Aurora (Jongtae)

Rosa y gris

Jonghyun

Voy caminando por la calle, aún tengo 30 minutos antes de que la primera clase a la que asistiré en mi nueva universidad comience, por suerte ayer pude llegar luego de que paró la lluvia que me encerró en aquel café. Y como solo tardaré unos 10 minutos más en llegar, me doy la oportunidad de disminuir mi velocidad al caminar y recordar los eventos ocurridos ayer.

Luego de que el extraño pero cautivante joven que acababa de entrar al café, se mantuviera mirándome a los ojos por lo que a mi me pareció una eternidad, y me sonriera -y por alguna razón desconocida yo le devolví la sonrisa-, prosiguió a llegar al mostrador para pedir lo que parecía era un chocolate. Llevaba unos pantalones negros ceñidos a sus piernas, que eran a mi parecer bastante esbeltas para un hombre, una camisa blanca con unas letras que no alcancé a ver que decían, y encima llevaba una chaqueta de cuero negro que le asentaba muy bien, finalmente un par de zapatos negros, al parecer a este chico le gustaba mucho el negro. Mientras él pagaba la cuenta y yo me decidía a dejar de seguir viéndolo como si fuera un stalker, empecé a preguntarme que había sido ese raro sentimiento que me golpeó en el mismo instante que nuestros ojos se cruzaron. 

En tanto estaba perdido en mis pensamientos no sentí como alguien se acercaba a la mesa en la que yo me encontraba, hasta que escuché a alguien hablar.

-Disculpa, no te importaría si me siento en esta silla-dijo el chico de cabello rosa, señalando una que se encontraba frente a mí- es que realmente me gusta ver como cae la lluvia, realmente me relaja, y esta es la única mesa que se encuentra junto a una ventana.

Tardé más tiempo del necesario en contestar, ya que me quedé viéndolo mas de lo que se consideraría educado. Genial, creería que tengo algún retraso o dificultad para entender cuando alguien me habla.

-Claro, no te preocupes-respondí.

Él sólo sonrió y dispuso a sentarse.

Por unos momentos reinó un silencio algo incomodo, claro, yo no lo conocía, y no soy muy bueno en comenzar conversaciones con gente desconocida. Así que me dediqué a ver mi taza  ya que había terminado de tomar lo que había ordenado.

-Por cierto, mi nombre es Taemin.-dijo él, en el momento que escuché su voz algo dentro de mí se removió, creo  que tal vez estaba tratando de alivianar un poco la tensión.

-Jonghyun-respondí.

-Mucho gusto Jonghyun. Y dime vienes aquí seguido.

Me pareció que la pregunta era como demasiado común para hacerla a alguien que conoces en un café.  Tal vez de verdad le molestaban los silencios incómodos y no encontraba otra forma de comenzar una conversación con alguien que al parecer tenia el mínimo interés en hablar.

-Igual mucho gusto Taemin. Pues la verdad esta es la primera vez que vengo. Me acabo de mudar aquí, para estudiar en la universidad, y quería conocer un poco la ciudad antes de que empiecen mis clases mañana, pero creo que me perdí, así que decidí tomar un descanso y terminé aquí, y ahora también terminé encerrado por la lluvia.

Wow. No sé de donde salieron tantas palabras cuando, como dije antes, no soy bueno en conversar con extraños, pero en ese momento, luego de escuchar su voz, sentí inmediatamente destensarme y como aparecía lo que parecía ser una gran confianza para hablar con él de lo que fuera, era como si, lo conociera de hace años.

-Ah, enserio? Es genial tener aquí en la capital gente nueva que venga de otros lugares -me contestó- Y encontraste un buen lugar para refugiarte debo decirte, este lugar realmente tiene un aire acogedor, ademas de que la vista desde esta ventana es hermosa.

Volteó hacia la ventana, hice lo mismo y pude darme cuenta de que lo que veía era un árbol de flores de cerezo que se podía apreciar a unos metros desde donde nos encontrábamos. Me hizo preguntarme como no lo noté antes, pero bueno nunca me he interesado en los árboles o flores. 

Me pareció extraño el contraste entre el rosa en sus flores y el gris del cielo. Entonces volteé a ver a Taemin, era la misma combinación, creo que es casi el mismo tono de rosa en su cabello y de gris en sus ojos. También me pareció extraño.

-¿Jonghyun?

Entonces me di cuenta, había estado llamándome desde hace algún tiempo, y había estado viéndolo todo el rato. Claro, es que no podía evitar el seguir poniéndome en ridículo.

-Sí-contesté.

-Veo que te pierdes en tus pensamientos fácilmente-sonrió, y vaya que tenia una sonrisa hermosa, me dí cuenta ya que ahora lo tenía mas cerca que cuando me sonrió al entrar.

-Aunque fue una charla corta, fue un placer conocerte. Al parecer ya la lluvia pasó- al escucharlo instantáneamente miré a la ventana, efectivamente la lluvia había parado.-Tengo que irme, así que me despido, y suerte en llegar a tu destino.

Sonreí.

-Gracias Taemin, igual fue un placer conocerte, ojala vuelva a verte por aquí.-Vaya, ¿que me pasaba? de verdad desde cuando habló con tanta confianza y deseo volver a ver a una persona que apenas conozco.

-Claro que sí, nos veremos otra vez.

Lo dijo de tal forma como si estuviera afirmando que el sol saldrá cada mañana a la mañana. ¿Como estaba tan seguro? Es cierto que existe una buena posibilidad de que ocurra pero en una ciudad tan grande como esta, yo no lo aseguraría en la forma que él lo hizo.

Y así hizo su camino hacia la puerta del café para finalmente salir.

Después de unos minutos decidí que también debería seguir con mi plan de encontrar la ruta hacia la universidad.

Al salir del café automáticamente mis pies me llevaron a caminar acercándome al cerezo. Me paré bajo sus ramas y miré hacia arriba. Pude visualizar sus flores-son exactamente del mismo color de su cabello, decido finalmente-y más arriba de ellas, el cielo que aún permanecía algo gris.

-Rosa y gris. ¿Será una buena combinación? Nunca lo había pensado.-murmuré.

Volviendo al presente, estoy esperando el momento adecuado para poder cruzar la calle, la Universidad está solamente a una cuadra más de camino, pero aún sigo pensando en esa extraña sensación que desde ayer que estuve en el café no ha querido dejarme.

Las luces cambian indicando que ahora pueden pasar los peatones. "Tal vez solo sea la emoción de comenzar una nueva vida, será algo difícil pero podré hacerlo", esos son mis pensamientos mientras cruzo la calle. 

No me doy cuenta del carro que viene hacia mí- al parecer el conductor iba apurado y decidió cruzar en el último momento en que el semáforo cambió- hasta que lo tengo casi a un metro lo noto.

Mierda.

Siento como algo me empuja y caigo al lado al que intentaba llegar antes de que el maldito carro casi me matara. 

La caída dolió, pero dolió más cuando lo que sea que me había empujado cae sobre mí. En ese momento tengo los ojos cerrados y solo escucho que alguien dice con voz algo jadeante.

-Te dije que nos veríamos otra vez.

Abro mis ojos y me encuentro con un gris, como el cielo cuando está a punto de llover.