EL CHICO DE LOS OJOS AZULES

DISFRAZ

-Diego...- Susurro Natalie
-¿Qué sucede?- Pregunté sin mirarla a los ojos, solo me precipité a bajar un poco la mirada.
-¿Ya me dirás que viste?- Preguntó algo preocupada , yo solo seguía mirando al suelo y en ese momento la mire a los ojos.
-Vi a una mujer, con un bebe en brazos, corría por las calles de este pueblo, vi que sus ojos se volvieron rojos, su bebe tenía los ojos azules y....Creo que me pareció ver a mi tía Mirna.. Ella le decía unas palabras al bebe "Perdóname por lo que te voy a hacer"- Natalie se quedo sorprendida, nos quedamos en silencio por un momento hasta que ella habló.
-¿No crees que has estado un poco estresado?- Preguntó
-No, no lo creo, eh escuchado cosas en este tiempo de estancia aquí, siento que esto ya no es normal- Dije un poco asustado.
- Si esto es así, la que debe tener respuestas es tu tía Mirna, ella debe saber algo de esto- Dijo Natalie.
-Es lo mismo que pienso yo- Respondi. Fuimos platicando sobre el tema hasta llegar al establecimiento dónde vendían y rentaban los disfraces, me sorprendía la variedad que había, tenían disfraces desde algún personaje de terror hasta de la época victoriana, Natalie empezó a buscar un vestuario que quedara a mi medida, ella me había dicho que se encargaría de todo, saco varios disfraces pero casi ninguno me convencía, mientras esperaba en un sofá de color azul, escuche que la campana que indicaba que alguien había llegado empezó a sonar, desvíe mi mirada para la entrada y para mí grata sorpresa era Galilea pero no venia sola venía con otra chica.... ¡Oh rayos! Era nada más y nada menos que mi prima Alejandra, si la que casi se vuela el dedo con su cigarro, desvíe mi mirada a el mostrador, sabía que me verían en cualquier momento.
-¡Oh! Diego que gusto verte aquí- Exclamó la voz insoportable de Galilea
-Si, igual me da gusto de verte Galilea- Trate de sonreír y disimular que no soportaba verla
-Hola Ale.. - Exclamé con voz un poco baja
-Hola Diego..- Dijo ella mirando a otro lado, en ese momento llego Natalie a salvarme.
-Oh.. Galilea, Alejandra que gusto verlas por aquí- Exclamó Natalie
-Si ya sabes, de compras para el baile de el palacio Cultural, iremos yo y Jonathan, él se disfrazara de rey y porsupuesto yo de reina y tú Diego ¿De qué te disfrazaras?- rey y reina, ja... Que ridícula, esta mujer me saca de mis casillas más y más... -De príncipe- Exclamó Natalie, la mire rápidamente, ella solo se limitó a sonreírme -¿De príncipe?- Pregunté -Si de príncipe, contestó, -Oh vaya...pues espero que realmente quede a tu talla-Dijo Galilea haciendo una pequeña risita -Pues soy más delgado que...- En ese momento me tape la mano con la boca, Galilea cambio su mirada y me empezó a mirar mal, creo que acabo de arruinar el momento, pero no me sentía mal por ello -Bueno, los dejaremos comprar sus disfraces, no queremos que nuestro día se arruine- Galilea y Alejandra se dieron la vuelta mientras que Galilea susurro -Que imprudente es ese idiota- en ese momento me percaté que el anillo de Galilea se empezaba a tornar rojo, y era color plata... Fue cuando escuché un grito ensordecedor, -¡mi dedo se está quemando!-ella se dio la vuelta mientras Alejandra trataba de quitárselo, Natalie y yo nos quedamos atónitos ante la escena, fue entonces cuando Alejandra pudo quitarle el anillo, Galilea me miró con mucho odio -¡¿Que mierda me pasó en mi dedo?!- Preguntó dirigiéndose rápido hacia mi, -¿Qué te sucede, no sé que pasó?- Le dije algo asustado -¡Claro que sabes!..- Su expresión cambio repentinamente a una seria, se dio la vuelta y se fue, salió de la tienda junto con Alejandra siguiéndola.
-¿Qué demonios fue eso?-Preguntó Natalie.
-Si tú no sabes, menos yo- Exclamé, mire a Natalie -¿Por qué de príncipe? - Le pregunte.
-Pensé que te agradaría, vamos ve a probártelo- Agarro el disfraz y me lo dio, tarde un rato en ponérmelo, ya que costaba un poco de trabajo, cuando me mire al espejo me percaté que realmente...Parecía un príncipe. Salí del vestidor, Natalie me miró mientras solo se limitaba a decir con una sonrisa -Te vez... ¡Espectacular!-.

-¡Galilea! ¡Galilea!- Gritaba Alejandra atras de ella -¿Qué pasó haya adentro?- Preguntó Alejandra algo desconcertada -Tu no entenderás nada- Susurro Galilea.
-Solo te pido que no dejes que Diego se tope con Jonathan en el baile- Exclamó Galilea.