Si hubiese un momento que pudiese evitar a toda costa hasta ahora, habría sido esta situación. Nunca me hubiese esperado conocer a la mujer que se había ganado al idiota más grande que jamás había conocido, la mujer que se había ganado al hombre del que había estado profundamente enamorada y estaba por encima de mí. Y hasta ese momento, me había tratado de convencer de que tal vez, que sólo tal vez ella no era real. Pensé que tal vez Tom había mentido en un intento por ponerme celosa o algo similar a lo que yo había hecho con Oliver en el bar. Pero mientras me veía ante la joven esbelta delante de mí, con la piel bronceada y delicados rasgos faciales, la realidad me azotó fuertemente. Ella era real. Y yo era patética.
—¿Quien es ella?
Su voz en un delicado sonido pero al mismo tiempo concisa, cortó a través del silencio entre nosotros tres. Su mirada se dirigió desde la mía hasta la de Tom y como si fuera una orden, los hombros de Tom cayeron. Su boca se abrió solamente un poco, ya que parecía tener dificultades para encontrar palabra y responder mientras Ria dio un paso adelante. Ella cerró la puerta de la terraza detrás de ella atrapando el aire cálido en el interior del departamento. Dejó caer una bolsa de plástico que sostenía en la mesa junto a las copas de vino vacías y la cajetilla de cigarrillos, ladeó la cabeza hacia Tom.
—¿Y bien? —Volvió a hablar con voz más fuerte y notablemente irritada—. ¿Quien es ella?
Tom tragó saliva, sus ojos castaños se abrieron y sus brazos cayeron rígidos a sus costados. Finalmente habló con voz ronca hurgando entre sus palabras.
—Ella es... Anna —tropezó palabra—. Ella es Ann...
—¡Ya escuché su nombre!
Di un pequeño brinco ante el tono afilado que acababa de ser ejercido desde la pequeña mujer que se coloca entre mí. Me sentí absolutamente desesperada mientras estaba viendo la caída del rostro de Tom.
—Quiero saber quién es... Dime.
Dio un paso hacia Tom de nuevo y caminó para apoyarse en el barandal, mirándolo a la cara y seguidamente a mí. Quería mirar a otro lado, quería que mis ojos se perdieran entra las parpadeantes luces de la ciudad y en las hermosas tonalidades del cielo que se oscurecía y se cubría sobre nosotros. Pero no lo hice. Mis ojos se mantuvieron rígidos sobre los de Tom. El me miró rápidamente, suplicando. Implorando...
Por favor.
Me aclaré la garganta y luego junté mis dedos para apretarlos con fuerza. Pensé con amargura que sólo uno momentos antes, los dedos de Tom habían estado entrelazados suavemente entre los míos. Habían estado tocándome suavemente, delicados y jodidamente cálidos. Parecía que quería borrar todos esos pensamientos de mi mente, por lo que los apreté con más fuerza. Y más fuerte. Estaba dejando de sentirlos.
—H-hola —hablé, mi voz llenó el silencio a través del balcón. Ria se dio la vuelta, poniendo toda su atención en mí. Ella se veía absolutamente enfurecida, como debería de estarlo, pero me mantuve firme. Yo podía hacer esto.
—Soy Anna —dije con cuidado. Si yo iba a calmar la situación que se presentaba, necesitaba mantenerme lo más tranquila posible. Mientras ella miraba expectante a mi dirección, su pequeña boca se curvó en una mueca. Inhalé profundamente. Aquí vamos—. Soy amiga de Bill.
No era una completa mentira, era amiga de Bill. Tenía ganas de añadir la otra parte y decir: Soy amiga de Bill y estoy completamente enamorada de tu novio. Mis palabras hubiesen sido más honestas. Ria parpadeó rápidamente, y sus ojos almendrados se estrecharon en un intento de descifrar lo que acababa de decirle. Tom estaba detrás de ella, su mirada todavía estaba llena de preocupación, pero era evidente que había ayudado a apaciguar el fuego de la situación con mi mentira piadosa. Pude ver el alivio en su rostro.
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25 Weeks Without Mr. Arrogant en Español
FanfictionHan pasado casi seis meses desde que Anna vio a Tom. Después de creer que ella nunca volvería a verlo, los dos chocan en la Ciudad de los Ángeles. ... Y mientras yacía sola en mi apartamento vacío, me di cuenta de que Los Ángeles, aunque era inmensa...