Swingers.

Capitulo 17.

Pov Gisele.

Solía pensar que esto de fingir tener un novio era totalmente absurdo, quizá no del todo. Pero como saberlo ¿si nunca lo había intentado? Entré a mi habitación enfurecida por Ian y por Richie. 

Estaba apunto de perder la cabeza por ese par, aparte ¿cómo Ian estaba bien con que Richie fingiera ser mi novio?, ¿acaso ya no lo amaba? 

-¡Abre esa puerta!-Oí. 

-¡Esta abierta!-Grite. 

Oí cuando se movió la perilla, Ian asomo la cabeza.

-¡Oh, cierto!-Dijo apenado. A veces pensaba que era muy distraído. 

-¿Y Richie?-Pregunté, no fue necesario una respuesta, entró después de Ian.

Les gustaba estar en mi habitación creándome problemas, pensé. 

-Vine aquí para aclarar bien las cosas, para hacerlos razonar. 

Fruncí el ceño mientras buscaba un cigarrillo en uno de los cajones de la cómoda. 

-¿Quieres?-Me dirigí a Richie. 

Asintió y le extendí uno, no fue necesario darle mi encendedor, él busco entre sus pantalones y sacó uno. 

-¿Qué tienes que aclarar?-Preguntó Richie mientras colocaba el cigarrillo en sus labios y lo encendía. 

-Están actuando de una forma muy inmadura, ¡no te cae bien Gisele pero si le aceptas un cigarrillo!

Me acomodé mejor en mi cama, Ian estaba sentado en la silla del escritorio y le hice una seña a Richie para que tomará asiento en la cama. Asintió al instante y se acomodó en una de las esquinas.

 -¿Qué tan malo podría ser?-Preguntó Richie sonriendo. 

Era una de las primeras veces que lo veía sonreír, creí que no tenía emociones, es algo tonto. 

-Sólo necesito este favor Richie, ya te dije hazlo por mi, no por ella-Asintió Richie. 

El cuarto comenzaba a llenarse del humo, me causaba un gran placer. Pitada tras pitada al cigarrillo y comenzaba mi cabeza a dar vueltas.

-Será un poco difícil por que tendríamos que hacerles creer a todos que somos...-Di una pausa-Ya sabes, eso. 

-Novios-Continuó Ian.

-¿Qué es lo difícil?-Preguntó ansioso Richie.

-La presentación con mis padres, las cenas, las salidas familiares, eso-Respondí cabizbaja.  

En realidad si sería algo totalmente difícil, más no imposible.

-Hay que hacerlo-Soltó Richie seguro.

Ian fue el primero en reaccionar, su rostro tomo un color rojo, parecía un tomate. 

-¡¿En serio?!-Dudó.

-¿Por qué no?-Sentí un alivio. 

La tarde pasó lenta, después de que Richie había aceptado bajamos a la cocina por bebidas y por una libreta que sería en donde estaría trazado todo el plan. Nos sentamos en el comedor e Ian preparó snacks, lo acompañamos con un té helado que estaba realmente delicioso. 

-Bien, el plan es este-Solté.

Ambos me miraron, la libreta se llenaba poco a poco. 

-¿Me presentaré con mi nombre?-Preguntó Richie. 

-Claro, Richie Blake.

Sonreí, me sentía como una espía encubierta haciendo este tipo de cosas.

-Actuarás como eres, no tan arrogante y sé un poco menos grosero. 

-Lo intentaré.

Ian sonreía plácidamente. Así pasamos el poco tiempo que quedaba del día, trazando planes que quizá nadie más había hecho antes, lo único que nos hacía más fácil las cosas era que Richie y yo éramos un poco iguales, tanto en la forma de ser y de vestir. Esto no podía fallar.