Sara Lindstrom, una chica de 17 años, de pelo castaño hasta los hombros y ojos marrones, intenta disfrutar al máximo sus últimos años en la secundaria junto a sus amigos.
Amores, nuevas amistades, peleas y buenos momentos pasaran por su vida... per...
-Sí, pero debes prometer no contarle a nadie-dice Abby.
-wow, claro no le diré a nadie, se los prometo-dice Evan seguro.
Evan es un nuevo amigo, el otro día estabamos hablando de esto en los pasillos y el nos escuchó. De inmediato hizo millones de preguntas y no tuvimos otra opción que contarle.
Es un lindo chico, de cabello castaño y ojos marrones, alto y muy directo a la hora de decir algo.
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A pesar de conocerlo hace poco, ya lo tratamos como a cualquiera de nosotros. Bueno excepto Zac, a él no parece caerle tan bien que digamos, pero estoy segura que ya cambiará de parecer.
Ya pasó una semana de lo ocurrido y todo va bien. Nadie sospecha nada, bueno, Evan lo sabe, pero parece de confianza y el dice que no le dirá a nadie.
(...)
Tomé mi almuerzo y me senté con los chicos.
-Oigan, como ya deben saber el viernes será mi cumpleaños y haré una fiesta en mi casa-dice Abby.
-Como ovidarlo-digo riendo-y...¿que quieres que hagamos?
-Bueno necesito que me ayuden. Tiene que ser una SUPER fiesta-dice resaltando la palabra "super".
-Desde luego, cuenta conmigo para lo que necesites-dice Rachel sonriendo.
-Conmigo tambien-dicen Sam y Evan al unísono.
-Ya sabes la respuesta-le digo alzando las manos.
-Supongo que conmigo tambien-dice Zac en broma.
-Oye-dice Abby y le pega.
Todos reimos. Sonó el timbre nos paramos y fuimos a nuestras clases.
(...)
Entro a casa y no hay nadie, ya que mis padres estan en el trabajo y Dan sale más tarde.
Voy a la cocina, me hago un sándwich y subo a mi cuarto.
Me acuesto en la cama y miro el techo. Sigo pensando en esa noche...cuando Zac y yo estuvimos a punto de besarnos.
Desde ese día no hablamos como antes, es decir, si hablamos pero...no es lo mismo.
No entiendo por que es así, simplemente se enojó o eso creo y fue una estupides, nisiquiera nos besamos.
En fin, ya se le pasará.
Tocan la puerta y bajo a abrir.
-Holaa, andando hay mucho trabajo que hacer-me dice Abby entrando.
Con ella viene Rachel.
-Okeey, pasen-les digo
-Suban a mi cuarto, ahora voy con algo para tomar.
