Mi vida apesta.

Quiero enamorarme.

Me siento sola. Estoy sola, no soltera. La soltería se disfruta, estas feliz y sin nadie porque lo quieres así. Estar sola es estar sin nadie, nadie que desee tu carne, nadie a quién decirle "te quiero", nadie con quién bromear ni nadie con quién jugar. A veces me siento a ver el cielo y su maravilloso paisaje, las nubes flotando, el color que cambia, y me pierdo en el envidiando a las nubes. Tan independientes, sin preocupaciones, livianas, suaves y tan complejas. Veo a todos mis amigos con parejas, me consuelo pensando que terminarán pero, joder, los envidio. Envidió sus estúpidos abrazos y sus pegajosos besos, sus babosas palabras de amor, sus ojeras que dicen que estuvieron hablando hasta la madrugada, sus peleas sin ningún absoluto sentido. Joder, yo también quiero enamorarme.