La Teoría Del Amor

Capítulo VIII

-Bien el plan es el siguiente - La rubia más bella de Ottawa observaba el papel bond que tenia plasmado un dibujo de la casa de Evan sobre su mesa, según ella pensaba infiltrarse en su casa para saber que sucede cada vez que Steve visita a Alina.-Hay una ventana atrás que deja ver hacia el interior de la cocina. En la parte de arriba están las recamaras. Ahí es donde yo subiré y espiare. Ten- Me hace entrega de unos auriculares y un micrófono. -El problema es que no se donde lo hagan- Hace una mueca.

-¿Hacer que?- La miro confundida.

-Sus porquerias mujer- Dice.

-Ah- Digo despreocupada - ¿dónde caiga no?- Trato de adivinar.

-Hay que acecharlos desde que el llega. Tu harás aquello -Baja más la capa de su gorra.

Rai lo tomo muy enserio, se puso unos pantalones verde militar y una playera blanca con los botines típicos de los soldados.

-¿Y donde se supone que estaré?-

-Aquí en mi casa, verás que hace al llegar y todo eso me lo informaras en el micrófono, yo estaré en la parte de atrás de mi casa ¿entiendes?-

-Si. Pero ¿como tomaremos las evidencias? Me parece mejor que instalemos cámaras ocultas -Ella deslizó la mirada hacia mi.

-No. Me parece mejor filmarlos en aquel momento -

-Bien. Como digas, después de todo no tengo experiencia en esto-

-Vale vistete ya que pronto llega- Me corre al baño para que me ponga un atuendo igual al suyo.

Hago caso y entro al baño para meterme en los pantalones y ponerme la playera, los botines demasiado varoniles, la gorra y las gafas oscuras. Raiven debe estar demente. Pero más aún lo estoy yo al hacerle caso.

-Listo- Digo al salir del baño alisandome los pantalones.

-Bien. Coge esto- Pone frente a mi los vinoculares. Yo los tomo entre las manos.

-Te vez profesional- Sonrie mientras me escudriña.

-Eres una pilla. Jamás pensé hacer esto en mi vida- Niego mientras me rio.

-No lo haces por mi. Lo haces por él - En su rostro aparece una sonrisa tierna.

-Por los dos. Porque le quiero- Mi rostro se vuelve serio y sincero.

Al poco rato ambas ya tomamos nuestra posición. Como lo acordamos, Rai aguardaba en la parte trasera de su casa y yo de incógnita en la ventana de su habitación. Y en breve llegaría el famoso Steve.
Un coche color azul rey aparco en la entrada de la casa de Evan, de inmediato le observé mediante los vinoculares y lo reporte a Rai.

-Halcón azul aparca en la trada- Halcón azul era la clave con la que llamaríamos a Steve. Por una razón desconocida los nervios me invadieron y mis manos temblaban.

-Enterada. Cambio-

Le vi poner la alarma al coche y dirigirse a la puerta. Se acomodo la corbata con arrogancia y tiro hacia abajo las puntas de su saco.

Tenía que ser Smith.

Decía mi mente suspicaz. Miró a todos lados y entro sin tocar el timbre.

-Halcón a cruzado la entrada -

-Dime si le vez hacer algo más-

Observó atenta por una regendija de la ventana que saluda a la bebé en la frente y a la madre en ambas mejillas. Nada fuera de lo normal.

-Halcón saluda como tío -

-No le pierdas de vista- Me riñe mi amiga.

Después de intercambiar palabras desaparecen de la ventana.