Mi Amor Salvador

¿Mamá?

Narra Clary

Los rayos del sol me empezaron a despertar, después de la noche apasionada que había tenido con Jace habíamos caído dormidos apenas nuestras cabezas tocaron las almohadas. Hoy gracias al Ángel no tenía que ir a la Universidad y Jace no tenía que ir al trabajo por que hoy era feriado, no se de que pero sabía que hoy era feriado

Me acurruce en los brazos de Jace y aspire su aroma

El se removió y lentamente abrió los ojos.
- Buenos días, princesa -dijo con una voz ronca.

- Buenos días mi amor -le dije y le di un corto beso.
Él me estrechó fuertemente en su brazos y dijo: - Me encantaría quedarme todo el día así, abrazado a ti.

- Quién dice que no podemos? -le dije, con una risa suave.

- Podemos desayunar aquí- me dijo sonriendo- le pediré a una de las empleadas que prepare el desayuno

- Quieres mimarme?- le pregunté riendo

- Quiero que te acostumbres a esta nueva vida- me dijo sonriendo - ya no tendrás que preocuparte por nada, y estaremos juntos, para siempre

Yo solo le sonrei y lo bese en los labios, el me siguió el beso sonriendo y luego nos separamos por falta de aire, nos abrazamos fuerte, pero luego mi vista fue hacia una fotografía de mi mamá, sentía en mi corazón que estaba viva, y creó que Jace se dio cuenta

-Clary... la encontraremos pronto- dijo el en un tono tan dulce

-Lo se, ella estara bien y la vere en poco tiempo- dije con el mayor convencimiento que era capaz.

El me beso la frente y me abrazo protectoramente mientras yo trataba de contener las lagrimas que amenazaban con salir

- Mi amor- me dijo Clary acariciando mi mejilla, no me había dado cuenta que las lágrimas salieron por si solas- todo saldrá bien, te lo prometo- me dijo y beso mi frente, tomó mi rostro e hizo que lo mirar- Hey, alguna ves he roto una promesa?- me pregunto

- No- le dije mirando sus ojos

- Entonces confía, la encontráremos- me dijo y me abrazo- yo ya te saque de ese lugar maldito de tu padre, y ahora encontraremos a tu madre

Volví a llorar, ahora sin tratar de ocultarlo, y lo abracé fuertemente.

- Eres el mejor -susurré contra su pecho- me alegra tanto que estés a mi lado.

- Y siempre lo estaré -agregó. Me estrechó en sus brazos y me frotó la espalda, luego me dio un suave beso en la coronilla.

Escuche que una de las sirvientas de Jace entraba a la habitación

- Con permiso- dijo sonriendo y poniendo la bandeja del desayuno en una esquina de la cama- que lo disfruten- nos dijo sonriendo y se fue

-Que quieres primero?- me pregunto sonriendo

- Café y tostadas -respondí.
Fue a traerme la taza de café y el plato con las tostadas, a las cuales le puso mermelada y mantequilla.

- Así ? -preguntó ofreciéndome el café y las tostadas.

-Perfecto -respondí y me acosté en la cama, Jace me dio el café y puso sobre mis rodillas el resto de lo que trajo. Se recostó a lado mío y comió unas frutillas.

Lo mire sonriendo y tome mi café, estaba muy rico. Aunque no estaba muy acostumbrada a que hicieran todo por mi

- Quiere?- me dijo Jace sonriendo y ofreciéndome una frutilla, yo lo mire sonriendo y tome la futilla