CAPITULO 19

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ALYSSA

Todo sucedía demasiado rápido, llegue al estacionamiento de la bodega a las afueras de la ciudad, estaba asustada muy asustada, en realidad, mi estómago era un solo nudo incapaz de contenerse quería vomitar, gritar pero quería acabar con toda esta mierda, mi vida estaba reducida a lo que sucedería en unos minutos, que parecían tratarse un infierno, mi propio infierno.

Unos pasos me alertaron, erguí mi espalda para parecer más segura, si sobreviví al infierno nosotros también saldríamos de esta. Estaba impaciente frenética el nudo en mi garganta me recordaba a cada instante que mi Evan estaba ahí y no sé en qué condiciones se encontrase.

-¡Hey!, por aquí hay alguien que quiere verla, con todo mi cuerpo comprimido y muerta de miedo me dirigí a dentro pero no podía derrumbarme, no ahora.

Caminaba despacio atenta a todo mi entorno buscando cualquier indicio de Evan, cada paso que daba era una tortura, por mi mente pasaban miles de imágenes una más trágicas que las otras solo pensar que sucediera lo peor hacia que mi estómago diera un vuelco es una locura todo esto.

Nos detenemos en frete a una puerta desgastada y maltrecha en frente de ella están dos hombres altos e intimidantes, cada uno con un arma en un costado, detrás de la puerta se escuchan gritos, un asqueroso monologo de una voz muy conocida para mí, ese era el maldito que nos hizo esto, él es el que quiere mi programa.

Entra el hombre que me trajo hasta aquí, tengo el alma en vilo, siento la presión del arma que cargo en la cintura de mis vaqueros, el metal se ha entibiecido con mi calor corporal, espero lo que parecen horas pero solo han pasado unos estúpidos minutos, hasta que el imbécil sale y me lleva adentro a trompicones, lo que ven mis ojos no lo puedo creer mi corazón se resquebraja al ver el estado en que se encuentra Evan, sucio atado magullado y visiblemente más delgado, su hermoso rostro lleno de moretones y unas inmensas ojeras no dejan duda de las cosas horribles que ha vivido en este lugar me apresuro a llegar a él pero el muy maldito de la voz esta en medio de los dos.

Me toman del brazo y me tumban con brusquedad al suelo, observo a mí alrededor y todo el lugar es sucio y maloliente, el piso esta pegajoso, lleno de moho el olor lastima mis fosas nasales. Estoy de rodillas mis manos contra el suelo, levanto la vista, no puedo evitar que una mano traicionera resbale por mis mejillas... Él está ahí, a unos pocos pasos de mí, me levanto temblorosa acercándome a él despacio, toco su rostro aguantado la respiración, acaricio su mejilla y llevo mi mano a su pecho uno de sus ojos esta tan golpeado, que dudo que me pueda ver a plenitud, siento su corazón latir a prisa, quiero encerrarlo en mis brazos y no soltarlo nunca más, pero aún hay algo que hacer...

-¿Por qué viniste? ¿Qué haces aquí?- me cuestiona observándome detenidamente, evaluando si tengo algún tipo de daño.

-Tienes que irte vete de aquí preciosa, vete- me susurra suplicando, lo miro directo a sus hermosos ojos azules para asegurarle que todo está bien, me acerco a su oído y se lo digo, siento que me halan con fuerza hacia atrás, me sacudo con violencia y logro soltar mi brazo. Me giro para enfrentar al maldito causante de esto.

. -¿Así que tú eres el perro que desea mi programa?- espeto con voz gélida.

-Vaya, vaya la gatita tiene las uñas bien afiladas, estas en mi manos zorra, si yo quiero que saltes saltas, si quiero que le chupes la polla a todo mi personal lo haces, sencillo tu existencia y la de tu amor depende únicamente de mí, la vida es injusta- Me enderezo llena de furia levanto mi barbilla hacia el soltando todo mi veneno

-Tu no serás el primer hombre que intenta que me doblegue, nunca lo haré ante nadie y sabes no puede matarme, porque Si lo haces nunca podrás echarle mano al programa que tanto deseas- voz suena seca, gélida y cargada de ira.

-¿Quieres el programa lo quieres?- saco de la parte de atrás de mis vaqueros un lápiz USB- aquí esta, pero antes libera a Evan y no intentes hacerte el listo conmigo, que sin mí no funcionara- Scotland pone cara de póker no puede creer que las cosas se voltearon a mi favor.

Todo sucede en cuestión de segundos, Evan salte encima de uno de los hombres y comienza al golpearlo sin piedad, sin pensar, saco el arma apuntando a Scotland, sin dejar de mirarlo siento como Evan se acerca a mi espalda.

-No vas a dispararme no eres capaz- suelta mientras que su risa no hace más que causarme nauseas, antes de seguir escuchando, le disparo a una de su piernas y el malnacido no puede creerlo.

Otro hombre se acerca pero Evan le pide que tire el alma al suelo, la adrenalina que corre por mis venas me mantiene alerta.

Tomo sus manos y sin darnos cuenta estamos corriendo, las balas se escuchan, siento que no lo vamos a lograr, cuando veo la luz de la puerta, mi cuerpo no quiere funcionar más. Pero tengo que hacerlo afuera, varios vehículos se aparcan a toda velocidad, de unos de ellos bajas Sebastien, jamás he estado tan feliz de verlo, mi cuerpo se hace gelatina un grito de Sebastien me alerta Evan cae sobre mí, la sangre tibia brota de su abdomen para bañar mi ropa, le dispararon.

Todo se vuelve un completo caos, disparos van y vienen Sebastien y los paramédicos corren a auxiliarme, lo tomo en misa brazos para suplicarle que no me deje.

-Evan, por favor no me dejes amor, no lo hagas, sin ti que voy a hacer por favor quédate conmigo. De mis ojos salen mares incontenibles, no me responde, no reacciona. Ya no siento nada, todo el bullicio se vuelve algo tan lejano, solo observo cuando lo montan en la ambulancia y Sebastien me carga para subirme al carro...

Si el se muere no quiero seguir viviendo...

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QUIERO PEDIR UNA SUPER DISCULPA PERO ESTABA BLOQUEADA, TENIA SEMANAS CON EL CAPITULO ESCRITO PERO NO ME GUSTABA, LE FALTABA ALGO Y HOY POR FIN LO CONSEGUÍ. ESPERO LES GUSTE.

BESOTES HERMOSOS PARA USTEDES.

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