Al principio no sabia sobre que escribir en este capítulo y es que me encantaría hablar sobre mi mamá, sobre como era ella pero cada día siento que la olvido cada vez más y no se si eso es bueno o malo; bueno porque ya no me hará falta, ni sentiré este vacío en mi pecho y malo porque al fin y al cabo era mi mamá. Todos los días trato de recordar momentos claves y lindos con mi mamá pero no me acuerdo, solo muy pocos, eso me parte el alma, cada vez olvido más su risa, su voz, su forma de ser y en mi cabeza sigue el debate entre sí esto es bueno o malo.
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El día en que mi mamá murió; después de desahogarme botada en el suelo junto a mi primo Daniel, me puse de pie y me acerque al cuarto de mi mamá; ya había llamado a mi papá llorando para que fuera a la casa. Entré y estaban mis familiares tomándola de las manos y mirando su rostro, me acerque con mucho miedo y ahí estaba, la mujer que más amaba postrada en una cama, sin vida, su piel era amarilla y de su cuerpo salia un olor a crema hidratante, tenía los ojos cerrados, los labios pálidos y un gesto que nunca olvidaré, estaba sonriendo. -Se fue feliz- Fue lo que dije casi inaudible pero todos escuchaban lo que decía. -Esta hermosa - Se que suena raro pero se veía bonita, tenía el pelo desordenado con algunos mechones pintados de rubio y blanco, me senté junto a ella y le bese la frente, empecé a peinar su pelo, sedoso, tome su mano helada y la apreté contra mi pecho cerrando los ojos por unos segundos y cuando los abrí todos me miraban con cara de lastima. Odiaba eso, pero sabía que no era su intención, me puse de pie y me senté en el sofá de la sala como hasta las 3 de la mañana hasta que la mayoría de gente se fue y me quede dormida en la cama de mi abuela.
Cuando desperté mire mi teléfono; tenía al rededor de 200 mensajes a whatsapp abrí la aplicación y me di cuenta que la mayoría de estudiantes, amigos y números desconocidos escribían para darme el pesame. Resulta que en mi colegio la mayoría de días especiales hacían formaciones y ya que era un colegio católico hacían oración y la rectora pidió por mi, mi hermana, mi familia y mi madre fallecida la noche anterior. Algunas personas que estuvieron ahí me contaron que muchos quedaron en shock, sobre todo mi primo, David, al que no le habían comentado nada ya que no querían que fuera al colegio triste.
Me puse de pie y fui al cuarto de mi mamá, ya no estaba. Los de la funeraria se la habían llevado a eso de las cuatro de la mañana, solo había una cobija doblada sobre el colchón sin sábanas, era la cobija que mi mamá siempre usaba, era blanca con decoraciones moradas, la abrace y la inhale muy fuerte, olía a mi mamá.
Ese día me vesti de negro, obviamente, pero casual, un pantalón, una blusa, unos tenis, un abrigo de este color, no me maquille estaba normal, fue mucha gente, ex amigos. Familia, conocidos, desconocidos para mi, gente colada que hablaba conmigo y yo no tenía ni idea de quien era, gente que me abrazaba y me decía que me parecía mucho a mi mamá, gente que estaba borracha, gente que fumaba, gente que hablaba de todo excepto de mi mamá, gente elegante, gente corriente, gente que odiaba, gente que gritaba, gente imprudente, solo gente que no creía importante, ya que muchos de ahí estaban por obligación y eso fue lo que le escuche a un señor diciéndole a su hijo no menor de treinta años cuando me saludaron les sonreí sarcásticamente y después seguí con mi camino, salude cientos de personas y me preguntaban que como estaba pero ¿Que creían que preguntar eso estaba bien? Como la respuesta era obvia solamente sonreía.
Al día siguiente continuo el velorio, otra vez había mucha gente, cuando sonaron las campanas de la iglesia que quedaba al lado que indicaban las doce llegaron dos hombres de traje y dieron el anuncio de que la misa ya iba a empezar y que después de eso llevarían a mi madre al cementerio, entraron se llevaron el cajón con ayuda de otros hombres familiares míos y la montaron en la carrosa, cuando iba saliendo una señora muy mayor me tomo del brazo y me dijo -Valentina, espera, quiero decirte que tu mami esta en el cielo, pero siempre va a estar contigo, cuidándote.- Después me Soltó y se fue y nunca más la volví a ver, iba vestida de blanco y cuando le pregunte a mis tios que si sabían quien era me respondieron que no vieron a nadie con esas características y que a lo mejor era amiga de mi madre, no le di importancia y seguí con mi camino.
En la misa de mi mamá mi papá leyó un poema hermoso, de una película que se llama mar adentró, te recomiendo que lo busques, yo por mi parte me lo sé completamente y sé porque a mi mamá le gustaba tanto.----------------------------------------------------------
El día que me enteré que mi abuela había fallecido un profesor me había quitado el celular.Era viernes y me lo devolvió me subí a la ruta y empecé a mirar los nuevos mensajes y de pronto entre al chat con mi papá y mi hermana y me di cuenta que mi papá decía que si yo ya sabía lo de mi abuela; la mire a los ojos y le pregunte -¿Se murió? - A lo que ella afirmó asintiendo con la cabeza, no sentí nada, eso me asustó, solo un gran vacío y unas ganas de llorar inmensas, lo hice, pero por lo mucho por un minuto y después me calme y me quede en silencio por un largo tiempo.
Por otra parte el velorio de mi abuela fue todo lo contrario al de mi mamá, fue muy tranquilo, por lo mucho fueron cien personas, ese día no lloré, no derrame ni una lágrima, estuve tranquila, pasiva, en calma, ame a mi abuela con mi vida y le doy gracias a Dios por haberme dado la oportunidad de estar con ella 15 años.

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Flores para tu madre
Teen Fiction"El día 11 de junio de 2015, mi madre, Rossy Plata, se fue a una mejor vida después de un largo período de lucha contra el cáncer. Ésta es la historia de su aventura a través de las oscuras y terribles aguas de tan asesina enfermedad." BASADA EN H...