Right where you are | Jack Johnson & Cameron Dallas

Capítulo 13

Les rogamos a los pasajeros que vuelvan a sus asientos y abrochen sus cinturones, gracias. -anunció la voz metálica de los altavoces.

-¡Nueva York nos espera!

-He avisado a Ricky para que venga a buscarnos.

-Perfecto.

Salimos del avión y fuimos a esperar las maletas. Me encantaba viajar pero no había nada más que odiara que la rutina del aeropuerto, es algo tan agotador que supera mis límites. Cuando recogimos nuestro equipaje, al otro lado del control se encontraba Ricky acompañado por Connor.

Me tiré a abrazar a Ricky, parecía que no le había visto en años y a penas habían pasado unos meses, Lucía saludó a Connor y después a la inversa.

-¿Donde os vais a quedar?- preguntó Connor.

-En un hotel, tomad la dirección.-contestó Lucía mientras les daba un papel con la dirección apuntada.

-Si no os encontráis cómodas, podéis pasaros por casa, siempre estará abierta para vosotras.

-Gracias.- respondimos las dos al unísono.

-Además si hace falta, podemos mandar a este -señalando a Connor- al sofá.

-¡Oye!-reclamó él.

Tardamos poco más de 20 minutos en llegar al hotel. Nos ayudaron a subir el equipaje, y les invitamos a pasar un rato con nosotras.

Lucía se ausentó un momento para contestar a la llamada de Indira en Skype.

-¿Puedo pediros un favor?

-Claro- respondió Ricky.

-Después de lo del sofá, me lo pensaré.
-Necesito vengarme de alguien.

-Tú, ¿vengarte de alguien?

Asentí con la cabeza gacha.

¿Se puede saber de quién estamos hablando?

-Bueno, ¿es necesario?

Los dos me miraban de manera cómplice.

-Está bien -suspiré- Skate Maloley.

-¿Mejor que no preguntamos que ha pasado no?

-Entrad en su instagram y os haréis una pequeña idea de que ha pasado.-sonreí con algo de sarcasmo.

Sus reacciones fueron algo sorprendentes, en cuanto vieron la foto tenía dos pares de ojos encima mía.

-Y bien, ¿alguna idea?

-¿Otra foto?

-Descartada, no voy a jugar a lo mismo cuando puedo jugar mejor, o eso creo.

-¿Un hastag?

Podría ser una buena idea, había gente especulando en algunas redes sociales quién podría ser aquella chica, y entre las opciones estaba yo. Así que lo mejor que podría hacer es admitirlo y comenzar el hastag.

Cité el link de la foto, le mencioné a él, y añadí "deja de publicar cosas sin permiso :)." Enseguida mis interacciones echaban humo y los fans habían creado un hastag.

Lucía volvió al salón y me enseñó que ella también tenía bastantes notificaciones.

-Era lo correcto, mañana en el programa me encargaré yo de toda esta situación, no te preocupes.

Suspiró poco convencida y despareció de mi vista.