Han pasado 3 meses desde que empecé este año escolar. 3 meses en donde he vivido momentos geniales con Nat, Ale, Erandy y, por supuesto, mi novio.
A Joseph no lo podría describir como el novio perfecto, pero vaya que se acercaba a serlo.
A pesar de que no le había gustado el Kpop o lo dramas, le gustaba que le contara todo acerca de eso.-Es que en serio, te juro que apenas vi el primer capítulo de Descendientes del Sol, Wow! Me enamoré del protagonista y....-me detuve, al ver que él no hacía ademán de estar escuchando. Solo estaba... mirándome - deja de verme así, Joseph. Me pones nerviosa - y sin más, desvíe la mirada
- Mírame a los ojos - susurró
- ¿Para qué?- seguía evitando su mirada
-Me gusta ver ese brillo que aparece en tus ojos cuando hablas de algo que te gusta
No pude evitar reír. Joseph siempre era así. Decía cosas tan cursis cuando menos me lo esperaba.
- Odio que seas así
-¿Así cómo? -podía sentir su mirada aún en mí
-Tan cursi y espontáneo
Hubo silencio. Y aunque sabía que él seguía atrás de mi, no pude evitar voltear para cerciorarme que así era. Y cuando lo hice....
Me besó
Fue un beso casto y gentil en los labios. Y aunque no era nuestro primer beso, seguía sin acostumbrarme. Hace apenas 1 mes que nos el primer beso. Si lo sé, cualquiera se hubiera dado su primer beso a la semana, o a los días de andar. Pero pues, siento que él sabía que aún estaba nerviosa en todo lo relacionado a "tener novio" y decidió no presionarme.
Cuando Joseph se apartó, no pude evitar sonreír. Estaba sonrojado nivel extremo. Dios! Adoraba a este chico
Al ver que estaba sonriendo, me devolvió una sonrisa y me abrazó. Y así nos quedamos un buen rato, hasta que recordé que tenía clase de química.
-Mmm Joseph- susurré contra su pecho
-Mmmm -se limitó a decir
-Tengo clase. Es química. No puedo llegar tarde. Ya basta.
-¿Qué? Ah, cierto. Igual tengo clase. Te veo al rato
Me volvió a besar. Pero ahora fue un beso rápido. Y enseguida se fue corriendo hacia su clase. No pude evitar reír
Eres un maldito cursi, Joseph
Me fui directo al edificio L. Siempre me tocaba clase ahí, solo que cambiaba de salón depende el día. Hoy era miércoles, y tocaba en laboratorio, los demás días era en salones cualquiera.
Seguía pensando en lo que acababa de pasar con Joseph mientras subía las escaleras, ya casi llegaba al final de ellas, cuando de repente no pisé bien un escalón y caí de espaldas
- Ay - me dije, al haber recibido tremendo golpe. Y me di cuenta que no había caído sobre el piso, sino sobre alguien
Me fui levantando poco a poco hasta que pude ver el rostro de la persona a quien aplasté. Aunque no habíamos hablado desde el pequeño incidente con Melissa, lo seguía viendo de vez en cuando en clases que teníamos en común, o en todo el campus, pero verlo así, con los ojos cerrados, su boca un poco abierta, esos labios, totalmente vulnerable...
-¿Te importaría? Me estás clavando tu codo en mi abdomen. - susurró
-¿Qué? Ah, perdón- me levanté rápido, pero al hacerlo me marié y caí de sentón.
-¿Te encuentras bien, Scarlet?- Daniel se comenzaba a levantar
Solo vi cómo se ponía de pie mientras se sobaba la cabeza. Diablos, me sentía culpable.
-Si, o al menos eso creo. Lo siento, ya sabes, por caerte encima
-No te preocupes. No fue nada. - dicho esto, me ofreció una mano.
La tome, y con mucha facilidad me levantó del suelo.
Ahora que estábamos bastante cerca, él seguía viéndome como si esperara que en cualquier momento me caería, o me quejaría de algún dolor. Su mirada era bastante penetrante y, aunque se veía preocupado, tenía una pequeña sonrisa en la cara.
-¿Seguro que estás bien?- susurré, evitando su mirada
-¿Segura que tú estás bien? -susurró , evitando mi pregunta.
-Si, estoy bien- mentí, me dolía la cabeza, la espalda, todo mi cuerpo, pero él me preocupaba más.
-Veme a los ojos y dime que estás bien
-Daniel, ya te dije....
Tomó mi barbilla y me hizo verlo a los ojos, los cuales estaban llenos de preocupación, y no dude en dejar que el dolor me embargará
Comencé a llorar, en verdad me dolía todo el cuerpo. Sentía la mirada de Daniel, y eso me hizo sentir vergüenza de mi misma.-Vamos- escuche que me decía.
-No puedo. Me duele hasta mantenerme en pie.
-¿Quién dijo que te haría caminar?- dijo. Vi una pequeña sonrisa en su cara. Y de pronto me cargó, como la primera vez que nos conocimos.
-Daniel, si me duele estar de pie, tú debes estar peor. Te caí encima y fuiste a dar directo al suelo, en verdad no tienes que....
-Me ofendes al creer que soy tan débil como para no soportar algo así, Scarlet. - dijo, riendo, pero aun así lo notaba cansado.
No quise objetar más, o bueno, no podía, siquiera al hacer eso me dolía el cuerpo.
A pesar de que sabía que Daniel estaba fingiendo que no le dolía, y el hecho de que caminaba raro, llegamos rápido a la enfermería
Gracias a Dios que la puerta estaba abierta, así ninguno tuvo que hacer esfuerzo alguno al intentar abrirla.
-Doctora - Daniel gritó, una vez estábamos adentro.
La doctora llegó rápido a donde estábamos, y no pude evitar ver su rostro de preocupación.
-¿Ahora qué pasó, muchachos? ¿De nuevo te lastimaste el tobillo, pequeña?
-No, doctora. Se cayó de las escaleras.
-Oh dios. Pronto, Daniel. Ponla sobre la camilla.
Daniel se dirigió a la camilla más próxima, me puso sobre ella muy despacio y aún así gemí de dolor
-¿Te hice daño? -me dijo, pánico en su voz
-¿En serio me estás preguntando si me hiciste daño cuando la que te cayó encima fui yo? - le dije, en tono sarcástico
-Bueno, puedo ver que tú sentido del humor y sarcasmo están intactos
-¿Cómo es eso de que te cayó encima, Daniel? ¿Te encuentras bien?
-Se preocupan... demasiado... Por supuesto... que estoy....
-Oh por Dios. ¡Daniel! - gritamos al unísono
No puedo terminar la frase. ¿La razón?
Daniel se desmayó
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Imperfección
Teen FictionScarlet, una chica de 18 años tiene una vida que ni se acerca a ser perfecta. Tendrá que enfrentar el estar en una escuela que cumple solamente las perspectivas de sus padres, aguantar personas desagradables, pasar momentos inoportunos, conocer a u...