distance

Capitulo 2.-

Capitulo 2.-

No me quise girar, pero podía imaginarme la cara que se le habia quedado a todos cuando vieron mi super canasta.

Fui a los vestuarios, me di una ducha rápida y me cambie de ropa. Cuando fui a salir oi un llanto que provenía de uno de los baños. Me acerqué, deje la bolsa a un lado, me agache y mire bajo la rendija para ver quien estaba llorando tan desconsoladamente.

Y bueno, ahi estaba mi compañera de biología,

¿sorpresa o era de esperar?.

Era imposible que un chico como James durara un día con una chica como ella.

Me incorporé y toque en la puerta.

-Brooks, soy Abie, tu compañera de biología y de taquilla.  ¿Estás bien? -le pregunté.

Esta abrió la puerta haciendo que perdiese el equilibrio ya que estaba apoyada en ella, pero lo recompuse en menos de un segundo.

-¿Qu... que quieres?- me respondió esta con todo el maquillaje corrido y llena de papel higiénico.

-¿Estás bien?- pregunté educadamente. Habia visto estas escenas en las pelis, las chicas llorando, sentadas en el inodoro, sonandose etc, pero jamás lo había visto en la vida real, asi que me hizo gracia. Aun que lógicamente me reí para mis adentros.

-¿te parece que estoy bien?- me contestó groseramente mientras se sonaba.

-Solo quería ayudarte, no hace falta que la descargues conmigo- le respondí cogiendo la bolsa. -Que te mejores- acto seguido de decir esto, sali de los vestuarios.

Me apresuré para llegar al aula antes de que sonara la campana, ya que cuando toca los pasillos del instituto se vuelve en manadas de bueyes locos.

Entré y me senté en el pupitre esperando a que llegasen mis compañeros y el profesor.

Me gire para sacar los libros de la mochila y al fondo de la clase vi a un joven, con las fracciones de la cara perfectamente definidas. Este me miró y bajo la vista.

Que extraño, jamás lo había visto.

De un segundo a otro la clase se lleno de jovenes alborotadores que no paraban de lanzarse cosas y gritar.

-Buenos días, aun que con ustedes a primera empezamos mal el día- bromeó el profesor nada mas entrar por la puerta.

-Buenos días profe- le respondimos todos a la vez soltando una pequeña risita por su comentario.

La clase fue tranquila, los empollones prestaban atención en la primera fila, los "guaperas" de la clase  armaban escándalo en la última, y bueno, yo estaba en la 4 fila, al lado de la ventana contemplando el entrenamiento de los del equipo de rugby.

El profe me regaño varias veces por no prestar atención pero mi mirada se desviaba sola hacia la ventana.

Cuando finalizó la clase me quedé la última recogiendo las cosas. Cogi la mochila y la bolsa, que la habia dejado en el suelo, y cuando salí de la clase me percaté que el extraño chico salió tras de mi.

Tenía los ojos verdes y el pelo algo rizado y alborotado. ¿Seria nuevo? ¿Pero un nuevo justo el día que terminaban las clases? No lo dude ni un segundo y me acerqué. 

-Hola- le saludé amistosamente

-Hola- me respondió algo tímido bajando la mirada al suelo.

-¿Eres nuevo por aquí?-

-Mm.. no, bueno si, llevo una semana aqui de intercambio- respondió metiendose las manos en los bolsillos.

-¿Intercambio? ¿De donde eres?- pregunté extrañada, ¿Intercambio la última semana? Vaya, el sistema que usaban estaba un poco atrasado de tiempo...

-Sí, intercambio- hizo una pausa, saco las manos de sus bolsillos y se sacudió el pelo -Soy de inglaterra- OH INGLATERRA,  mi querido país mas odiado del mundo.

-Inglaterra eh... bonito lugar- dije dirigiéndo mi mirada a otro lado. Este comenzó a reir tímidamente entendiendo mi sarcasmo.  -Y bueno... ¿cuando regresas?- pregunté.

-pasado mañana, mi vuelo sale muy temprano- respondió el algo apenado. -La verdad es que amo Noruega- prosiguió.

-Tampoco es para tanto, pero no podrás decir que las chicas noruegas no somos guapas, eh- reí con intención de que este se soltara un poco, ya que era muy tímido,  a lo que este respondió sin problemas con una tímida risa.

Tras unos minutos mas de conversación nos despedimos y yo seguí por mi camino hacia la siguiente aula, matemáticas.

Cuando llegue me di cuenta que se me habia echo algo tarde ya que todos estaban sentados y la profesora en la pizarra explicando.

-¿Algo que decir señorita Dowsn?- preguntó seriamente la vieja que tenia como profesora de matemáticas.

-Lo siento-respondí con cara de niña buena.

-Siéntese y no quiero que esto vuelva a ocurrir, me da igual que hoy sea el último día de clase, es un dia mas como otros y punto. -respondío la amarga mujer y volvió a la pizarra a marcarnos ejercicios para que hiciésemos en verano.

-Los hará ella sola- comente en voz baja, pero mis compañeros me oyeron y empezaron a reir.

-¡Dowsn!, ¡al despacho del director!- dijo señalándome la puerta

-¡Pero si yo no he hecho nada!-me quejé. Hasta me tenía manía el último día de clase, ¡estaba loca!.

-¡Sin rechistar!- gritó una vez más.

Me levanté de mi asiento, cogi las cosas y salí de la clase. Se podía oir como mis compañeros me idolatraban por haber conseguido que me expulsasen de clase el ultimo día.

Salí del aula, no tenía intención de ir al despacho del director asi que me fui a dar una vuelta por el campus. Tras diez minutos caminando sin dirección me senté bajo un árbol, saqué el libro que me estaba leyendo y comencé a leer, de tal manera que desconecte del mundo.

-Abieee... ¡Abieee!- oi una voz que me llamaba, abri un poco los ojos y vi a Marcel sacudiendome- ¿¡Te has quedado dormida!? ¿En serio?-comenzó  a reirse y yo me limite a estirarme disimuladamente.

-¿Que? Como si tu nunca te hubieses quedado dormido- dije seria pero a la vez con un tono de risa.

-Pues...- Marcel no acabó de hablar, aparecieron los del equipo de rugby y le dieron una colleja haciendo que sus gafas saliesen disparadas a mi lado.

-¿Sois gilipollas?- dije dándole las gafas a Marcel.

-Oh... pero mira quien es, la gemela "buena"- dijo uno de ellos haciendo comillas con los dedos.

-Callate imbecil- le dije levantadome y ayudando a Marcel a levantarse.

Todos empezaron a reirse, y como era normal, esperaba que Marcel bajara la mirada y ignorase lo que habia pasado, pero no, este tuvo que girarse y pegarle un puñetazo en toda la barbilla al mismísimo James Dean. Este no se quedó quieto y comenzaron una pelea. Intente separarlos pero lo unico que consegui fue un puñetazo por parte de James en el ojo.

-¿Estas bien?- preguntó preocupado otro chico del equipo.

-Sí- acto seguido, cogi mis cosas y me alejé lo mas posible de aquel lugar, al cual no tardaría en llegar un profesor, y por suerte Marcel no saldría con el ojo como yo.

Fui a la biblioteca en busca de mi hermana, solía estar en los ordenadores "estudiando" aun que en realidad estaria chateando con alguien.

Entre y ahi estaba ella, tan sumisa en la pantalla que no se percato de que yo estaba al lado.

-Raquel- la llamé para que desviase la mirada y me mirase a mi.

-¡¿QUE TE A PASADO?!-gritó esta viendo mi ojo que tomaba un color morado muy rápido.

-No a sido nada...- conteste quitandole importancia a mi ojo. -Lo importante es que seras tu la que irás a Inglaterra- sonreí amistosamente

-¿Hablaste con el?- preguntó mi hermana con los ojos abiertos como platos.

-No exactamente...- conteste agachado la mirada.