Play with me. ¡! billdip. +18.

Capítulo 3.

“—queen bitches.”

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—La roja o la negra.—preguntó Mabel y le mostró dos faldas.

—La negra.—dijo Dipper mientras mensajeaba sin mirar la castaña.

—Ni si quiera me estas mirando.—gruñó ésta.

—¿Uh?—volteó a verla—. La negra está linda.—volvió a mirar su teléfono.

—Bien, y... ¿a quien le mensajeas?—preguntó pícara.

—A un chico.—respondió con una sonrisa de satisfacción.

—¡Uhhh! ¿Es lindo?.

—Duh— giró los ojos y le mostró una foto de un chico pelinegro con un extraño peinado, alto y muy lindo—. Su nombre es Norman y se acaba de mudar.

—¡oh por dios!—exclamó—,  ¿Cuantas veces han follado?

—¡Mabel, por dios! ¿Acaso tengo cara de puta?—dijo y después hizo un tierno puchero.

—Dipper, por favor...—levantó una ceja y sonrió—, te conozco a ti y a tus “jueguitos”—hizo comillas con los dedos.

—Mierda...—se quejó—. Solo una vez, recuerda mis reglas.

—Ugh, cierto, la regla de “yo no repito”... aunque ¿me estás diciendo que se acaba de mudar?—preguntó incrédula.

—Ujum.—devolvió su mirada al teléfono.

—Definitivamente eres increíble, hermanito—suspiró—. ¿Ya estas listo para la fiesta de está noche?

—Obviamente— rió—, más que listo, ¿y tu?

—Sipi, todo listo, aunque, ya sabes qué... ¡pido el baño primero!—exclamó y salió corriendo.

—¡¿Qué?! ¡no!—chilló soltando su teléfono.

Mabel corrió rápidamente al baño y le cerró la puerta en la cara.— ¡Tonto!— le grito.

—¡Mabel!

[…]

—¡Chicos, me alegra que hayan podido venir!—les gritó la rubia debido a la música alta—. Pasen, están en su casa.

—Gracias por invitarnos, Pacifica.—le dijo la castaña. Estaba vestida con un suéter fucsia con brillos, una falda negra y tacones de mismo color.

—Esta fiesta se ve genial, Paz.—le siguió Dipper. Llevaba un suéter estampado, su corona de flores, falda y zapatillas.

La música alta, las bebidas alcohólicas, gente casi follando en los pasillos, comida a montones. Las típicas fiestas de Pacifica Northwest cuándo sus padres no están en casa.

Ella es una niña rica y la mejor amiga de Mabel. Además, hace las mejores fiestas.

—¡Mabel, Dipper!—los llamó la rubia.

—¿Que pasa Paz?—preguntó Mabel con una bebida en su mano.

—Ja, logré quitarle su número.—murmuró Dipper.

—¿Que dijiste?—le preguntó la rubia.

—Oh, nada, ¿porque nos llamabas?

—¡Cierto! esperen—les dijo y se giró en busca de algo... o alguien—. ¡Bill!—chilló cuando encontró al rubio—, ven acá y deja de ligar, tonto—le llamó—. Chicos, les presentó a mi primo.—dijo mientras lo  señalaba.

—Mucho gusto, soy Bill.— se presentó. Alto, rubio, profundos ojos ámbar y totalmente perfecto. Oh sí.

—Yo soy Mabel, un gusto—se presentó y le sonrió—. Mierda, es hermoso.—pensó, pero fue interrumpida por la voz pícara de su hermano al presentarse.

—Yo soy Dipper, pero puedes llamarme futuro esposo, baby.— le sonrió divertido.

Bill se sorprendió y sonrojó notoriamente.—¿¡Qué!?

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N/A: No se que demonios estoy haciendo con mi vida, pero bueh. Espero que les guste, bye. Brillitos para todos.