color me blue 愛 tronnor

III

Connor se encerró en su cuarto, apoyó su espalda en la puerta y dejó que su cuerpo se cayera al suelo, donde se quedó llorando como un niño indefenso. Odiaba a su padre, y esa forma que tiene de hacerle sentir como la pura mierda cuando esta feliz, o parcialmente.

Desde que la madre de Connor madre murió, hace ya tres años por culpa de un conductor borracho que la arroyó, el padre de este empezó a volverse alcohólico, irónico, y a desarrollar una depresión, y tiene días en los que llega a casa y empieza a insultar y a pegar a Connor. Lo que hizo que él cambiará para mal en poco tiempo. Al menos sus amigos le apoyaron este último año, cuando se enteraron de todo y de lo que hacía para "calmar sus penas".  Al menos no le paso como su hermana, de la cual su padre abusaba sexualmente, y esta se acabo yendo de casa. Y Connor hace casi dos años que no la ve, pero espera que este mejor que él.

Connor no es que tenga una vida muy triste sin amigos o cosas así, el tiene, pocos pero buenos, y probablemente sin ellos, él no estaría vivo. Él siempre les agradecerá el apoyo. Y también el intento de denuncia que le pusieron a su padre. Al menos, aun que no fuera del todo efectiva, hizo que el Señor Franta dejará el alcohol por un tiempo. Pero todo lo malo regresa, aun que volvió en menor cantidad. 

Casi una hora después que Connor se hubiera encerrado en su habitación, paro de llorar poco a poco. Y se tranquilizo al no oír ruidos que provinieran del piso de abajo, eso significaba que o su padre había salido o se había quedado dormido. Y Connor espera que fuera esta segunda. Pero con miedo de salir a ver, prefirió irse a dormir, para que todo pasase rápido y que esto solo pase a ser un recuerdo de los muchos de maltratos por parte de su padre. 

....

 

Troye llegaba a casa después de una especie de cita con Jim, que se baso en ir al cine y luego ir a comer algo al McDonalds, muy romántico todo. Y lo peor fue el intento de beso que acabo siendo una caída por que Jim se tropezó con sus propios cordones cuando se acercaba a besar a Troye. En fin, un momento embarazoso que sería mejor olvidarlo. 

Troye estaba siendo feliz, algo que no pensaba que iba a ser. Se sentía bien consigo mismo por una vez en su vida, y también no siente vergüenza de su orientación sexual. Algo nuevo para él, pero no tiene miedo, se siente libre. 

Pero siempre había algo, mejor dicho alguien, en la cabeza de Troye. No podía quitarse de la cabeza a aquel chico de ojos verdes y mirada perdida. Él cual le ignoraba cada vez que este le hablaba o le saludaba. Pero había algo en él que hacía que Troye quisiese acercarse a él.