Capitulo 3

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Kiera

Estaba muy cansada así que decidí dormir un poco.

Antes de dormir pensé un poco en todo lo que me había pasado, tal vez el universo está conspirando contra mí,
tal vez es el destino, un cruel destino.

                              ***

— Kiera, despierta — sentí que me sacudían.


Me desperté exaltada, abrí los ojos para ver que me estaba sacudiendo de esa manera tan desesperada.

Al abrir los ojos, me encuentro con el rostro de Tyler a centímetros del mío por lo cual me asusto dando un leve respingo.

— Que susto me diste — digo sentando en la cama mientras restregaba mis ojos para ver mejor su rostro.

— Lo lamento es que no querías despertar, así que te moví un poco fuerte —responde arrepentido.

— No importa — digo restándole importancia.

— Dúchate y arréglate que vamos al centro comercial a comprar las cosas para que vayas al instituto — dice caminando hacia la puerta.

— ¡Espera! — lo detengo antes que atraviese la puerta.

— ¿Si? — dice girándose nuevamente.

— ¿Qué hora es? — pregunto.

— Es la 11:00 pm — dice tranquilo, como si nada.

— ¡¿Qué?! — Dije levantándome rápidamente — ¿porque no me despertaste antes?

— Supuse que estabas cansada, así que te dejamos dormir un poco más — dice calmado.

— ¡oh!, bueno en ese caso gracias. — le regalo una sonrisa agradecida

— De nada, ahora te dejo para que te arregles — dice saliendo de mi habitación

Busco en la maleta que usar ya que ayer me quede dormida y ni siquiera baje a cenar.

Entro al baño, hago mis necesidades y me meto a la ducha. Demoro diez minutos bañándome, salgo de la ducha me pongo la ropa, tomo mi celular y salgo del cuarto para dirigirme al comedor.

Una vez entro a la sala de comedor, encuentro a todos sentados en la mesa almorzando tranquilamente sin notar mi presencia.

Camino hasta ellos sentándome en una silla junto a Michael el cual solo me mira por unos segundos antes de volver a mirar su comida nuevamente.

— Buenas tardes — digo educadamente.

— Hola — dicen todos menos Michael que sigue concentrado en su plato sin mirar a nadie.

— ¿qué tal dormiste? — pregunta Tyler tratando de crear tema de conversación.

— Bien — respondo con voz fría

— Kiera, en dos días empiezas el instituto así que vas a ir con Michael y con Max a comprar los útiles — me informa Jane mirándome fijamente a los ojos.

— ¿Es con uniforme? — pregunto interesada.

— No, no es con uniforme — esas palabras me tranquilizaron, sinceramente yo odio los uniforme

Asiento antes de empezar a comer. La verdad es que no tengo esa confianza con ellos todavía por lo que me siento incomoda cada vez que me hablan en especial Jane y Taylor, todavía sentía un poco de rencor hacia ellos por todo eso del abandono, pero sinceramente no quiero hablar de ello por eso decidí no hacer preguntas sobre el porque me dejaron solo a mí y no a alguno de mis hermanos.

Me mantuve callada todo el tiempo, en la mesa solo se escuchan el sonido de los cubiertos chocando con los platos.

— Ya termine — dice Michael levantándose de la mesa — voy a estar en mi habitación, me avisan cuando ya sea hora de irnos — dice por último antes de retirase de la sala

Unos minutos más tarde ya todos habían terminado de comer, subí a mi habitación un momento a cepillar mis dientes.

Cuando termine baje a avisar a Max que ya estaba lista pero como esta casa es muy grande no podía encontrarle.

Después de unos minutos buscándolo por fin lo encontré.

— Ya estoy lista — dije cuando estuve frente a él.

— Espera aquí, voy a avisarle a Michael — dice para después desaparecer enseguida.

Minutos después aparecen Max y a su lado un Michael con cara de pocos amigo. A veces pienso no le agrado a Michael, tal vez por eso prefiere ignorarme antes de siquiera dirigirme la palabra.

Nos subimos al carro y arrancamos.
Durante todo el camino estuvimos en un silencio incómodo solo se escuchaba la canción que pasaban por la radio en ese momento.

Llegamos al centro comercial, buscamos donde aparcar hasta que por fin encontramos un lugar.

Me baje rápidamente del auto, no aguantaba ni un minuto más dentro de este. Cuando mis hermanos se posaron a mi lado empezamos a caminar a la entrada.

Entramos fuimos directamente a la papelería a comprar los útiles allí no demoramos nada, después fuimos a comprar los bolsos.

— Buenas tardes, soy Logan, ¿puedo ayudarlos en algo? — dice el chico dándome una sonrisa algo coqueta.

Tenía que admitir que era guapo, cabello rubio, gran cuerpo y unos expresivos ojos azules.

¡Joder, parecía un muñeco!

— Si, que dejes de mirar a mi hermana con esa estúpida sonrisita — dice Max fulminándolo con la mirada

— Discúlpeme  — dice el chico rojo de la vergüenza.

<< ¡Qué ternura! >> pienso mirando esa carita.

— No te preocupes — digo dándole una sonrisa.

— Queremos ver los bolsos escolares – habla por primera vez Michael.

— claro, síganme — dice el chico más tranquilo.

Logan nos muestra  varios modelos, la verdad a mí no me importa así que eligí el primero que vi al igual que Michael, aunque Max se demoró una eternidad viendo distintos modelos para al final quedarse con el primero que vio.

Pagamos los bolsos en la caja registradora y nos fuimos del establecimiento, pero no sin yo antes darle una sonrisa de despedida al chico guapo que nos atendió.

Llegamos al auto y nos montamos en el y arrancamos y Max empezó a conducir de vuelta a casa.

Cuando llegamos tomo mis cosas me bajó de el auto y camino a la puerta de la casa, abro con la llave que me dio Taylor y voy directo a mi habitación a descansar un poco ya que estoy cansada.

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Aquí les dejo un capítulo nuevo espero que les guste.
Gracias, besos a todos 😘

Dulce Destrucción©  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora