Cuando conocí a Jae nunca creí que llegaríamos a estar como estamos ahora. Digo, primero fuimos buenos amigos, todo bien, yo no sabía sus preferencias sexuales, ni él las mías, por lo que simplemente lo tomé como una amistad más.
Una noche de copas entre amigos, tuvimos la loca idea de jugar botella, supongo que saben de qué va el juego, así que no creo que sea necesario dar explicaciones. En fin, jugamos botella, tuve que besar a unas cuantas chicas, y a algunos chicos, también tuve que tocar el trasero de una de las chicas y los pechos de otra.
Estaba comenzando a hartarme, pues los retos eran generalmente los mismos. No me sorprendió cuando me dijeron"Hey Oh, tu reto es besar a Jae".
Y lo hice. No era nada del otro mundo.
Me acerqué a él y puse mis manos en sus hombros. Ambos estábamos ya algo tomados, podía verlo en sus ojos brillantes y mi leve dolor de cabeza. Traté de acabar con aquello pronto, por lo que solo estampe mis labios en los suyos, pensé que no me correspondería, después de todo solo tenía que darle un beso rápido y corto, pues no me habían dicho que clase beso sería, pero para mi sorpresa lo hizo de buena gana abriendo sus labios y ladeando su cabeza. Los silbidos alrededor no se hicieron esperar, y me vi a mi mismo rodeando su cuello, metiendo mi lengua en su cavidad bucal y mordiendo ligeramente al terminar el beso.
Después de aquello, terminamos el juego y cada quien fue por su lado. Y por supuesto, Jae y yo fuimos juntos a casa, y bueno...
Ya se imaginarán lo que pasó aquella noche.
Deberían de haber visto la cara de Jae cuando despertamos al día siguiente, y supongo que tal vez mi cara fue igual. Después de aquel día nuestra relación cambió, (y debo admitir, nuestras hormonas también).
Al poco tiempo, después de aceptar nuestros sentimientos, y de varios encontrones, de haber intercambiado besos y toqueteos, nos convertimos en pareja.
Nuestra relación era estable. Planeaba pedirle matrimonio dentro de un par de años, si Dios nos daba licencia, pero la noticia de un posible bebé arruino mis planes. Jae y yo fuimos a centro de maternidad para hacer un examen. Ese mismo día, después de haber comprobado los resultados y haber visto a mi bebé por primera vez en la ecografía, salí corriendo a la mejor joyería de Seúl para comprar el anillo y al siguiente día le propuse matrimonio a Jae. Nos casamos dos meses después, quería que nuestro hijo llegará dentro de un matrimonio, además de que me pareció muy lindo el hecho de que nuestra unión además de ser por el amor que nos teníamos, era por nuestro bebé.
Bae llegó a nuestras vidas, dándole todo el brillo y felicidad posible. Era un niño muy mimado y querido por mí y por Jae.
Pero más por mí, cabe aclarar.
Tal vez los primeros meses fueron un poco pesados, y quizás peleamos por cosas tan sencillas muchas veces, pero supimos arreglar nuestras diferencias y supimos llevar las cosas bien durante los primeros años de vida de Bae.
Tuvimos mucha ayuda, Yoongi nos dio muchos consejos en diferentes ocasiones, aunque se suponía que tal vez fuera Jae quien le diera consejos a Yoongi, este parecía tan maternal que Jae era quien terminaba buscando el consejo de Yoongi. Al contrario, con Jimin, era quien me buscaba para pedirme consejos sobre el cuidado de sus hijos. Y muy de vez en cuando, yo lo buscaba a él.
Incluso salíamos juntos cuando nuestras parejas se molestaban con nosotros. A veces era Jae el que se molestaba conmigo, a veces era Yoongi quien se molestaba con Jimin, o a veces parecían ponerse de acuerdo para molestarse al mismo tiempo con ambos.
Éramos tan cercanos los cuatro, que Jae y yo terminamos apadrinando a JiHoon y Even, y viceversa, Jimin y Yoongi apadrinaron a nuestro Bae. Además de que la amistad entre los tres pequeños nos obligaba a vernos todos los días, aunque fuera para intercambiar un saludo.
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Casado con un Idiota...no tan Idiota|Embarazado de un Idiota II [JIMSU]
FanficDespués de cinco años de matrimonio, Yoongi y Jimin han decidido dar otro gran paso en su vida. Agrandar la familia no es tan difícil, pero el camino suele tener baches, y ambos tienen que aprender a afrontarlos. La segunda parte adaptada de "Embara...