VI

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Connor se despertó en una cama que no era la suya. Tardo en recordar lo que sucedió anoche, la pelea con su padre, su huida de casa... Recordaba todo muy bien. Hasta recuerda cada simple palabra de la charla que tuvo con aquel chico de ojos azules en el sofa de la casa de este.

- Sabes, la vida se vuelve más dura cuanto más alto queremos llegar, no es lo mismo que conformarte con cobre, que desear el oro- dijo Troye mirando por la ventana, sentando en aquel saliente acolchado de la ventana-. Para llegar a lo que queremos hay que fallar, pero arreglarlos mientras tengas tiempo. Por que de las malas experiencias se aprende y uno se hace más fuerte.

-Troye... Son las dos de la mañana...- le dice Connor interrumpiéndole.

- Lo se, pero quiero encontrar palabras para una canción que se escribe sola con sueños y deseos.

- No te entiendo.- dice el ojiverde confundido.

- No quiero que me entiendas. Quiero que aprecies los sueños y las ilusiones, por que de eso se vive cuando todo va mal. Y tu pareciste perderlos- Troye hace una breve pausa, pero sin dejar de mirar por la ventana, y Connor no puede quitar la vista del otro-. Por que se que todo lo que quieres es llegar a lo alto, ahora es tu turno, el turno de todos los que confíen que llegaran a algo.

Al acabar de decir estas palabras, Troye se levantó y dejo a Connor solo en aquel salón no-conocido para este último cual le dio vueltas y vueltas a lo que dijo el ojiazul.

Y aún después de dormir, seguía dandole vueltas a aquello.

Connor no quería levantarse, no quería darle la cara a Troye, no quería ceder y decir lo correcto en el tiempo incorrecto. Solo quería salir de ahí sin cruzarse con los ojos azules que sin saberlo que traían de cabeza.

color me blue 愛 tronnorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora