Angel.

†Capitulo.12

Llegamos a casa y subimos a mi cuarto para buscar vestido para el cumpleaños de Valeria, había algo que no me gustaba, era raro que después de amenazar a alguien la invitasen a su cumpleaños.

-¿Qué te pasa Brooks? -preguntó Charlie abriendo mi armario.

-Hay algo que no termina de convencerme con Valeria... -digo mientras me siento en la cama.

-Ni a mi, pero vayamos y pasémoslo bien. -me sonrió para luego seguir mirando vestidos.

(...)

La hora de la fiesta había llegado, le había insistido mil veces a Charlie de quedarnos en casa para ver una película y comer helado, pero ella las mil veces me dijo que no.

Entré en la fiesta cogida del brazo de Charlie pero en cuanto vió a Aaron se fue dejándome sola entre la muchedumbre...

Caminé, o más bien, empujé a la gente hasta llegar a la barra improvisada donde divise a Alex con Valeria, me giré y caminé hacia otro lado encontrándome con Hayden.

-¡BROOKS! -exclamó en forma de saludo.

-¡Hay! -sonreí mientras le daba un corto abrazo.

Hayden y yo caminamos hasta el jardin trasero, necesitábamos aire fresco.

-Brooklyn. -me llamó Valeria acción a la que yo me giré mirándola.

-¿Qué pasa Valeria? -pregunté seca

-Ir dentro, abriré los regalos. -sonrió algo falsa y se fue.

Hayden y yo emprendimos camino hacia dentro, dejé pasar a Hayden, dado que la puerta era algo pequeña para pasar las dos, y cuando entré sentí un líquido caer sobre mi cabeza.

Valeria me la había jugado.

Miré a todos los presentes, todos me miraban mientras se tapaban la boca riéndose o simplemente señalándome.

Corrí lo más rápido que pude hacia mi casa, hasta que una mano cogiendo mi brazo me paró.

-Nena. -dijo él.

-Alex. -me giré llorando y sin importarme la pintura verde le abracé con todas mis fuezas.

Al día siguiente.

No sé ni cómo, ni a qué hora llegué a mi casa, solo se que me había pasado toda la noche llorando, abrazada a Alex sentados en el banco del parque.

Cogí mi móvil de la mesilla y miro las veinte llamadas perdidas, casi todas de Charlie.

Miré los mensajes y solo abrí el único que me importaba. Alex.
"Espero que cuando despiertes, estes mejor, llámame y quedamos"

No contesté, no tenía ganas de nada, cerraba los ojos y veía a todos reírse de mi... Y a Valeria sonriendo victoriosa...

Las chicas se pasaron por mi casa, pero mi madre les dijo que no podían verme.

Me pase todo el día en la cama abrazando una almohada, ¿por qué Valeria se comportaba así conmigo?

Lunes.

Había llegado al instituto algo más temprano de lo normal, caminé por los pasillos hasta mi taquilla, noté la mirada de todos cuando pasaba, algunos aún se reían por lo del Viernes pero hacía oídos sordos.

-¿Por qué no me llamaste? -preguntó Alex detrás de mi.

-No tenía humor Alex... -suspiré cerrando la taquilla y me giré mirándolo.

-Siento lo que pasó el Viernes, yo no tenía ni idea. -se disculpó mirándome a los ojos.

-No tienes la culpa. -le sonreí lo más dulce que pude y empecé a caminar.

A lo lejos divisé a Ashley con Hayden y corrí hacia ellas pasando mis brazos por sus hombros.

-Aloha nenas. -dije riendo

-¿Estás mejor? -preguntó Ahsley preocupada.

-¿Debería estar mal? -le sonreí

-Esa Valeria de caca -susurró Hayden haciéndome reir.

Las dejé en sus respectivas clases para luego caminar a la mía, tenía clase con Charlie, pero estaría aun resacosa por lo que no apareció.

A la hora del recreo iba caminando por el pasillo, un poco desierto, cuando una mano me coge del brazo y me mete en el baño de los chicos.

-Alex, ¿qué haces? Me has asustado. -susurré

-Necesitaba verte. -susurró para luego besarme

Estuvimos un rato mas besándonos hasta que me separé y le miré.

-¿Qué pasa? -me miró también.

-¿Cuándo dejarás a Valeria? -pregunté yo cosa a la que él bufó.

-Es complicado Brooks, ya lo hemos hablado muchas veces. -dijo pasándose las manos por el pelo.

-Estoy harta de que nos tengamos que ver a escondidas, porque no te da la gana de dejar a Valeria. -esta vez, bufé yo.

-¿Crees que a mi me gusta que tengamos que vernos a escondidas? Pues no, no me gusta. -dijo apoyándose en la pared.

-¡Pues déjala! -exclamé ya molesta.

-¡Es complicado! -volvió a pasarse las manos por el pelo.

-No, no es complicado, solo que te conviene salir con ella, te conviene porque ella es de los super mega guays de los popus y así tú eres popu también, pero si sales conmigo te tocará ser de los marginados. -dije mirándole y él se quedó callado.- Quien calla otroga. -dije mientras salía del baño.

Llegué a la cafetería y me senté al lado de Hayden.

-¿Qué te ha pasado? -la miré con los ojos abiertos.

-Cómo sabes que me pasa algo si no he hablado. -dije riendo.

-Tu cara. -rió ella también.

-Tu hermano... -suspiré sacando mi sandwich.

-¿Qué ha hecho ahora ese cara culo? -dijo mirándome.

-No quiere dejar a Valeria, dice que es complicado. -suspiré de nuevo.

-Este tío es imbecil. -dijo rodando los ojos.

Seguimos hablando de temas sin sentido hasta que volvió a sonar la sirena que indicaba el fin del recreo, iba por los pasillos cuando vi una escena un poco desagradable, Valeria y Alex, pasé a su lado con la cabeza alta hasta que Valeria me llamó.

-Oye tía, siento lo del otro día. -dijo falsamente.

-No pasa nada. -pasé a su lado chocando su hombro con el mío y caminé a mi taquilla.

De camino a casa llamé a Charlie, me dijo que no se encontraba bien asi que pase por su casa.

Estuve en su casa toda la tarde y al volver para mi casa, me encontré algo en el parque que me dejo atónita.