Haber venido a París no fue la mejor idea de todas. Tal vez yo tenía un buen trabajo, un buen puesto, pero al parecer el oficio como profesor de música en una universidad aquí no se daba mucho. Jimin se quejó muchas veces conmigo porque no encontraba trabajo, porque estaba aburrido de no hacer nada en casa.
Él quería trabajar, pero no había donde buscar.
Peleamos muchas veces por eso, pero un día que volví de trabajar, después de haber cenado y habernos duchado juntos, mientras estábamos acostados en la cama, me platicaba con ojos brillantes como había descubierto en el periódico un anuncio en el cual se buscaba a un profesor de piano.
—No sé si realmente diga eso, digo, aun no puedo leer completamente en francés—
Tuve que leerlo yo mismo, antes de si quiera venir hace un año para la semana de la moda, había comenzado a estudiar la lengua, casi no lo hacía. Estudiaba una hora, o dos en los fines de semana, y después de un tiempo todo ese estudio, aunque fue pequeño dio sus frutos.
—Están buscando un profesor de música para un niño de ocho años, ofrecen una buena paga y accesibilidad a que tú establezcas el horario, si quieres llamarlos marca este número—le dije después de leer el anuncio, señalé el número y él me sonrió.
—Gracias Suga—y me besó.
El beso se volvió húmedo y necesitado; y finalmente acabamos haciendo el amor aquella noche, igual como la noche anterior, y la anterior a esa, y a esa otra. Habíamos celebrado nuestro séptimo aniversario hacia unas semanas, y desde entonces habíamos estado haciendo el amor casi cada noche.
Mi trabajo constaba de evaluar los diseños que se lanzarían en cierta temporada, y también de hacer mis propios diseños para la revista de moda que lanzaba la empresa cada mes. Obtenía una buena paga, aunque yo no sabía qué hacer con tanto dinero, terminábamos gastándolo en algún restaurante caro, incluso tuvimos la idea de llevar a los niños a Disneyland, pero aun no habíamos tenido oportunidad de ir por mi trabajo.
Tenía mi propia oficina, y hacía un par de semanas también, había sido asignado como director de un grupo pequeño para un evento que se realizaría dentro de unos meses. Gracias a esta reciente asignación, llegaba más tarde de lo común a casa, y era porque durante la jornada laboral no podíamos vernos para ponernos de acuerdo. Siempre terminábamos quedándonos una o dos horas después de trabajar y avanzar un poco.
Para mi desgracia, o fortuna, ni siquiera sé cómo llamarlo. En ese pequeño grupo había un hombre que al parecer es tío del niño al que Jimin le está dando lecciones de piano. Su nombre es Gabrielle, tiene treinta años y parece estar obsesionado conmigo.
Hace todo lo que le pido, sin rechistar, si le pido que me traiga un café, lo hace, si le pido que termine un diseño por mí, lo hace. No me sorprendería si le dijera que se lanzara de un precipicio y el idiota lo hiciera.
Siempre que lo veía por algún pasillo terminaba escondiéndome detrás de una pared, de una planta o detrás de otra persona. La situación se había convertido en un rumor cómico en el cual "el diseñador Yoongi huía de las garras de Gabrielle, quien parecía estar perdido por él"
Este rumor al parecer logro salir de las paredes de la empresa y colarse en los oídos de otras personas. Quienes se encargaron de boicotearme y hacer parecer como si fuese yo el que estaba detrás de Gabrielle. Esto por supuesto, no tardó en llegar a oídos de Jimin.
Jimin ya sabía la clase de hombre que era Gabrielle, a veces, cuando el susodicho me hacía rabiar tanto, terminaba contándole a Jimin como este hombre se encargaba de hacerme el día imposible.
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Casado con un Idiota...no tan Idiota|Embarazado de un Idiota II [JIMSU]
FanficDespués de cinco años de matrimonio, Yoongi y Jimin han decidido dar otro gran paso en su vida. Agrandar la familia no es tan difícil, pero el camino suele tener baches, y ambos tienen que aprender a afrontarlos. La segunda parte adaptada de "Embara...