Capítulo 36

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-Deberíamos volver a la base.- comento Zayn.

-Supongo que si.- dije desanimada.- ¿crees que vuelva a ser una heroína después de eso?- pregunte dudosa.

-Yo creo que si, fue un accidente, tu eres la mejor persona que existe.- comento sonriendo.

-Gracias Zayn.- le sonreí también.- Me has apoyado tanto, aunque todo partió mal entre nosotros ahora todo mejora, gracias por ayudarme.- le agradecí profundamente, ahora por fin, después de tanto tiempo, entendía al señor oscuro.

-No debes agradecérmelo.- seguía sonriendo, su sonrisa era hermosa.

-Oye... ¿Cómo fue que llegamos aquí?- pregunte al darme cuenta de lo alto y lejos que estábamos del lugar de donde Zayn me saco.

-Pues, bueno, verás... Yo...- se rasco la nuca algo nervioso-. He aprendido una nueva técnica.

-¿Nueva técnica?- pregunte intrigada.

-Pues... Yo... Aprendí a transportar materia de un lugar a otro.- se encogió de hombros quitándole la importancia.

-¿Qué? ¿¡Teletrasportar!?- dije asombrada.

-Algo así, pero es más mental que físico, digo es una manifestación física de un proceso mental, me ha tomado años lograrlo y pues lo conseguí pero no lo comentes ¿quieres?- me pidió algo precavido.

-De acuerdo pero ¿Por qué?- pregunte curiosa.

-Simplemente no quiero que se sepa.- se encogió de hombros otra vez.

-Esta bien, pero yo creo que es genial.- sonreí.

-De acuerdo vamos a casa.- me extendió su mano y la tomé. Se sentía bien el roce de nuestras manos.- sujétate fuerte de mi y cierra los ojos, apareceremos en mi cuarto.- comento.

Asentí y dudosa me acerque a él, él parecía expectante ante mis movimientos logrando ponerme más nerviosa, me acerque lo suficiente como para rodear mis brazos por sobre sus hombros y juntar mis manos detrás, por su espalda.

Él coloco su mano en mi cintura y la deslizo hasta mi espalda. Con gran habilidad me pego a él y me vi a escasos centímetros de su rostro.

Aparté mi rostro del suyo y escondí mi cara en su pecho. Así cerré mis ojos y deje que me envolviera en sus brazos.

-¿Lista?- pregunto cerca de mi oído.

-Lista.- cerré mis ojos con fuerza apretando mis párpados

-Aquí vamos.- comento otra vez en mi oído y me sentí erizar con su cálida voz.

El mundo a mi alrededor parecía más ligero, el aire se hacía escaso pero innecesario, al segundo después sentí la gravedad volver y el airé entrar otra vez.

-Llegamos.- le oí decir, pero no podía separarme de él, me sentía mareada.

-Me siento mareada.- le comunique mientras arrugaba su ropa entre mis manos.

-Tranquila, es normal.- hablo suavemente-. De apocó te irás incorporando.

Me separe de él, la sensación de mareo se iba y ya estaba en mis 5 sentidos.

-¿Cuanto tiempo ha pasado?- pregunte al notar el silencio en el lugar.

-Pues... Lo vi voltear en dirección a su velador donde noté un reloj y luego volvió a voltear a verme-. Según ese reloj, parece que pasaron 4 horas.- se encogió de hombros.

-¿4 horas desde que salimos de aquí?- pregunte sorprendida, el asintió-. Parecieron muchas más, además ¿Por qué tanto silencio?- un extraño silencio tenía inmutado el lugar.

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