lo que el destino me depara (junjou romantica, YAOI )

Usagi

<¿Estará  pensando este señor que me iré con el sin conocerlo?>>

–  ¿Misaki…? – su rostro se convirtió en un gesto con algo de miedo – No me… ¿No me recuerdas?

–  N-no, no lo recuerdo, no se quien es usted… y puede ser peligroso irme con un extraño… – Akihiko escondió su rostro con su largo cabello, no tan largo pero lo suficiente para cubrir el gesto que tenia.

–  Misaki-kun dime… ¿Recuerdas como es que llegaste a este hospital, por que causa, claro esta? –   dijo el doc.

<<¿Mmm…? Espera un segundo… es cierto… ¿Cómo llegue a este sitio?>>   Pasaron varios minutos en silencio.

No recordaba nada…

–Ya veo… ¿Misaki qué es lo que recuerdas? Estoy hablando de lo que sea que recuerdes. – dijo el doctor algo angustiado.

–Veamos… – intento recordar lo que sea, la más mínima cosa… pero lo único que viene a mi es lo que e pasado desde que desperté… soy sincero y lo digo – P-perdón… no recuerdo mucho… a decir verdad… solo recuerdo lo que ha pasado desde que desperté…  – la voz se me quiebra, por la reacción de los dos señores que me están observando… por su preocupación marcada en el rostro… se que me veo aterrado, estoy aterrado. 

–  Misaki… ¿Recuerdas a Takahiro? – Me pregunta el joven de ojos morados, se nota que hay un gramo de esperanza en su mirada.

<<¿Ta-takahiro? Yo… yo, no recuerdo nada… ¿Quién es este hombre? ¿Por qué esa mirada esperanzada me afecta tanto? ¿Qué me pasó?  …  ¿Quién?  …  ¿Quién soy?>>

–   A juzgar por el silencio de Misaki-kun… no lo recuerda, ¿o me equivoco? –   dijo el doctor después de unos minutos.

Yo solo negué con la cabeza haciendo que Akihiko-san se acercara a abrazarme, sorprendiendome.

<<¿Eh? ¿Por qué me está abrazando? Esto es raro… pero… creo que lo necesito… al igual que el>> Correspondí a el abrazo, su abrazo es tan… cálido, tan tierno…  termina por romperme y lagrimas salen de mis ojos. El lo nota y se separa un poco. Me toma con dulzura el rostro y me limpia las lágrimas. 

Doc. se ve un poco avergonzado por lo que acaba de ver, pero aun así se dirige hacia el misterioso hombre que no se aleja mucho de mi.

–  Usami-san… Misaki-kun tiene un caso de amnesia, causado por el golpe en su cráneo, necesito checarlo bien para saber que tan grave es, aunque le recomiendo que después vean un psicólogo profesional, yo sé sobre el tema por la frecuencia en la que e visto este tipo de casos, pero no soy un experto.  –   después de escuchar esto Usami-san asintió, me libero de aquel lindo abrazo y dejo que me fuera unos minutos.

El doctor me hizo preguntas referentes a mi pasado pero no fui capaz de responderlas… me hizo más estudios, al terminar, Usami-san me tomo de la mano, su tacto me tranquilizo.

–  Muy bien… –  dijo el doctor un poco más relajado pero, notablemente cansado.

–  ¿Qué le pasará a Misaki? –  dijo el peligris alterado pero con compostura.

–  Bueno, tiene un problema de amnesia, por experiencia me atrevería a decir que no es tan grave; e visto casos peores, solo el tiempo dirá si sanara, en algunos casos la memoria regresa sola, pero en otros regresa tras ver o vivir algo que le regresa la memoria, les recomiendo salir  a caminar o a pasear a lugares que el haya conocido, por que así pueden llegar recuerdos… También les advierto que los recuerdos pueden llegar en cualquier segundo, puede tardar desde horas, días, hasta años en recordar, lo único que necesitan es paciencia… –  dijo el doctor escribiendo algo –  también, como ya dije, será bueno que Misaki-kun valla con un psicólogo… ya que yo no se tanto del funcionamiento de este problema como tal… por el momento he hecho todo lo que esta a mi alcance… perdón por no hacer mucho… si surge algo, una emergencia o algo… este es mi numero; Usami-san confió en que usted lo cuidara bien…–  Le entregó a Usami-san el papelito en el que estaba anotando.

–  Muchas gracias Doc. si necesitamos algo le llamo, ¿Cuándo cree que podrá ir a casa?

–  Cuanto antes posible, si gustan, ya hemos hecho todos los exámenes físicos que necesitaba… y lo que tiene recetado es descansar, y si el dolor de cabeza continúa… llámenme. Llenare los papeles necesarios para que puedan salir, necesitare algunas firmas de usted, señor Usami…– se acerco hacia la salida, abrió la puerta y dijo – en unos momentos podrán irse… claro… si eso es lo que desea Misaki-kun… – desapareció en cuestión de segundos.

<<¿Estará bien  irme con este señor?>> miro mis manos, nervioso. 

<<Desde un principio, aunque no sea mucho tiempo, este hombre a estado junto a mi… y… aparenta saber de mi vida… lo que significa…>> levanto la mirada y me le quedo viendo un rato a esos hermosos ojos que tiene, parece muy pensativo.

Cuando se percata de mi mirada casi permanente en el, mi timidez se va por un rato y decido hablar.

–U-usted… conoce… sobre mi vida… ¿No es cierto?

–Por supuesto, puede que… sea el que más te conozca en esta vida…– dijo él, algo extrañado, yo diría que el de todas las cosas que creyó que preguntaría, esa no era una de ellas.

<<Lo sospeche…>>  aun algo confundido continué.

–Si ese es el caso…  supongo que… iré con usted. –Algo más que asombro se asomo en su rostro, algo más fuerte que esperanza. – aunque… hay algo que aun me inquieta… – pare unos segundos, la duda se veía mesclada con ese otro sentimiento extraño en su rostro, haciéndolo algo gracioso y tierno, incluso, indefenso… – ¿Hay gente que… me aprecia, al igual que usted? 

En un pequeño periodo de tiempo pensó su respuesta, algo me dijo que en su cabeza había una guerra por discutir, para saber si me decía la verdad o no…

–A ti no te puedo mentir, aunque sea lo que más desee, ese rostro tuyo… me lo impide… – hace una pausa, me toma la mano y continua – La verdad, es que, hay mucha gente que te aprecia… se puede decir que eres un pedazo de cielo, lo digo porque por tu carácter muchos te quieren.  – <<¿P-pedacito de cielo?>> noto calor en el rostro, apuesto a que me e sonrojado. Su gesto se modifica, ahora es triste, como si recordara algo lejano, me da tristeza verlo así, con mi mano libre acaricio nuestras manos entrelazadas. 

–Bueno… lo que quería decir es que… usted ahora mismo… está muy preocupado y triste por mi causa… y no me intente decir que eso no es cierto… ahora mismo lo estoy viendo…  El punto… es que, no quiero que la demás gente se preocupe de esa manera por mi… – Al parecer lo que dije, causo mucho en el… después de unos segundos de pensar y digerir lo que dije se acerca a mí.

–Misaki… – se acerca aun mas a mi, me paralizo al ver que nuestros rostros están demasiado cerca – …tu, nunca cambias… pase lo que pase… hare lo que quieras… – se junta aun más a mi, respiro dificultosamente y siento mi cara caliente, de seguro esta mas roja que un tomate – siempre eres el mismo… si quieres mantener esto en secreto… bueno.. de eso ya hablaremos.

Se abre la puerta y escucho pasos, pero lo siento muy lejano, mis sentimientos están en lo que sentí en ese momento con Akihiko-sama. 

–Perdón si interrumpo algo… –dijo el doc. – pero ya solo falta la firma de Usami-sama para que se puedan marchar… pero primero… ¿Misaki-kun… si te quieres ir con él? – pregunta expectante.

Ambos me miran. Y hago una decisión que hará que mi futuro cambie…

–Quiero ir con Usami-sama… eso quiero… – La felicidad se ve en el de pelo blanco-plata.

–Dime Usagi… así me llamabas antes… – sonrió tímidamente y repito ese curioso apodo. 

<<Usagui… lindo apodo… me gusta…>>