Había quedado con Mia en un parque cerca de su casa. La estaba esperando y sentimientos deprimentes se estaban apoderando de mi. Verla caminar a lo lejos me hacia recordar todo lo que viví junto a ella. Esto me está destruyendo por completo y lo peor de todo es que no se puede remediar. Tengo que hacerlo y tengo que hacerlo ahora, por que si no lo hago me voy a perder en sus ojos, comenzaré a llorar y a decirle la verdad, y se que ella jamas va a entender esa razón.
-Hola.- dijo acercándose y dándome un tierno beso en los labios.
-Iré al punto.- dije lo más frío posible. Evitando su mirada.
-Esta bien.- soltó, extrañada de mi actitud.
-Conocí a alguien más.
Tardó un minuto en reaccionar, su rostro se distorsionó y sólo veía confusión en su
cara.-Y, y, y creo que estoy enamorado de esa, de esa persona.- seguí tratando de no trabarme.
-¿Estas de broma verdad?- comenzó a reírse nerviosa. Hacia eso cuando estaba incomoda.
Pero me resultó algo raro, ella nunca estaba incomoda conmigo.
-No, no es broma. Sólo, mira, no quiero lastimarte, pero, ¿terminamos, si?- solté, sin más, sin detenerme a ver su expresión, sin pensar en lo que le iba a afectar.
-No te creo.- una sonrisa segura se formo en sus labios.
-No me importa que me creas, sólo te estoy avisando.
-Me estas mintiendo.- siguio sonriendo, pero al ver que yo no reia empezo a hablar de nuevo- Mierda Dylan, ¡me estás mintiendo! ¡eres un maldito mentiroso!
Comencé a sentirme mareado, quería golpear algo y estaba a punto de llorar, mi corazón palpitaba demasiado rápido, tanto que sentía que saldría de mi cuerpo.
-No es mi problema que no quieras entenderlo.
Comenzaron a salir relámpagos del cielo anunciando una próxima lluvia. Mia les tenía miedo. Quisiera estar a un lado de ella, abrazándola, pero a veces las cosas no pueden ser.
Caminé rápidamente hacia el lado contrario por que ya no podía seguir ahí. Y sabía que la tormenta lo iba a empeorar.
-¿Por que ahora? Ahora que comencé las quimio, ahora que más te necesitaba. Esto no es verdad. Esto no es verdad. ¡Dime que es una mentira!
-¡ME VALE UNA MIERDA SI ME NECESITAS! ¿Te quedó claro? Ya no me importas, nunca me importaste, ahora aceptarlo y dejame en paz de una vez por todas.
-¡Mirame a los ojos, Dylan! Mirame a los ojos y dime que tu estas terminando conmigo y no alguien mas te pide que lo hagas.
-Solo dejame tranquilo Mia.
-Es que no te creo, no puedo, hemos pasado por tantas cosas como para que me hagas esto. ¡Por Dios Dylan! Vamos a mudarnos a un departamento. Ya casi cumpliremos 1 año. ¿Por que? No lo entiendo.
-Ya te lo expliqué, no pienso gastar palabras en alguien necia que no puede aceptar que no la quieren.- tratando de convencerla.
Comenzó a llover.
-No te creo.- dijo cuando volví a alejarme.
El liquido comenzó a mojarnos poco a poco.-Mirame a los ojos, no seas cobarde, mirame a los malditos ojos.- tomó de mi hombro y me giro hasta ella.- Dímelo a la cara y veme a los ojos, dime que ya no me amas y que quieres a otra.
No podía. Simplemente no podía.
-Solo aceptarlo y deja las estupideces.
-¡MIRAME Y DILO!
Estábamos frente a frente, podía ver sus hermosos ojos, no podía diferenciar las lágrimas de las gotas de lluvia que caían en su rostro, pero sus ojos estaban rojos y su voz quebrada.
-No puedo.- dije después de salir corriendo y evitar su mirada.
-¡JAMÁS VOY A CREERTE!- escuché a lo lejos.
Esa fue la ultima vez que la vi de cerca.
♥♥♥♥♥
¡Hola!
Perdón por tardar tanto, más de un mes.
Tenia exámenes y otras cosas.
Saben que amo cuando comentan ❤
Espero le haya gustado y hoy subiré otra parte, pero, me temo que ya no es un capitulo :(
No me maten, lo descubrirán después.
Los amo, gracias por esperar ❤
Besoos 😘
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El chico de los ojos grises © [PAUSADA]
JugendliteraturHe estado enferma casi toda mi vida, cansada de la misma rutina de todos los días. Cuando un día inesperado conozco a Dylan, una persona que hace mis días mas felices de lo normal. Y entonces, tengo el deseo de vivir, de enamorarme, de luchar y de...