CDM FanFic (Castiel x Sucrette)

Lyss nos cuenta su secreto

 ANTES DE EMPEZAR QUERÍA DAR LAS GRACIAS A TODAS ESAS PERSONAS QUE VOTAN Y COMENTAN. SOIS GENIALES :D

P.D.: También empezaran a narrar otros personajes, contando la historia desde su punto de vista. Si no os parece buena idea, me lo dejais en los comentarios.

Ahora si, a leer.

    -¡SIII! - Grita Rosalya con una expresión que da a entender lo genial que le ha parecido esa idea

Todos volvemos a reír y vamos andando a la pizzería mas cercana. Nos sentamos cada uno en una silla.

Cada uno pide una pizza, y por primera vez en años, la espera no fue larga, odio tener que esperar la pizza. Todos continuamos hablando al terminar, hacemos bromas y comentamos cosas, raramente hablamos de temas serios. Luego volvemos al centro comercial andando y allí nos despedimos, ya que yo tomo un camino distinto. No es muy tarde aunque ya esta anocheciendo, y hace bastante frió. Camino dando zancadas y con un poco de prisa, no es lo mas agradable del mundo andar sola por la calle a esta horas, incluso debo admitir que tengo un poco de miedo.

Al final llego sana y salva y casa. Lo primero que hago es encender la luz y tirar mis zapatos, estoy muy cansada. Escucho los zapatos caer, pero no me sobresalto. Me tiro en el sofá y lentamente giro la cabeza hacia el reloj digital que tengo en una pequeña mesa. Son las once de la noche, no seria tarde si no fuera porque mañana tengo instituto y no me gustaría llegar tarde o algo por el estilo. Resoplo. Me pesan muchísimo los párpados, y como sin querer, me duermo.

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Me despierta el fuerte sonido del reloj y dejo escapar un pequeño sonido de queja. Sigo cansada. Hago un esfuerzo para incorporarme en el sofá y suelto otro grito como antes, solo que esta vez un poco mas fuerte, y ha sido por el esfuerzo. Me calzo las zapatillas y me levanto del sofá. Tengo la espalda dolorida. Llego como puedo a la cocina y me preparo el desayuno, después me visto y me voy al instituto.

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Llego y saludo a todo el mundo, hablo un rato con Iris y entro en el aula que me toca.

Al entrar no puedo evitar fijarme en Castiel y Lyssandro. Están ellos solos hablando. parce que Lyssandro le está contando algun problema a Castiel, que de vez en cuando comenta algo. sigo observándolos y veo como Castiel ahora parece sorprendido, y al instante empieza a reírse. ¿De que estarán hablando esos dos?

Castiel POV's

 Llego a clase y me siento encima de mi mesa. Me quedo mirando al infinito, no es que este pensando en algo ni nada, simplemente desconecto. No tarda en llegar Lyssandro, que se planta en frente de mi.

-Hey Lyss, que te pa...

-Tengo que decirte algo - Dice Lyssandro en un tono serio y cortante, sin importarle que me haya interrumpido.

-Bueno, dime

- Castiel, creo que me gusta Sucrette

Vaya, no me esperaba para nada que Lyssandro tuviera esa noticia. ¿Y por que me lo cuenta a mi? ¿Acaso me importa que le guste esa tabla?. Claro que me importa, pero por el hecho de que Lyssandro es mi mejor amigo, no por otras cosas... ¿Por que me molesta tanto ese comentario?.

Intento cambiar mi cara de entusiasmo y sonrío, intentado ocultar el lío de emociones que tengo ahora mismo. ¿Que me pasa?

-¿Y se lo has dicho ya?- Pregunto, por que ha sido lo primero que me ha venido a la cabeza

- ¿Qué? ¿Estas loco?- Lyssandro hace una pausa y se lleva las manos a la cabeza - ¿Qué va a pensar de mi? ¿Y si me rechaza?.

-Bueno Lysandro... si no pruebas, nunca sabrás.

-Pero Castiel, me da mucha vergÜenza, y no se como hacerlo

- Vas y le dices: me gustas, Sucrette

- ¡No!, no es tan fácil, no todos son como tu- Dice ofendido

- Vale, vale. Tranquilo fiera - Digo mientras hago un gesto con las manos intentando que se calme - Habla con ella, y cuando salga algún tema parecido o algo, se lo dices. O le lanzas algunas indirectas.

- ¿Cómo lo hago? - pregunta Lyssandro

Miro a Lyssandro unos segundos y luego desvío mi mirada hacia Sucrette, que esta en la puerta, con su mochila a los hombros y mirándonos. Al instante se pone roja. Sonrío, pero no ella, si no por que se me ha ocurrido una idea brillante. Mira a Lyssandro y mi sonrisa se vuelve más grande. Sin dejar de mirar a Lyssandro, pronuncio el nombre de Sucrette, alzando la voz, lo suficiente para que ella se entere de que la estoy llamando y venga. Mientras ella camina en nuestra dirección, Lyssandro susurra que no un par de veces, porque se ha dado cuenta de lo que quiero hacer.

-Dime- Dice Sucrette en un tono dulce, mirándome

- En realidad, es Lyssandro el que tiene que decirte algo- Miro a Sucrette, sin dejar de sonreír, y ella mira a Lyssandro extrañada.- Bajo de la mesa en la que estaba sentado y pongo mis manos en la espalada de ambos. - Os dejo solos - Sin dejar que repliquen me marcho de la sala, en busca de algo que hacer, mientras ellos hablas a solas y yo sigo sin saber que me pasó hace unos minutos.