Voy por tí

1.3K 76 41
                                    

<<Mi Misaki desde hace ya algún tiempo ha estado saliendo mucho con Akihiko, espero que esa tortura para ambos acabe pronto>> Pensaba mientras observaba a mi amado besándose con Akihiko, una parte de mi ser se apuñalaba a sí mismo con cada beso que se daban.

Aparte la mirada de aquella escena porque mi celular comenzó a vibrar, era mi contacto del hospital así que contesté de inmediato.

— ¿Al fin tienes lo que te encargue?— Pregunté secamente.

— Por supuesto, me costó algo de trabajo así que quiero más de lo acordado.—  Sabiendo como es ya sabía que quería, con ese tono de voz tan profundo me decía todo lo que quería.

— Hablaremos de ello, ¿Dónde puedo verte? — Le conteste fríamente.

— ¿Hey por que tan frío? ¿Todo bien? —Pregunto preocupado.

— Si, todo bien. — Dije entre dientes mientras veía a mi amado muy cerca de Akihiko.

— Bueeeno. Veme en el bar que está cerca de mi casa. — Contestó.

— Está bien ahí te busco.

— Te veo en dos horas, bye. — Término algo animado y corté la llamada. <<Genial... lo que me espera, todo sea por mi amado.>>

Espere a que los "tortolitos" se fueran del parque de diversiones, después los seguí hasta su departamento.

Cuando comprobé que mi amado niño estaba seguro fui a arreglarme a mi departamento, no tarde mucho pero ya iba con un retraso de varios minutos, así que me apresure.

Cuando llegue al mencionado bar fui directamente hacia donde estaba mi querido amigo, era fácil notar su presencia ya que él sería lo que muchas mujeres ven como hombre perfecto: Su cabello castaño claro algo largo y despeinado lo hacía ver relajado, sus ojos azules eran tan bellos que te podías perder en ellos, un rostro anguloso y todo esto complementado por una altura exagerada mezclada con un cuerpo en buena forma. Todas las mujeres e incluso algunos hombres en el bar no dejaban de verlo.

Él no me vio llegar así que lo sorprendí abrazándolo por detrás, el se sorprendió pero cuando me vio se paró ofreciendo un asiento para sentarme.

— Hasta que llegas, te estabas tardando. — Dijo con una de sus típicas sonrisas de lado que derretirían a cualquier persona, cualquier persona menos yo.

— Lo siento, tenía cosas que hacer. ¿Tienes lo que te pedí? — Le conteste y me sonrió.

— Por supuesto que lo conseguí, aunque fue más difícil de lo que esperaba... — Espero al ver mi mirada de duda y continuó con la mano en la mejilla. — Una de las enfermeras casi me descubre suerte que con mis encantos ni lo notó, en fin, ¿en que te metiste ahora? Parece ser que el dueño de esos expedientes es importante. — Acabo y me miro con dulzura y duda.

— Es el chico del que te hablé, al parecer es amigo de una persona influyente.— Dije desinteresado intentando quitarle importancia.

— ¿Y apenas me lo mencionas? Bueno en fin... ¿Quieres un trago?— Asentí así que pidió dos bebidas y continuó — Oye, te conozco desde hace ya mucho tiempo... y se que este chiquillo es importante para ti, pero creo que esto será salirse de la ralla. Las cosas se complicaron por lo que padece, sería como robar a un niño pequeño.

— ¿Crees que me importa? Él tiene que ser mio.

— Lo se, lo se... siempre has sido así de cabeza dura, pero el muchacho perdió la memoria — dijo pasándome el archivo que había intercambiado y lo procedí a leer rápidamente para comprobar que no se hubiera equivocado. <<Es cierto, pero esto en lugar de hacer las cosas difíciles me ayudarán a conseguir mi cometido>> Pensé con una sonrisa interna.

lo que el destino me depara (junjou romantica, YAOI )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora