El Crush de México. - Hetalia

Capítulo 3: Fantasmas.

Me encontraba ya en la habitación esperando a que Alfred se saliera del baño, al igual que Matthew, por que los metí a la fuera a bañarse los dos juntos.

Si son hermanos báñense juntos y se desperdicia menos agua y tiempo.

— ¿Ya?
— ¡Pero si nos acabamos de meter! — gritó Alfred desde el otro lado de la puerta.
— Esperen, ¿Pa' que los metía juntos si yo me baño en la mañana? Bueno, pues ya que.
— ¿¡Qué!?
— ¿Qué de que? ¿Están enojados? — dije para después ver como salían los dos que venían a reclamarme. — Se salieron dios los trajo al mundo. — dije para después hecharme un taco de ojo.

Voltearon abajo de ellos y se volvieron a meter al baño todos rojos.

— Está bien morros. Aprendan algo. — dije mas no recibí respuesta alguna. Yo me mostré tranquilo ante la situación, más estaba como un tomate.

Más tarde salieron ya cambiados y un poco avergonzados, así que por ello no le dirigieron la palabra. Al darse cuenta, solo había dos camas.
— Y... ¿Cómo nos acomodaremos? — dijo volteando a otro lado Alfred. Baia Baia. Tal vez, sólo tal vez...
— Son dos camas, una matrimonial y una individual. — dije sin interés, pero realmente me importaba.  — Supongo que dos tendremos que dormir juntos. — vi como sus caras se iluminaron un poco.

Tal vez, si le guste a Alfred.

Por que, no soy un idiota. Sé que le gusto y puedo tener una oportunidad, pero, el tiene que decirme que le gusto.

Ya sé.

— ¡Ya sé! Yo en la individual y ustedes en la matrimonial, sigo diciendo que  son hermanos.  — mire como se desilusionaban. — Bueno, me iré a cambiar.  — tome mis cosas y me fui al baño, realmente tenía ganas de tomara un baño pero nel, que flojera, me cambie y salí dejándolos un poco sorprendidos por lo que usaría para dormir.
— ¿Usarás... eso?
— Si, ¿Hay algún problema? — pregunte "muy enojado."
— Okay...

¿Quieren saber que traía puesto?

Una tanga. N-no, ni se crean. Estaba en un short que es muy normal en México, más estaba un poco corto, namás para putear, y una camisa blanca con algunos hoyos, al cabo me iba a ir a dormir.

Ni se por que se alteran, ya me iba a dormir no iba a dormir.

Me acosté muy cómodo deshaciendo toda la cama y enrollándome en aquellas sábanas tan frías mientras soltaba un gran "Ah~"

Eso sonó raro.

Decidí callarme e intentar dormirme.

. . .

Creo que si no me duermo después de unos 40 minutos, es por que simplemente no tengo sueño.

Voltee hacia mi derecha viendo a los gemelos completamente dormidos. Ya quisiera yo dormir así.

Ah~. Tengo demasiado sueño más no logro dormir. Iré afuera, tal vez a la cocina, no debe de haber nadie.

— Jeje... — iba entre risas saliendo de mi cama hacia la puerta cuando de repente se escuchó decir a alguien.
— ¡No! Esa es mi hamburgerrrr...
— Pfft. Que tierno es... — cubrí un poco mi boca para que no se oyera.

Salí de la habitación y vi las demás puertas, saqué mi celular para checar la hora.

2:45

— Ya casi va a ser la hora del diablo. — susurré con miedo. — Amén, por si acaso.

— Ah!~ Ah!~ Dale~ Dale~ — paré en seco al escuche eso, acaso sería... ¿Lo que pienso que es? — Doitsu~

" Italia."