Assassin's Creed: Miraculous [Pausado hasta Nuevo Aviso]

I - Recuerdos

"¿Qué es un hombre si no la suma de sus recuerdos? Somos lo que vivimos, lo que nos contamos." – Clay Kazmarek / Sujeto 16.

Faltaba poco para el último día de clases en la Secundaria Francois Dupont. Todos esperaban con ansias el día de la graduación. Ya casi era hora de que sonara el timbre que marcaba el tiempo de salida.

Había alguien que no paraba de llorar ya que temía que probablemente no volvería a ver a sus amigos por el resto de su vida: Rose, quien con pañuelo en mano, estaba fuertemente abrazada de Juleka. La única que parecía mostrar algo de fría indiferencia.

-Ya cálmate, Rose, solo faltan dos semanas. A parte escuché que Nino irá también a tu escuela- Dijo la chica de cabello púrpura, tratando de consolar a su mejor amiga.

-Pero jamás será lo mismo- Dijo la chica rubia entre lágrimas mientras sopleteaba su nariz sobre el pañuelo y se limpiaba su maquillaje lavado por el llanto.

-Mi pañuelo ya no es lo mismo- Respondió Juleka al acto de su amiga.

Por fortuna algunos ya habían formado lazos fuertes durante los 3 años que compartieron. Tal como es el caso de Ivan y Myléne, que prometieron reencontrarse cuando lleguen a la Universidad. Por otra parte, Max y Kim pactaron en volverse a ver al menos una vez por año en el cumpleaños de cada quien debido a que Kim se mudaría a Canadá ya que quiere convertirse en jugador profesional de Hockey algún día.

Pero desgraciadamente algunos lazos se rompieron. Como fue el caso de Kim y Ondine. Afortunadamente otros superarán la barrera de la distancia que solo será de unos cuantos cientos de metros, y unos cuantos cientos de kilómetros.

Chloé mostraba como siempre su actitud fría y egocéntrica hacia Sabrina, quien se veía muy triste.

-Bien, Sabrina, en dos semanas será el Adieu- Dijo la refinada rubia mientras terminaba de acomodar su cabellera frente al espejo que sostenía Sabrina.

-Pero me inscribiré también en tu nueva escuela- Dijo la peliroja bajando levemente el espejo para entrar en contacto visual con su amiga. O mas bien, ama.

-Mira, nuestra amistad ha sido bonita y eso pero acéptalo. Estaré en una escuela nueva y necesitaré una asistenta nueva- Afirmó Chlóe, quien ahora se empolvaba el rostro.

-Chlóe, he estado a tu lado en todo lugar desde que tengo memoria- Dijo Sabrina.

-¿Cómo quieres que te lo diga? Te dejaré independizarte, recortaré personal. Escoge la forma- Respondió Chlóe, mientras guardaba el resto de sus cosméticos.

Sabrina rompió en llanto. Puso el espejo en el escritorio, frente a ella, y colocó su cara encima del espejo. Y cubrió su cabeza bajo sus brazos. Su único estilo de vida que conocía estaba por terminar.

Del otro lado del aula, dos amigas comentaban acerca de la situación que acabaron de presenciar.

-Probre Sabrina. Bueno, es su culpa por escoger una "amiga" tan mala- Dijo Alya, quien luego miró a Marinette, que miraba desde atrás un tanto triste a Adrien. Como si estuviese a punto de soltar alguna lágrima.

-¿Alo? ¿Tierra a Marinette?- Dijo Alya, moviendo su mano frente al rostro de Marinette.

-¿Eh?- Dijo Marinette, volteando a ver a Alya.

-Oye, ya casi es hora de irnos. Y perdona que pregunte esto tan seguido... Pero ¿Cuando piensas decírselo?- Dijo Alya mientras colocaba su mano sobre el hombro de Marinette.

-No lo se, Alya- Dijo Marinette en un tono triste. Bajando un poco la mirada.

-Faltan unas semanas para las vacaciones, y luego no lo volverás a ver hasta la graduación. Probablemente esa será la última vez que lo veas- Dijo Alya.