Capítulo 7. Tranquila preciosa, yo estoy aquí.

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Hoy volveré al S.A.M y aun Diane y yo estamos distanciadas, Frank me contó que ella y Aaron estuvieron saliendo y los vio abrazados. Por primera vez en este año no quiero ir al S.A.M, al contrario quiero quedarme aquí en mi casa, acostada en mi cama durante todo el día y el resto de la semana. La puerta de mi habitación se abre y deja pasar a Nick.

- Toc, toc, permiso. Dice Nick golpeando suavemente la puerta con sus nudillos.

- Pasa Nick. Digo sin ganas.

- Yas, debes levantarte, vamos o llegaremos tarde.

- Nick no estoy de humor, dile a mamá que no iré.

- Vas a ir Yasmín, debes levantarte.

Suelto un bufido. - ¿Porqué dios me habrá dado un hermano con tanta paciencia y que además es tan convincente? ¿Porqué dios porqué?

- Entonces eso es un si.

- Si Nick, pero que conste que si me siento mal vuelvo a casa.

- Eso ya lo veremos. Dijo Nick saliendo de mi habitación. Me levanto rápidamente porque de lo contrario perderemos el ómnibus y no llegaremos a tiempo para la primer clase.

Hoy me pondré un jean negro con un buzo rosado y unas botas negras.

Salgo rápido y me tomo un café casi de un sorbo.

- Adiós ma, adiós pa. Digo mientras salgo corriendo con la maleta y mi mochila en el hombro tratando de alcanzar a Nick.

- Nick, espérame.

- No hay tiempo Yasmín, no hay tiempo. Llego a la parada del bus y me dejo caer sobre el frío hormigón del que está hecha la parada. Saco mi móvil del bolsillo y compruebo que son las 06:10 y nuestro ómnibus pasa 06:30.

- Te odio Nick, casi haces que rompa mi maleta.

- Lo siento hermana pero no mire la hora y creí que era más tarde.

- Pues ahora debo esperar 20 minutos. Genial.

- Irónica, alerta irónica.

- ¡Cállate Nick! Dije mientras le daba un zape en la cabeza.

- Auch. Dijo sobándose la zona afectada.

- Te lo mereces por tonto.

- Deja de quejarte, ya viene el ómnibus.

- Hasta que al fin. Exclamo mientras tomo mi maleta.

(...)

Llegar al S.A.M y lo primero para ver es nada más ni nada menos que a Diane y Aaron besándose. ¡Besándose en el medio del patio frente a la dirección!

- Diane Stwart, Aaron Belart, de inmediato a la dirección. La voz de la directora era muy firme y su pose amenazadora. No pude evitar hacer una sonrisa con mis labios y levantar mis cejas como diciendo -te advertí-

- Yasmín por favor cambia la cara ¿Acaso estás tan contenta? Pregunta Nick en mi oído haciendo que salga de mi trance.

- ¿Tanto se notaba mi cara de malicia?

- ¡Parecías una loca poseída por satanás!

- Bueno hermanito, creo que exageraste demasiado, ahora debo irme a mi primer clase y tu a ver a Kate, nos vemos en el almuerzo.

- Okay adiós, te cuidas bebé.

- ¡Nick!

- Lo siento, era una broma. Decía mi hermano mientras levantaba los brazos como para parecer inocente.

Amigas por y para siempre...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora