Parte 1. «La boda»

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Si me hubiesen dicho hace un año que me iba a encontrar sentada en la primera butaca de la iglesia, presenciando la boda de mi madre, me les reiría en la cara.

Pero así era.

Mi madre se estaba casando por segunda vez. Cuando, luego de separarse de mi padre ya hacía diez años, juró nunca más enamorarse.

Pero no contaba con que, nueve años después, aparecería un Herrera en su vida. Y mucho menos que se casaría con él un año después... ¡Pero así era!

El señor Herrera a decir verdad era un mono, educado, galán, cariñoso, buen padre y buen novio.

Para nada parecido al gilipollas de su hijo, Poncho.

Había tratado con él en unas dos ocasiones, en una lo habían obligado a asistir a una cena familiar y otra en la fiesta de cumpleaños de su padre. Las dos, con reales intenciones de largarse rápidamente de ahí.

-¿De verdad tuve que dejar a Claudia plantada para venir a ésta cena a conocer a la.... hija de tu mujer? -lo escuché hablar con su papá.

-Poncho, por favor. Comportarte y se cortés. Tengo intenciones de casarme con Tysha.

-¿Estás de broma, no?

-No, así que te aconsejo que vayas acostumbrándote a Anahí.

-No, pides demasiado. No podría acostumbrarme a esa niñita engreída y superficial ni porque viviéramos juntos... ¡Y ni que se te pase por la cabeza, papá! -continuó, al ver la sonrisa de su progenitor.

Ahora, meses después, se encontraba del otro lado del pasillo, junto con los familiares del novio. Su semblante era serio, dando a entender que no estaba muy contento, mientras se escuchaba al sacerdote dar los votos:

-Marichelo, ¿aceptas a Alfonso como tu legitimo esposo, para amarlo, cuidarlo y protegerlo hasta que la muerte los separe?

-Si, acepto. -dijo mi madre al borde de las lágrimas.

-Y tú, Alfonso. ¿aceptas a Marichelo como tu legitima esposa para amarla, cuidarla y protegerla, hasta que la muerte los separe?

Lancé mi mirada a Poncho que en ese momento apretaba la mandíbula.

-Si, acepto.

***

En la recepción lo perdí de vista.. ¿Habrá tenido el tremendo descaro se irse? No, se que es idiota, pero no tanto.

-¿Any, neta ese era Poncho? - me seguía preguntando mi amiga, aun sorprendida.

-Si, Dulce. Era él.

-¡Pero que comible está, Santo Dios! ¿Por qué no me habías dicho lo guapote que estaba?

-Porque lo imbécil le nubla lo guapo.

-Any tiene razón, Dul. -dijo Maite- de nada le vale tener el cuerpaso que tiene, la cara que tiene, los ojos tan hermosos que tiene, la barba tan..

-¡Ya, caray!

Las dos rieron.

-Ya tranquila amiga, no te enojes. Tampoco creo que lo vayas a ver mucho, si en este año lo viste solo dos veces y eso por milagro de Dios.

-Exacto. A lo mejor y ya se fue. -rió Mai.

Había pensado lo mismo cuando en ese instante, lo vi entrar agarrado de manos a una morena alta y delgada, enfundada en un frívolo vestido negro con escote en la espalda.

Era muy linda, para que negar. Y muy elegante también.

Se acercaron a su padre, lo felicitaron y conversaron un rato, para luego ir a la pista a bailar.

-Aquí estás, muñeca. Te he estado buscando. -me llegó Kuno, mi novio, por la espalda.

-Hola mi amor. -me voltee y lo besé. - ¿Quieres bailar un poco?

-Claro que sí, amor mío.

Nos dirigimos a la pista de baile, llegando lo mas cerca y discretamente posible a Poncho y su novia. Quería espiarlos... solo por curiosidad.

Mientras bailaba con mi novio, Poncho volteó a verme. Yo estaba de perfil, y me recorrió la mirada por el cuerpo, deteniéndola en mi trasero para luego sonreír.

No podía ser tan cerdo...

Levé mis manos al cabello de Kuno y le dije algo sensual al oído que ya ni recuerdo qué. Él me apretó hacia su cuerpo y me dio besos en la frente, mientras bajaba sus manos a mi espalda baja, ahí donde comenzaban mis nalgas. El entornó los ojos y yo sonreí.

-No tienes una idea de lo mucho que te amo, Anahí. -dijo Kuno, haciéndome volver a la realidad.

-¿Ah? Eh, yo también mi amor.

-Eres lo más importante en mi vida, bonita.

-Y tú también.

Me acarició la espalda con cariño y acercó su cara a la mía.

-Y te deseo mucho... -susurró en mi oído. -¿Vienes a casa conmigo esta noche?

.................

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Mi Hermanastro (terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora