Entre Tu Mundo Y El Mío (Rescribiendo)

Capítulo 7

Capítulo 7:

*NARRA JADEN*

Que maldita noche pase. Ese estúpido novio de Westh, la besaba y ella no lo rechazaba, además de que se estaba quedando en su casa ¡Su casa! ¿Lo entienden? Maldición la ventana estuvo cerrada toda la noche y no pude ver nada pero me imagino un sin fin de cosas que pudieron haber pasado. Me encantaría ser yo aquel que esté provocándole placer, el que disfrute de su cuerpo, el que bese esos labios. Joder odio a ese idiota que puede tenerla y no yo. ¿Celos? Jamás. Solo odio no tener lo que quiero. Y quiero que ella sea mía. Eso es todo, no quiero que se me resista a mí pero si ande con otro.
Hoy tendría que verla, ya que hay varias clases que compartimos juntos y gracias al estúpido castigo del director Foker, seríamos pareja. Aunque podría sacar provecho de la situación y acercarla a mí. Definitivamente eso haría, quiero acostarme con ella.

Me levanté de la cama y fui al baño de mi habitación a bañarme. Me di una ducha corta porque se me hacía tarde y salí con una toalla rodeando mi cintura. Eché un vistazo a la ventana y estaba abierta y delante de ella se encontraba la linda Emily en ropa interior. Joder que ropa más sexy usa esta niña. Mi miembro comienza a despertar de solo verla. De repente todo rastro de excitación dentro en mí es reemplazado por uno de enojo. El idiota de su "noviecito" se encuentra en bóxer y la abraza de atrás comenzando a besar su cuello. La rabia puede conmigo y cierro las cortinas. Hoy no es un buen día.

Me pongo unos jean ajustados negros, una camiseta gris pegada al cuerpo, ya que favorece mis músculos, mis converse negras y una sudadera negra.
Salgó de mi casa sin desayunar y subo a mi auto decidido a parar en una cafetería para comprar un buen café, tal vez eso ayude a relajarme.

*NARRA EMILY*

Me desperté y fui a ducharme. Ian no estaba ahí cuando desperté asique supuse que ya se había levantado. ¿Les dije que Ian comenzará a estudiar en mi instituto? Bien, lo hará. Lo cual es grandioso ya que tengo a alguien que me lleve al instituto que no sea mi padre. Lo único es que Ian tiene una moto y eso como que no se me da mucho. Pero antes que ir caminando.

Salgo del cuarto de baño en ropa interior. Busco en el armario que ponerme. De repente Ian me sorprende pegándose a mi cuerpo causando que un escalofrió recorra mi espina dorsal cuando sentí el contacto con su piel desnuda. Había olvidado lo sigiloso que podía llegar a ser.

-Hola dulce Em, el desayuno está listo ya baja.- dijo en mi oído, su cercanía provoca cosas en mi estómago, se rio al notar mi piel erizada y antes de irse me dio una nalgada.
Lo vi ponerse unos pantalones y salir. Ian sí que tenía un cuerpazo.

Me decido por unos Jeans desgastados largos, una blusa color vino de mangas hasta los codos, y unas botas con flecos negras bajas.
Bajo y el olor a tostadas recién hechas y exprimido de naranja invade mi nariz. Mi estómago ruge con fuerza, provocando que me sonroje, vaya no sabía que tenía tanta hambre.

-Tu sí que tienes hambre.- dijo Ian divertido haciendo que me sonroje más. Él lo nota y deposita un beso en mi mejilla y me da una sonrisa tranquilizadora para que me relaje.
Me siento y desayunamos. Había olvidado lo bueno que era estar con él, me hizo reír todo el desayuno.

-Bien hora de irnos.- digo llevando los trastes al fregadero.

-Toma tu chaqueta y vamos.- dice sonriente.

Tomo mi chaqueta de cuero negra, y salgo. Al salir me encuentro con una imagen muy excitante. Un Ian en una imagen de tipo malo, con su chaqueta de cuero, su cabello rubio peinado en un jopo que le queda demasiado bien, su camiseta blanca básica pegada al cuerpo que marca sus abdominales, esos pantalones que le marcan su trasero y esa sonrisa que lo caracteriza. A eso sumémosle que está montado en su motocicleta negra esperándome.