Deanwood

Capítulo 9.

(Fergie)

Inquieta se pasó la mano por el cabello. Llevaba unas horas siguiendo a un hombre que olía a perro mojado y tenía una actitud muy sospechosa.

Le había pasado un mensaje a Chloe para encontrarse en el instituto, lugar donde estaba el hombre que estaba siguiendo. Estaba segura que esa noche descubrirían algo.

Se fijo en la hora de su móvil, dándose cuenta que ya casi una hora que le dijo a Chloe que se dirigiera al instituto.

Soltó un largo suspiro y decidió adentrarse ella sola, cuando Chloe llegase se daría cuenta. En silencio caminó por los oscuros pasillos del instituto, abriendo cada puerta por la que pasaba.

Pasaba por la puerta de la clase de historia cuando sintió que alguien se acercaba. Se deslizo con rapidez hacia una de las esquinas y espero que, aquel o aquella que se acercaba, apareciera para atacarlo. Aguantó la respiración al ya escuchar los pasos cercas.

Estiró la mano, agarrando el brazo de aquella persona y empotrandola con su toda su fuerza contra la pared. Cubrió la boca de la persona con su mano y acerco su cara, y fue cuando le llegó de golpe el aroma de Chloe.

— Tienes que ser mas silenciosa —le susurró quitando la mano que cubría la boca de Chloe, sintiendo como ella suspiraba de alivio.

— Y tu tienes que dejar de ser tan agresiva —Chloe llevo su mano a su nuca, donde se sobo—. Ahora dime para qué estamos aquí.

— Hombres lobos.

— ¿Y que vinieron hacer para acá? —Chloe con la simple mención de esas dos palabras, se puso en alerta y sacó un arma de su espalda.

— Quizás a clases —ironizó la rubia mientras empezaba a caminar a la puerta del sótano—. Escucha, voy a bajar a ver, tu ve esté piso..... ¿Traiste a Will? —preguntó al sentir el olor del castaño, sintiendo su nerviosismo.

— No quiso irse a casa —rodó los ojos Chloe—, puedes estar tranquila, le dejé un arma.

— ¿Y la sabe usar? —la pregunta de Fergie dejo a Chloe algo nerviosa, sabía que Will no tenía la más mínima idea de como usar una pistola, pero se había encargado de enseñarle lo básico, además dudaba mucho que la usará.

Unos pasos hacen que ambas chicas dejen de hablar, se escuchaban lejos, pero la rubia sabía que se dirigía hacia donde ellas se encontraban.

— Baja, yo me encargo —susurró Chloe dándole un pequeño empujón a Fergie.

La rubia, sabiendo que Chloe sabe defenderse, le asintió y le susurró un "grita si me necesitas" para luego empezar a bajar las escaleras que dirigían al sótano.

Todo estaba a oscuras y tuvo que activar todos sus sentidos para saber que tiene cerca.

El sótano estaba en silencio y al final del pasillo se podían oír murmullos. Afino su oído para poder saber que hablaban.

— Tenemos que atacar antes de que ellos lo hagan, y es una buena idea hacerlo en la luna llena —Fergie se apoyó en la pared, escondida.

— Tenemos que mantenernos escondidos —esa voz sonó más como un gruñido—. No podemos estar exponiéndonos, sin saber quien puede estar allá afuera... Espiándonos.

Un grito en la parte superior hace que tanto Fergie como los hombres lobos miraran al techo.

Solo una cosa pasó por la mente de Fergie: Chloe.

(Chloe)

Sacó la daga se su bota y escondió en una esquina, para esperar que apareciera el hombre lobo. Cuando lo hizo, lanzó una puñalada a la altura de su pecho.