Leyéndote la mente

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CAPITULO 8: Leyéndote la mente

¿Qué puede haber ahí?, mi interior no iba tan fácil ceder a su petición, es normal que una sea curiosa, esta dentro de lo que nos hace humanos. Entonces, quiero saber que ocultas Cris. ¡Sí!, le diré que no valen las excepciones.

Por otra parte, porque me sentía dudosa, algo dentro de mi pecho se contraía… ¿Quién soy yo para decirle que no?, Cris invento las reglas del juego. Suspire en resignación.

No hay problema – contesté con una voz pausada y aparentando falta de interés – Seguiré con lo demás.

¿En serio? – Replicó Cris, había algo en esa forma de hablar – pensé que…uhm,… entonces continua con la investigación. Vaciló y me regalo una sonrisa.

Desilusión, su expresión, su voz titubeando…que tenias en la cabeza, ¿Qué pensaste?, comparte conmigo Cris, me desespero, aún no puedo leerte la mente pero te prometo desarrollar esa habilidad, espérame un poco.

No podía alejar mi pensamiento de las palabras de ella, quería que respondiera que “No” ¿es eso? No se leer entre líneas, mi nivel de empatía es a veces subnormal.

*** ***

Continuando el juego, seguía sacando cosas de su bolso, era bastante amplio.

Alguien olvidó su… ¿sus medias? – lo solté tal bomba atómica fuera, y no era para mas, quien carga sus medias. Que decepción, parecía tan limpiecita la chica.

Mi cara de sorpresa, apareció instantáneamente. Voltee, seguro tenia una explicación convincente.

Jajaja – Se reía cogiéndose el estomago, y hasta un par de lagrimas salieron de sus ojos. – no son mías…

¡Eso es peor! – Agregué totalmente pasmada – quien le carga las medias a otra persona…

Un foquito se me prendió, si no eran de ella entonces alguien muy cercano; nadie acepta por ser buena gente llevarle en su bolso las medias a un amigo…un novio, tal vez.

Ya no quiero buscar nada, es un estúpido juego.

Estoy enfadada, mi pulso se acelera, la expresión que toma mi rostro es de indiferencia oculta con irritación. No quiero saber de quien es, no es mi incumbencia. Recién te conozco.

Ja Ja Ja…son para un sketch publicitario – confesó, sin siquiera fijarse como de loca me había vuelto al pensar eran de alguien, que tuviera el privilegio de llamarla, su novia – Un trabajo de la universidad…teníamos que crear un escenario para venderlos.

Volví a mi burbuja

Transformaba mis emociones a su antojo, y ni lo notaba. Que niña.

Te creeré por ahora – le aseguré, mis músculos faciales se relajaban y crearon un gesto de infinita felicidad – No acaba todavía la inspección… ¿algo que debas advertirme?

Tengo un montón de chucherías…cualquier cosa que caiga en mi bolso nunca mas sale de ahí – pase saliva ante este comentario, me estremeció un poco su risita al terminar de hablar, Cris tiene un lado maquiavélico… ¿cabrían cadáveres en ese bolso?

Una cámara fotográfica, lista para captar el momento…-hablé en voz alta – esto me sugiere que sigues una carrera de fotógrafa, publicista o algo por el estilo.

Futura comunicadora, y de las mejorcitas del país – indicó Cris apuntándose con el índice hacia ella – Si necesitas de mis servicios, avísame nomas, te daré un descuento especial.

Esa ceja ligeramente elevada, el morderse el labio instintivamente, y la miradita que me lanzó…puso el punto en esta historia. Seguí respirando para no desmayarme, y en fin, si moría ¿Quién seguiría contando este relato? Volaba tan lejos… no se que decir, me robas el sentido común.

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