y en la oficina central un camerino - Le contestó desganado aún, ya había sacado su comida.

- No cacho ni una wea yo aquí, es mi primer día y mi jefe no estaba, cualquier mala cuea - Oscar se rasco la cabeza - Me dejó la ropa con la secretaria y puta que es pesa la weona cuica sin sexo - El moreno no pudo evitar reír - Ya la conocí vo parece.

- ¿Quién es tu jefe? - Lo miró de reojo

- El Jaime - El rapero tiró el cigarro a la lata vacía que tenía en el suelo - Don Navarro y la boca te queda donde mismo como dijo la Rusia culia, como si no lo conociera mas que ella al ruliento.

- ¿Eres el nuevo chofer del dueño de la cadena?- Nicolás lo miraba sorprendido, no mantenía el perfil del hombre y mucho menos de su antiguo amigo, a pesar de todo el vocabulario de panes nunca fue subido de tono.

- ¿Qué cadena? Ah, los hoteles - El rapero se largó a reír por su propia frase- Yo a ese lo conocí cuando andaba con zapatillas Converse y su chaleco tejido por la abuela - El moreno volvió a reír - Buen cabro, buen jefe Jaime - Oscar sujetó  nuevamente la bolsa

- Ahora solo de terno y full elegante - Soltó  nervioso, realmente no sabía que tanto podía hablar con el tipo que tenía a su lado. El teléfono de Óscar comenzó a sonar

- ¿Aló?, aún no me puedo arreglar - Se quedó en silencio unos segundos esperando la respuesta - Pero si la weona de la secretaria no me dijo ni donde había un baño y no podía mostrar mis partes íntimas en el lobby, por algo se llaman partes íntimas po - Se escuchaba una risa al otro lado del teléfono - Atrás del infierno estoy, la cocina debe ser esa wea... no sé como aún no se te incendia ésto con el calor que hace ahí, podríai tirar un par de huevos y demás se te cocen. Bueno

Al cortar el telefono Óscar se levantó de golpe de su puesto y se quitó los pantalones, de forma rápida se colocó los que su jefe le había dejado, sin abrocharlos se quitó el poleron y  comenzó con la camisa.

- En realidad hace mucho calor en ese pasillo - Jaime salió por el pasillo y lo primero que miró fue al moreno que estaba comiendo en la banca, no pudo evitar sonreír- Ya se conocieron, eso es bueno.

- El Nico me dijo dónde había un baño, es mejor secretario que la secretaria el weon - Oscar se colocó la corbata.

- La presentación es importante - Navarro acomodó la corbata de su chófer - Y la secretaria sigue en ese puesto solo por el post natal, el otro día me confundió con un pastel.

- Se aprovechan por tener cachorros las chiquillas - Oscar se peinó antes de colocar su sombrero - y ¿cómo me veo? - Levantó las cejas hacia su nuevo jefe - ¿Tiro pinta o no pasa na'?

- Me agrada - Jaime asintió mientras abrochaba el botón de la chaqueta de su chófer - Sí, ahora solo debes meterte en el personaje

- Personaje, soy seco en el rol pa los juegos - El rapero tosió de forma sonora y con una voz grave soltó - ¿A dónde nos dirigimos hoy Don Jaime, gusta de algo de música para la ocasión? - en un tono burlesco continuo - déjeme abrir la puerta, mire que la gente no siempre se lava las manos después de ir al inodoro y puede contagiarse escherichia coli tocando el pasamanos - Jaime comenzó a reír mientras negaba con la cabeza.

- Perfecto, vamos entonces - Espero a que su chófer avanzara para girarse al moreno que aún estaba sentado mirándolos - ¿Y nuestra salida cuándo será? - Nicolás levantó los hombros - ¿Te parece mañana a las 10?

- ¿De la noche? - El moreno lo miraba fijamente y eso a nuestro empresario lo ponía sumamente nervioso.

- En la mañana - Soltó demasiado rápido para su parecer.

- En la mañana trabajo po' - Nicolás rio despacio - El sábado puede ser.

- No, falta mucho - Jaime tomó su celular - Nos vemos aquí mañana a las 10, yo hablaré con tu jefe que tienes el día libre por compromisos conmigo.

- Pero me va a tomar mala - El Moreno se levantó de golpe sorprendido - Después me va a tirar cualquier pega porque pensará que me salté su mando.

- ¿Y? - La mano derecha de jaime sujetó con cuidado la cintura del chico - Si tu quieres podrías dejar de trabajar el resto de tu vida - Susurró en el oído del más bajo -  Solo tienes que salir conmigo.

- Como si fuera una prostituta - Nicolás lo miró serio y eso estremeció al hombre que lo sujetaba provocando que tomara distancia.

- No quise decir eso - Nego con la cabeza - Solo quiero una oportunidad para demostrar lo que siento por ti.

- La tendrás el sábado entonces a las 10 de la mañana - Nicolás dejó la fuente de su almuerzo en la banca y se acercó al jefe de su jefe - Y ojalá recuerdes como conquistar sin tener que sacar la billetera - Susurró muy cerca de los labios del empresario para tomar distancia inmediatamente y guardar sus cosas - Tengo que trabajar ahora y su chófer lo está esperando.

- Claro - Jaime desconcertado inhalo sutilmente.

Estaba cautivado con el chico que se alejaba de su lado a paso firme, una persona que le demostraba nuevamente que el dinero no lo es todo en la vida y que lo haría volver al juego, uno sumamente difícil que lo traería devuelta a la vida.

Pagaría tu vida Nicolás.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora