El centro de rehabilitación

Las desapariciones

El ruido lo seguimos escuchando varios minutos después. Cada vez se escuchaba más cerca de mi puerta. De repente, el ruido se detuvo. Salimos a ver qué había pasado. Vimos 8 puertas tiradas. Por curiosidad revisamos cada una de las habitaciones con las puertas de esa manera. En todas no había nadie; la mesa estaba sin recoger, la cama deshecha y la televisión prendida.
-¿Qué creen que haya pasado?- pregunta Maggie.
-Pienso que los sacaron a la fuerza los que estaban aquí- digo.
-Pero, ¿Para qué?- pregunta Alfredo.
-Quien sabe, a lo mejor hicieron algo- dice Valentina.
-¿Algo como que?- pregunta Fernando.
-Nadie sabe, pero yo no creo que por nada hayan sacado a la fuerza- dice Paola.
Mientras discutíamos sobre qué había pasado una chica sube por el elevador.
-¿En el piso de ustedes también hay puertas tiradas?
-Si- respondemos todos- ¿Por qué?
-Porque en los demás pisos también hay puertas tiradas.
Todos nos quedamos atónitos. ¿Qué rayos podía haber pasado?. Bajamos por el elevador y vemos que dentro de él hay huellas raras, al parecer de camillas de un hospital. Saliendo del ascensor las huellas seguían. Las comenzamos a seguir. Al parecer las personas que las conducían llevaban prisa y no quisieron dejar muchos rastros. De repente las huellas empezaron a desaparecer. El rastro terminaba en frente del psicólogo.
-Esto ya es muy raro- dijo Paola.
-Vamos a preguntarle al doctor Aarón, a lo mejor él sabe algo- dijo Alfredo.
Tocamos en la puerta de su consultorio.
-Ah, son ustedes. ¿Qué quieren?
-Saber porque hay puertas tiradas en todos los pisos- dice Valentina.
-Yo no sé de eso, además estoy en un asunto muy importante, así que cuando tengan algo más interesante que preguntarme, búsquenme.
Nos azota la puerta en las narices sin poderle preguntar algo más.
-Nunca nos van a decir la verdad- les digo.
-Entonces, ¿Qué sugieres que hagamos?- me pregunta Fernando.
-Buscar respuestas en su oficina.
-¿Cuándo?- me preguntan todos.
-Esta noche.